Remezón en la cúpula de las Fuerzas Armadas de Perú: Castillo castigó allanamiento a su residencia

En medio de la creciente crisis institucional y de legitimidad que atraviesa el gobierno peruano del presidente Pedro Castillo Terrones, cuya familia es señalada de estar inmersa en un sensible caso de corrupción, este sábado se llevó a cabo un remezón en la cúpula de sus Fuerzas Armadas.

El cambio en los miembros de la cúpula de la Policía Nacional fue llevado a cabo este sábado por disposición del propio Castillo, justamente dos semanas después de que un grupo de uniformados de dicha fuerza, adscritos a la dependencia anticorrupción allanaran, en compañía de un grupo de fiscales, y con el amparo de una orden judicial, la sede del gobierno en la ciudad de Lima, con el objetivo de ubicar a la cuñada del mandatario, Yenifer Paredes, quien días después se ‘entregó’ a las autoridades.

Los cambios realizados en la cúpula de la Policía de Perú abarcan el relevo en la Comandancia general de la entidad, así como en la jefatura del Estado Mayor, y la inspección general de dicha institución.

Esta acción de relevo en la institución policial se conoce días después de que el presidente Castillo manifestara su malestar y desacuerdo con la operación de allanamiento a su residencia, la cual se llevó a cabo el pasado 9 de agosto, y que se extendió por varias horas, en las que se realizaron minuciosas inspecciones a la sede de gobierno, en procura de hallar a la familiar del presidente, quien actualmente está ligada a una investigación, por parte de la Fiscalía de Perú, señalada de hacer parte de un entramado judicial del que incluso se ha dicho que es liderado por el propio mandatario y su primera dama.

En ese sentido, según detallan medios internacionales, la intensión del mandatario será ir por la cabeza de dicha operación para destituirlo. Dicho uniformado corresponde al coronel Harvey Colchado, señalado por el mandatario de haber ‘vulnerado la intimidad’ de su casa.

Pese a que existen evidencias sobre las intensiones y motivaciones políticas de dicho remezón, algunos subalternos de Castillo, como el viceministro de Orden Interno, Abel Gamarra, se han pronunciado para desestimar esas versiones, aduciendo que el cambio en la cúpula policial no responde más que a un “cambio natural” en la institución, que a su vez se desprendería del cambio que también se efectuó recientemente en el Ministerio del Interior después de la renuncia del exministro, Mariano González, quien ha arremetido contra el mandatario señalándolo de obstrucción a la justicia.

En ese sentido, el viceministro Gamarra también ha apuntado que no hay irregularidades con el relevo de la dirección de la Policía advirtiendo que se cumple con todos los requisitos para efectuar estos nuevos nombramientos, desestimando señalamientos sobre abusos en contra de la Policía.

Además, desde la oposición a Castillo, algunos políticos como el congresista Jorge Montoya, citado por la Agencia AFP, ha denunciado la existencia de un abuso de autoridad por parte de Castillo.

A través de su cuenta de Twitter, el político anunció que citará ante la plenaria del Congreso a los destituidos (o relevados) funcionarios, con el objetivo de que estos puedan referirse libremente a las ‘arbitrariedades’ de las que son víctimas.

Montoya respaldó sus señalamientos en que dichas designaciones de relevo en el mando fueron ‘de última hora’ .

Otras voces, como la del abogado, experto en Derechos humanos Carlos Rivera Paz, también citado por la Agencia AFP, se manifestó en descontento con lo ocurrido, advirtiendo que Castillo está buscando “una policía que se acomode a sus intereses”, refiriendo que ellos es un evidente ‘abuso de autoridad’, añadiendo que este remezón podría estar relacionado con el interés del presidente por obstaculizar las investigaciones que cursan en su contra y la de sus allegados.

Actualmente en la Fiscalía de Perú cursan seis investigaciones preliminares en contra de Castillo Terrones, una de ellas desprendida de nombramientos por parte del presidente en los cargos directivos de los cuerpos de seguridad.

Siete meses atrás, el presidente también estuvo inmerso en un polémica por el relevo y ascensos en la Policía y las Fuerzas Armadas, lo que llevó a que tuviera que renovar su equipo ministerial.

Por otra parte, actualmente cursa una investigación contra Castillo y el exsecretario de la Presidencia, Bruno Pacheco, a quienes se señala de incurrir en tráfico de influencias.

Otra de las rezones por las que actualmente cursan investigaciones contra Castillo refieren al caso de presunto plagio en su tesis de maestría, casos de corrupción, y obstrucción a la justica. Esta última por cuenta de las declaraciones del ex ministro del Interior.

Pese a que actualmente cursan investigaciones contra Castillo, el mandatario no podrá ser llevado a juicio al menos mientras permanezca en el ejercicio de su mandato constitucional, que se extiende hasta el 28 de julio de 2026, salvo que prospere algún proceso de vacancia en contra del líder sindical, quien ya superó dos de esos proceso en lo corrido de su actual mandato.

Recientemente, la Fiscalía de Perú también hizo pública una solicitud para que se limite o impida la salida del país a la señora Lilia Paredes, esposa de Castillo, por el tiempo que le resta al mandatario de su periodo presidencial. Dicha solicitud deberá ser aprobada o rechazada por las autoridades judiciales el próximo mes.