MUNDO
¿Por qué China realiza pruebas anales para detectar la covid-19?
Esta prueba tiene extrañados a muchos ciudadanos del país y del mundo entero.
Cada vez más seguido, China recurre a los test rectales para detectar la covid-19 en personas que tengan riesgo de contagio y en los viajeros que llegan del extranjero, pues lo consideran un método más fiable a pesar de ser criticado por los internautas.
El gigante asiático ha logrado frenar en gran medida la epidemia desde principios de 2020 y desde mayo solo se han registrado dos muertes.
En las últimas semanas se han producido pequeños brotes localizados que llevaron a las autoridades sanitarias a realizar test rápidos y masivos en decenas de miles de personas, mediante pruebas de tipo PCR. Estas son las muestras que suelen tomarse de la nariz o la garganta.
Sin embargo, según la televisión pública CCTV, los residentes de varios barrios de Pekín donde se descubrieron contagios recientemente fueron sometidos a un test rectal.
La medida también se está imponiendo en las personas en cuarentena obligatoria en los hoteles, incluidos los viajeros procedentes del extranjero.
El test rectal “aumenta la tasa de detección de personas infectadas” porque el coronavirus permanece más tiempo en el ano que en las vías respiratorias, declaró ante la CCTV el doctor Li Tongzeng, del hospital You’an de Pekín.
En internet, las reacciones el miércoles oscilaron entre el miedo y la burla: “No es demasiado doloroso, pero sí superhumillante”, señaló un usuario en las redes sociales.
SI PIENSAS QUE POR LA NARIZ ES INCÓMODO… EN CHINA APLICAN PRUEBAS DE RECTALES DE COVID!
— TuritoExa (@ArturoOrtizExa) January 27, 2021
Zas culebra...
tu Cuál prueba prefieres por la nariz o por la co...recto? pic.twitter.com/GTSN6RXe4U
“Me han hecho dos exploraciones anales. En el proceso, también me tomaron una muestra de la garganta. Cada vez, temía que la enfermera se olvidara de cambiar el bastoncillo entre las dos”, bromeó otro usuario de Weibo.
La CCTV dijo el domingo que no se generalizarán las pruebas rectales porque “no son lo suficientemente prácticas”.
China, que ya restringió severamente las llegadas internacionales desde marzo de 2020, reforzó las restricciones en los últimos meses.
Todas las personas que quieran viajar al país deben presentar dos test negativos (PCR y serológico) antes de embarcar y, a su llegada y por cuenta propia, realizar una cuarentena de al menos 14 días en un hotel.
Un año después del brote de la pandemia
Casi un año después de que China confinara la ciudad de Wuhan, ahora aparentemente libre del coronavirus, la pandemia avanza en casi todo el mundo y desata protestas en Brasil.
Con un tránsito desenfrenado, el transporte público funcionando a pleno y los parques repletos, la ciudad china de 11 millones de habitantes donde surgió el virus da muestras de muy buena salud.
Sin embargo, en otras partes del mundo la pandemia se incrementa. Ahora mismo Europa enfrenta una situación cada vez más grave, con problemas de producción que afectan el suministro de las vacunas de AstraZeneca-Oxford y de Pfizer-BioNTech.
En Brasil, uno de los países más afectados por la pandemia, miles de personas protestaron el sábado contra el presidente Jair Bolsonaro en la capital, Brasilia, así como en Sao Paulo y Río de Janeiro, pidiendo la salida del poder del mandatario y una “vacunación para todos”.
Científicos brasileños advirtieron que el país puede quedarse sin dosis de vacunas y equipos básicos como jeringas, justo cuando comienza su campaña de vacunación, y muchos de ellos culpan al gobierno nacional.
Por su parte, el primer ministro británico, Boris Johnson, afirmó que la cepa que surgió en el Reino Unido podría ser más mortal y contagiosa que la que apareció en Wuhan hace un año.
’'Además de propagarse más rápidamente, ahora también parece que hay alguna evidencia de que la nueva variante puede estar asociada con un mayor grado de mortalidad”, afirmó en una conferencia de prensa.
Gran Bretaña informó de muertes récord por la covid-19, el dato más alto de Europa, tras un aumento en los casos y hospitalizaciones desde que la variante se identificó por primera vez en septiembre.
En Estados Unidos, el presidente Biden dijo que el virus está creciendo. “Estamos en 400.000 muertos, pero se espera que superemos los 600.000”, alertó.
La covid-19 ya mató a más de 2,1 millones de personas en el mundo e infectó a más de 10 millones, en tanto causa enormes daños en la economía. En América Latina, por ejemplo, las exportaciones cayeron hasta los niveles de la crisis financiera global de 2008.
Con información de AFP