ESTADOS UNIDOS
Rage: el nuevo libro que tiene en problemas a Donald Trump
El periodista Bob Woodward, famoso por su cubrimiento del escándalo de Watergate durante la presidencia Nixon, saca su segundo libro acerca de Donald Trump. Esta vez uno de los asuntos centrales es el manejo de la pandemia.
El libro Rage sobre Donald Trump y su turbulento paso por la Presidencia no necesitó ni si quiera salir al público para despertar una ola de comentarios acerca de su contenido y también del criterio ético de su autor. La publicación de Bob Woodward, un veterano periodista del Washington Post, famoso por su cubrimiento del escándalo de Watergate, estará disponible en estanterías hoy. Este es el segundo libro que hace sobre Trump, el primero se llama Fear y fue publicado en septiembre de 2018.
En sus páginas revela que Donald Trump admitió haber restado importancia a la pandemia de manera intencional, aun conociendo el peligro que representaba para la salud de los estadounidenses y el mundo.
Un artículo del Washington Post, medio que tuvo acceso al libro anticipadamente, cuenta que Woodward narra una reunión en la oficina Oval en enero, en la que el consejero para la seguridad nacional, Robert O’Brien, dijo al presidente con respecto al brote del virus en China: “Esta será la más grande amenaza a la seguridad nacional que deberá enfrentar durante su presidencia”. Otro de sus consejeros señaló que la emergencia sanitaria mundial podría tener las dimensiones de la gripe española de 1918.
Según Woodward, tiempo después, en una de las 17 entrevistas que hizo a Trump para el libro, el presidente afirmó que la situación era mucho más grave de lo que había admitido. “Tú solo respiras y así es como se pasa (…) eso lo hace muy difícil, es muy delicado. También es mucho más mortal que la peor gripa”, dijo.
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Dichas afirmaciones contrastan con el discurso que mantuvo durante meses cuando el virus se expandía por el mundo y Estados Unidos. Para entonces, Trump afirmaba que el covid-19 no era diferente a otras gripas y señalaba como apocalípticas las advertencias de las organizaciones de salud. Más tarde, incluso, descartó por algún tiempo decretar una cuarentena estricta.
Según “Rage”, en una reunión del 19 de marzo con el periodista, Trump dijo que siempre disminuyó la importancia del virus. “Siempre le quité importancia (…) aún lo hago porque no quiero generar pánico”, señaló.
Estos adelantos del libro han generado rechazo en el país que actualmente tiene el mayor número de casos en el mundo y cuenta más de 194.000 fallecidos. Uno de ellos fue el candidato demócrata a la presidencia, Joe Biden. Escribió en un tuit: “Donald Trump sabía, nos mintió por meses. Mientras tanto una enfermedad mortal desgarró nuestra nación, falló en hacer su trabajo”.
Donald Trump knew.
— Joe Biden (@JoeBiden) September 9, 2020
He lied to us for months.
And while a deadly disease ripped through our nation, he failed to do his job — on purpose.
It was a life or death betrayal of the American people. https://t.co/WDmVUvmmJk
Por su parte, Donald Trump, en una conferencia de prensa desde la Casa Blanca la semana pasada, se defendió ante las revelaciones diciendo que no quería asustar a las personas y crear pánico. “No iba a llevar a este país y al mundo a un frenesí (…) queríamos mostrar confianza, queríamos mostrar fuerza”.
Y no solo Trump quedó en medio del torbellino de críticas. El propio Woodward ha sido cuestionado por la decisión de publicar dichas conversaciones meses después.
Jessica Huseman, reportera de ProPublica, tuiteó el 9 de septiembre: “¿Qué tan diferente podrían haber actuado quienes apoyan a Trump si hubieran sabido que el covid-19 era una amenaza real? Woodard lo hubiera podido lograr”.
How differently might Trump's supporters have acted if - this whole time - they knew that he knew COVID was a serious threat? Woodward could have made that happen in February.
— Jessica Huseman (@JessicaHuseman) September 9, 2020
Por su parte, John Stanton, exeditor de BuzzFeed para la oficina en Washington, señaló también en dicha red social: “Si había la posibilidad de salvar alguna vida, él estaba obligado a hacerlo. Bob Woodward puso primero hacer dinero que su deber moral y profesional”.
There is no ethical or moral defense of Woodward's decision to not publish these tapes as soon as they were made. If there was any chance it could save a single life, he was obligated to do so. Bob Woodward put making money over his moral and professional duty.
— john r stanton (@dcbigjohn) September 9, 2020
En respuesta a este tipo de señalamientos, el autor ha dicho que no publicó las declaraciones del presidente antes porque necesitaba más tiempo para confirmarlas, lo que a muchos ha sonado como una explicación insatisfactoria.
Por otro lado, Rage no solo habla del manejo de la pandemia por el presidente Trump sino también de otros asuntos espinosos de su administración. Uno de ellos es el racismo.
Según el artículo del Washington Post, mencionado anteriormente, el presidente dijo a Woodward, con relación a las protestas por la brutalidad policial contra la población negra: “Nos vamos a preparar para enviar la Guardia nacional a algunos de esos pobres bastardos que no saben lo que están haciendo, estos pobres de la izquierda radical”.
Otra parte del libro habla sobre sus relaciones con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, y el líder norcoreano Kim Jong-un. Según el autor, Trump mantenía relaciones cercanas con ambos personajes, e incluso con Kim intercambiaba correspondencia en la que se alagaban mutuamente.
También, la publicación promete revelar testimonios de altos funcionarios del Gobierno que calificaron al presidente como alguien peligroso, y declaraciones ofensivas de Trump acerca de las fuerzas militares estadounidenses.