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Rusia realizó los mayores ejercicios militares desde la Guerra Fría, justo antes de la reunión de los presidentes Biden y Putin
El presidente estadounidense, Joe Biden, llegó este martes a Ginebra en víspera de la primera cumbre con su homólogo ruso, Vladimir Putin, una reunión difícil en la que pretende señalar las “líneas rojas” para evitar un mayor deterioro de la relación.
Las relaciones entre Estados Unidos y Rusia han alcanzado altos niveles de tensión. Ciberataques originados en Rusia, injerencia en las elecciones estadounidenses y en la región, y constantes advertencias verbales son la antesala de una reunión esperada entre los dos presidentes.
Sin embargo, aunque la reunión ya inició, Rusia no deja de “provocar” a Estados Unidos. Esta vez, unos barcos rusos están realizando ejercicios militares frente a la costa de Hawái. Pero lo curioso de la situación, es que son las maniobras militares más grandes de Rusia desde que terminó la Guerra Fría. Los ejercicios incluyen bombarderos de largo alcance, barcos de superficie y aviones antisubmarinos. Lo que despertó la reacción de la Fuerza Aérea estadounidense al enviar cazas furtivos F-22 como respuesta.
Sin embargo, horas después, funcionarios estadounidenses afirmaron que los bombarderos rusos no entraron en la Zona de identificación de Defensa Aérea, por lo que no fueron interceptados.
Estas acciones por parte de Rusia no son nuevas. El gobierno de Vladimir Putin le ha demostrado al mundo su fuerza militar en Ucrania y en el Mar Negro en los últimos meses. Además, ya le ganó un pulso al gobierno de Joe Biden, pues le advirtió a dos buques de guerra que retrocedieran, a lo que el mandatario estadounidense tuvo que ceder para evitar un conflicto.
La tan esperada reunión
El presidente estadounidense Joe Biden y su homólogo ruso Vladimir Putin abrieron este miércoles con un apretón de manos su esperada cumbre de Ginebra, destinada a rebajar las tensiones entre ambos países y hallar algunos puntos de acuerdo.
Los dos responsables llegaron con minutos de diferencia a la Villa La Grange, un magnífico edificio del siglo XVIII ubicado en el corazón de la ciudad suiza, y fueron recibidos por el presidente suizo Guy Parmelin, que les deseó suerte en esta reunión que se prevé complicada.
Biden tomó la iniciativa y tendió la mano a Putin. “Siempre es mejor verse cara a cara”, dijo el mandatario estadounidense al inicio de esta cumbre, la primera con el líder ruso desde que llegó a la Casa Blanca en enero. Putin, por su parte, dijo que confiaba en que la “reunión sea productiva”.
Los temas de discordia son numerosos: Ucrania, Bielorrusia, la suerte del opositor ruso encarcelado Alexéi Navalni, los ciberataques.
Ambos líderes hablarán con la prensa por separado el miércoles después del encuentro. No está prevista una conferencia de prensa conjunta.
Ucrania: un actor importante, olvidado
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, lamentó este lunes que su homólogo y aliado, el estadounidense Joe Biden, no se haya reunido con él antes de la cumbre que sostendrá el miércoles con el ruso, Vladimir Putin, en Ginebra.
“Hubiera sido mejor que la reunión (con Biden) se celebrara antes de la cumbre de los dos presidentes”, dijo Zelenski, en una entrevista con agencias internacionales de noticias, entre ellas AFP. Además, Zelenski acusó al Kremlin de retrasar un encuentro de él con el presidente ruso.
Este mes, Biden reafirmó que Washington apoya la integridad territorial de Ucrania e invitó a Zelenski a la Casa Blanca en julio.
Con información de AFP.