Ránking | Conozca los cinco mejores lugares para vivir en el mundo este 2021

Todos los años, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) publica el Índice de Desarrollo Humano en el que clasifica a los diferentes países teniendo en cuenta indicadores como el ingreso y renta per cápita, además de la cobertura sanitaria y esperanza de vida, junto con el nivel de educación, entre otros factores.

En la versión número 30 “propuso un nuevo referente experimental que agrega un indicador del efecto del desarrollo sobre el planeta, teniendo en cuenta las emisiones de dióxido de carbono y la huella material de los países (el uso de los recursos naturales)”, explica la entidad.

En el primer lugar está Noruega, basándose en los parámetros tradicionales, aunque perdió 15 puestos durante el más reciente ranking debido a las políticas medioambientales que se han impuesto en ese país.

La segunda posición la ocupó Irlanda, país en el que las personas tienen una esperanza de vida igual a la de Noruega, en poco más de 82 años.

Suiza ocupa el tercer lugar del listado y, aunque su esperanza de vida es mayor a la de los países que ocupan las dos primeras posiciones, con 83 años, las personas en esa nación tiene menos ingresos en promedio.

El cuarto lugar lo tiene Hong Kong, donde el promedio de vida de las personas es cercano a los 85 años de vida. El top cinco lo cierra Islandia, con un promedio de 83 años.

Por cuestiones medioambientales, un país desarrollado como Australia bajó 72 puestos y pasó de ocupar el octavo lugar y quedó de 80; mientras que Singapur, que era el 11, cayó 92 puestos en el listado.

De otra parte, el informe señala que algunos países como Costa Rica, México, Colombia, Panamá o Moldavia avanzaron más de 20 o 30 posiciones, debido a la menor presión medioambiental que han ejercido estos países en los últimos años.

En general, el documento destacó que todos los países de América Latina subieron en el listado, puesto que las caídas más importantes están entre el grupo de países más avanzados y contaminantes.

De acuerdo con el administrador del Programa, Achim Steiner, este nuevo indicador se irá perfeccionando durante los próximos años y aclaró que este no busca ser un juicio sobre las naciones. “Lo que muestra es que, con la aproximación tradicional, ser rico no es la única forma de determinar si eres una economía exitosa y lista para el futuro”, agregó.

Este índice también ilustra la transformación que podría evidenciarse con el desarrollo de los países si se fortalecen las medidas para mejorar el bienestar de las personas y la integridad del planeta, por lo que la ONU insta a que estos dos sectores sean conjuntamente considerados los pilares de la definición de progreso humano.

Del mismo modo, el director de la oficina que desarrolló el estudio, Pedro Conceição, aseguró que las presiones sobre la naturaleza han llevado a que haya fracturas sociales muy profundas, ”como se observa en la enorme desigualdad tanto entre países como dentro de ellos”.

Esta inequidad se traduce en que los grupos con más poder se benefician de la explotación de la naturaleza y limitan la capacidad de actuación de la población más pobre, según explicó el director de la oficina.

Para dar una solución a esa desigualdad, el documento sugiere la necesidad de desmantelar los desequilibrios de poder y las oportunidades que sobresalen actualmente, y especifica que el cambio de los modelos de desarrollo no implica un retroceso.

De otra parte, el Programa señaló que la pandemia de la covid-19 deja en evidencia la presión que está sufriendo el medioambiente, y destaca la interconexión entre ese proceder y los crecientes problemas sociales y económicos que afronta el mundo.