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¿Qué sucede después de la muerte? Estas son las inquietantes respuestas de científicos
En una de las fases, Fleischmann evoca lo que para algunos pacientes fue su “experiencia fuera del cuerpo”.
Si hay o no vida después de la muerte es un cuestionamiento de larga data, pues han sido años en los que tanto la religión como corrientes científicas han intentado dar, por su lado, una explicación. La potencial existencia de un plano o escenario que trasciende lo terrenal sigue siendo objeto de ‘interminables’ discusiones.
La incertidumbre se aviva cada vez que, por ejemplo, alguna persona asegura haber tenido experiencias cercanas a la muerte y tras las cuales sus vidas dieron un giro de 180 grados. Entre los testimonios coincidentes está la supuesta sensación de cómo el alma observa, desde arriba, el propio cuerpo (ciertos casos registrados en hospitales).
Con el ánimo de entregar un mayor acercamiento al tema, el médico europeo Thomas Fleischmann ha recopilado las que, según su análisis, son las fases que le ocurren al alma fuera del cuerpo. Este hombre llegó a la siguiente conclusión, con base en una experiencia por más de tres décadas en las cuales ha habido pacientes que aseguran “regresar de la muerte”.
Una experiencia en cinco etapas
En los más de 35 años que Fleischmann ha sido testigo tanto de decesos como de otros casos en los que el personal de urgencias logró, mediante las técnicas de reanimación, traer ‘de vuelta’ a una persona, uno de los aspectos más inquietantes aparece cuando se determina el fallecimiento médicamente de un paciente, pero minutos más tarde la determinación sufre cambios.
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Aunque no hay predominancia de respaldo científico, el médico hizo el análisis con base en el testimonio de sus pacientes.
Según el experto, la primera etapa consiste en un cambio abrupto en el que la persona se despoja de cualquier dolor. “Toda la ansiedad se ha ido, todo el miedo se ha ido, todos los ruidos se han ido, y solo hay paz, calma y tranquilidad. Algunos reportan alegría”, recogió de su conclusión el diario británico Daily Star.
La segunda fase maneja un concepto que suele escucharse y es la supuesta “experiencia fuera del cuerpo”. Es en esta cuando los pacientes aseguran sentir cómo su alma abandona la ‘masa’ y pueden observarse a sí mismos, además de la situación que se desarrolla a su alrededor (por ejemplo, la labor de los doctores si la vivencia es en medio de una intervención quirúrgica).
Posteriormente, Thomas Fleischmann, referido por el medio inglés, menciona “ruidos terribles, olores terribles y criaturas terribles” cuando el individuo atraviesa la siguiente etapa. Se trataría de vivencias que no son generalizadas, pues, según él, más del 90 % de los testigos aseguraron que (en vez de ese instante), tuvo una sensación de comodidad.
En la cuarta fase toma relevancia lo que mantiene la creencia en algunos de una luz en medio de “la oscuridad total” y cuya característica principal es el ser “muy cálida y atractiva”. La última etapa es descrita por el especialista de urgencias como “un entorno hermoso, con bellos colores y en muchos casos oyen música y presencian un sentimiento de amor incondicional”. Aquí hay una peculiaridad y es que, de acuerdo con Daily Star, la cantidad de personas que llega a esta y lo cuenta no supera el 10 %.
Científico descarta otra vida
Por otra parte, el físico y docente estadounidense, Sean Carroll, se inclina en la física cuántica para cerrar la perspectiva de vida, luego del ciclo terrenal. Analistas españoles del Consejo Superior de Investigaciones Científicas explican esta rama como una base para entender los “fenómenos naturales”.
En cuanto al asunto en mención, Carroll cree que nada puede desarrollarse más allá de las leyes físicas y esto envuelve a la conciencia. “No hay manera, en esas leyes, de permitir que la información almacenada en el cerebro persista después de que muera”, asegura el experto, según recogió El Confidencial.
Para él si la evidencia apuntara a una continuidad de la vida cuando el corazón deja de latir, entonces “el campo cuántico habría revelado partículas y fuerzas espirituales”.