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Prisa, grupo de medios oficialista de Pedro Sánchez, se queja porque Vox lo veta
Según un editorial de El País, sus periodistas no pueden acceder a los lugares donde el partido realiza eventos públicos, lo que significa una clara violación a la libertad de prensa.
El Grupo Prisa, conglomerado de medios de comunicación español, del cual hace parte el periódico El País y la Cadena SER, ha utilizado una de sus editoriales para dejar expuesto al partido de ultraderecha Vox, a quien señalan de haber ejercido un veto sistemático para impedir ejercer la labor periodística a sus colaboradores, afectando así la libertad de prensa.
Según la editorial titulada “Vox veta a EL PAÍS”, los obstáculos para el ejercicio periodístico vienen desde 2019, tiempo en el que comenzaron a surgir argumentos como el de “aforo completo” de las instalaciones donde el partido político entregaba alguna rueda de prensa, algo que los comunicadores podían desmentir a simple vista. Así mismo, señalan que desde Vox ignoran las solicitudes para entrevistas o para tener acceso a la información.
“Desde 2019, Vox ha negado sistemáticamente la acreditación a los medios de Prisa, tanto EL PAÍS como la Cadena SER, para impedir la cobertura informativa de sus ruedas de prensa o actos de partido en su sede o en locales alquilados, alegando un aforo completo, que a menudo, mostraba muy visibles y amplios vacíos, o sin responder a las solicitudes. El derecho a la libertad de información está amparado en el artículo 20.1 de la Constitución y también en el 19.2 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, que España suscribe, y que regula “la libertad de buscar, recibir y difundir informaciones e ideas de toda índole”, señala El País en su editorial.
En sintonía con lo sucedido, el medio español indicó que, pese a que este domingo 23 de julio, el país ibérico vivirá una nueva jornada electoral en la que se definirá la composición del Congreso y del Senado, no han recibido respuesta alguna para que puedan hacer el cubrimiento pertinente desde la sede electoral del partido de ultraderecha.
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“Impedir que un medio acerque a sus lectores una información relevante para la ciudadanía —como lo son los actos públicos de un partido financiado en un 60 % con dinero público y concurrente a las elecciones— es obstruccionismo democrático, vulnera de forma explícita el artículo 6 de la Constitución y deja al electorado con un ángulo muerto sobre qué sucede en los actos públicos que la ultraderecha española celebra en sus locales”, agrega el medio en la editorial.
El País señaló que el propio Santiago Abascal, presidente de Vox desde 2014, había señalado otras razones diferentes a lo relacionado con el aforo para haber vetado a los medios del Grupo Prisa. Según recoge el diario, “el líder ultra puede no contestar las preguntas de un periodista”, pero lo que no puede hacer es negar el acceso de los medios a la sede del partido o a los lugares donde tiene eventos públicos, esto, por el inconformismo del propio Abascal con un editorial publicado el 6 de noviembre de 2019 en el que, según el líder de la ultraderecha, se indicaba que “a Vox hay que aplicarle un cordón sanitario”.
“La consecuencia que extrajo el líder de Vox es que su partido está autorizado a reaccionar “de alguna manera”, según sus palabras, pero esa manera no puede ser vetar la presencia de periodistas del grupo Prisa en sus sedes, según la misma JEC y el Tribunal Supremo”, señaló el medio.
Elecciones en medio del verano más caliente
Las elecciones legislativas en España del domingo tendrán lugar en vacaciones de verano, lo que llevó a más de dos millones de personas a votar por correo, una alta cifra que alimentó temores de manipulación, explotados por la derecha y la ultraderecha.
Unos 2,6 millones de personas solicitaron votar por correo, un 6,9 % del total de los 37,7 millones de electores, una cifra inédita en este país donde votar no es obligatorio.
El interés ha sido tal que la Junta Electoral decidió este jueves, fecha límite, “ampliar el plazo para la entrega por los electores de los sobres de votación en las oficinas de Correos hasta el viernes”, para “facilitar al máximo el derecho de sufragio de los ciudadanos”.
Desde que se inició la campaña, la oposición ha sembrado dudas sobre la capacidad del servicio postal de satisfacer la elevada demanda, insinuando que podrían quedarse papeletas sin contar.
“Le pido a los carteros de España que trabajen al máximo, mañana, tarde y noche y, aunque no tengan los refuerzos suficientes, que sepan que custodian algo que es sagrado de los españoles, que es su voto”, afirmó la semana pasada el líder del Partido Popular (PP, conservadores), Alberto Núñez Feijóo, favorito en los sondeos.
El jefe de la formación de ultraderecha Vox, Santiago Abascal, dijo el martes estar “extraordinariamente preocupado”, ya que, a su juicio, el servicio postal no ha contado con “los medios” necesarios. Eso se une a “la mala intención de convocar elecciones en el periodo vacacional de los españoles”, agregó.
*Con información de AFP