Mundo
¿Qué tanta presencia tiene realmente el Tren de Aragua en Estados Unidos?
El gobierno de Donald Trump le declaró la guerra al grupo criminal.


El Tren de Aragua, una organización criminal originada en Venezuela, ha expandido su influencia más allá de las fronteras sudamericanas, llegando incluso hasta los Estados Unidos. Esta pandilla, que comenzó en una prisión venezolana, ha sido vinculada a actividades delictivas como extorsión, tráfico de personas y narcotráfico en varios países de toda América Latina.
Como ejemplo del alcance que ha tenido el grupo criminal en Estados Unidos, en enero de 2024, el agente especial adjunto del FBI en El Paso, Texas, Britton Boyd, confirmó la presencia del Tren de Aragua en territorio estadounidense. Boyd señaló que tenía pruebas de que miembros de la pandilla habían cruzado la frontera y se encontraban en tierra estadounidense, mezclándose con grupos de migrantes que solicitaban asilo de manera legal.
Además, en noviembre de 2023, la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos detuvo a 38 personas que presuntamente integraban el Tren de Aragua al intentar ingresar al país. Estas detenciones ocurrieron en seis sectores diferentes a lo largo de la frontera sur, lo que indica una estrategia de parte del grupo criminal para evitar la detección.

La preocupación por la presencia de esta organización llevó al gobierno del entonces presidente Joe Biden a designar al Tren de Aragua como una organización criminal transnacional en julio de 2024. Esta designación permite al Departamento del Tesoro de Estados Unidos aislar a sus miembros del sistema financiero estadounidense y aplicar sanciones más severas.
Lo más leído
En febrero de 2025, el FBI desmanteló una presunta red de trata de personas en Tennessee, vinculada al Tren de Aragua. Ocho ciudadanos venezolanos fueron acusados de cargos federales relacionados con la explotación sexual de mujeres jóvenes de América del Sur y Central. Los acusados imponían deudas infladas a las víctimas y las obligaban a realizar actos sexuales bajo amenazas de daño a ellas o a sus familias.
La administración del presidente Donald Trump también tomó medidas enérgicas contra el Tren de Aragua. En marzo de 2025, Trump invocó la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798 para acelerar la deportación de miembros de esta pandilla, designándolos como una fuerza invasora. Esta acción permitió la detención y deportación de individuos asociados con el Tren de Aragua que, aunque fue temporalmente bloqueada por un juez federal, no evitó la expulsión hacia El Salvador 238 presuntos criminales de esa organización.

Además, la nueva fuerza operativa interinstitucional del FBI en Virginia arrestó a 214 criminales en un lapso de dos semanas, incluyendo a miembros del Tren de Aragua y de la MS-13. Esta operación, que involucró a múltiples agencias de seguridad, se centró en detener a criminales violentos y migrantes ilegales vinculados al crimen organizado transnacional.
A pesar de estas medidas, ha habido críticas y desafíos para la administración estadounidense. Ya que familiares de deportados han disputado las afirmaciones del gobierno de que sus seres queridos son criminales peligrosos, argumentando que muchos no tienen antecedentes penales y han sido detenidos basándose en cosas superficiales como tatuajes. Además, las deportaciones han sido criticadas por su dureza y por la falta de pruebas concretas que vinculen a los migrantes con delitos.
La presencia del Tren de Aragua en Estados Unidos es una cruda realidad confirmada por diversas autoridades federales en el territorio norteamericano. La expansión de esta organización criminal representa un desafío significativo para las agencias de seguridad del gobierno Trump, que continúan implementando estrategias para combatir su influencia y actividades delictivas en el país.