Estados Unidos

Rescatan a 70 menores víctimas de explotación sexual en Texas

De acuerdo con el reporte de las autoridades, los menores rescatados tienen entre 10 y 17 años de edad.

2 de junio de 2022
Secuestro
Según las autoridades, el total de menores habían sido reportados como desaparecidos por parte de sus familiares, y tendrían entre los 10 y 17 años de edad. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Autoridades del estado de Texas entregaron en su reporte de mayo el balance de una serie de operaciones adelantadas por sus uniformados enfocadas en el combate de las redes de tráfico de personas, asegurando que rescataron a un total de 70 menores de edad que estaban siendo instrumentalizados por dichos grupos ilegales con fines sexuales.

Según las autoridades, el total de menores habían sido reportados como desaparecidos por parte de sus familiares, y tendrían entre los 10 y 17 años de edad.

El informe, presentado por el Departamento de Seguridad Pública del estado de Texas, apuntó que los operativos y demás labores de investigación se desarrollaron durante el mes de mayo, y contó con la labor conjunta con los funcionarios de Seguridad Nacional en la localidad de El Paso.

Los niños rescatados en la operación denominada ‘Almas perdidas’, fueron objeto, según el reporte, de delitos como tráfico de personas con fines sexuales y abuso físico y sexual.

Sobre el sector en el que operaban los grupos delincuenciales que tenían azotado a este grupo de menores, se detalló que los niños fueron ubicados en el área de Dallas-Fort Worth, así como en el Estado de Colorado y en Ciudad Juárez, México.

Según las autoridades, en declaraciones entregadas por el agente especial Taekuk Cho, la referida operación de ‘Almas perdidas’ evidenció el “compromiso de Investigaciones de Seguridad Nacional de proteger al público de los delitos de victimización”, advirtiendo que los niños son “el recurso más preciado de nuestra comunidad”.

Tras entregar el parte de victoria en la operación, y el beneficio que ello representó para este importante número de víctimas, quienes ahora deberán quedar en manos de profesionales para su correspondiente tratamiento psicológico debido al panorama al que estuvieron expuestos, las autoridades se comprometieron a continuar en la ardua labor de seguir protegiendo a la niñez, haciendo “cumplir la ley para localizar, recuperar y ayudar a sanar a los niños desaparecidos”.

En ese mismo sentido, las autoridades advirtieron a los responsables de esta clase de crímenes que están bajo la lupa de las autoridades, advirtiendo que si son atrapados, serán puestos ante la justicia y expuestos a severos castigos.

Tras el operativo que permitió el rescate de los 70 menores, las autoridades no precisaron si en el marco de referida acción consiguieron la captura de algún grupo de delincuentes o responsables, sin precisar tampoco las condiciones en las que eran tenidos los menores víctimas de esta clase de hechos atroces.

Recientemente, desde el Departamento de Seguridad Pública del estado de Texas, también se reveló que mantienen una ardua investigación para esclarecer las circunstancias en las que, el pasado 24 de mayo, fueron asesinadas 21 personas, la mayoría de ellos menores de edad, al interior de la escuela primaria Robb, en la localidad de Uvalde.

Las investigaciones de este órgano de seguridad se han centrado en algunos detalles claves que dieron lugar a la masacre, como las condiciones en las que entró el pistolero a la primaria, advirtiendo que se ha logrado determinar que este accedió al edificio a través de una puerta que debía estar asegurada y no lo estaba.

De igual modo, avanzan las investigaciones en dicho estado frente a la presunta acción tardía desarrollada por los agentes policiales que acudieron inicialmente al sitio del tiroteo, quienes se demoraron una hora en entrar al edificio, advirtiendo que se encontraban aguardando la llegada de un cuerpo especializado.

En ese sentido, las autoridades investigan la existencia de un escenario de omisión, y si en efecto los agentes que no entraron, actuaron o no de acuerdo a los protocolos establecidos.