Secuestro
Secuestro | Foto: Getty Images

HAITÍ

Secuestraron en Haití a siete religiosos católicos, incluidos dos franceses

Los franceses secuestrados son una monja y un sacerdote.

11 de abril de 2021

La Conferencia Episcopal de Haití dijo el sábado que fueron secuestrados siete religiosos católicos, entre los que se encuentran dos ciudadanos franceses: una monja y un sacerdote.

Según las autoridades locales, el secuestro se llevó a cabo en la mañana de este domingo en Croix-des-Bouquets, cerca de Puerto Príncipe, mientras “se dirigían a la instalación de un nuevo sacerdote”, explicó el padre Loudger Mazile a AFP.

Precisó que los secuestradores exigieron un millón de dólares en rescate.

La policía sospecha que una banda armada activa en la zona, apodada “400 Mawozo”, está detrás del secuestro, según una fuente en sus filas.

Las autoridades haitianas están alarmadas por el incremento reciente de los secuestros extorsivos, no solo en Puerto Príncipe, sino en todo el país. Según expertos, estas prácticas han incrementado a la par que el poder de los grupos criminales ha venido aumentando.

“Esto es demasiado. Ha llegado el momento de que cesen estos actos inhumanos”, dijo por teléfono el domingo monseñor Pierre-André Dumas, obispo de Miragoâne.

“La Iglesia ora y se solidariza con todas las víctimas de este acto vil”, añadió.

En marzo, el gobierno haitiano declaró el estado de emergencia por un mes en ciertos distritos de la capital y una región del interior con el fin de “restaurar la autoridad del Estado” en áreas controladas por pandillas.

La medida está motivada por el accionar de bandas armadas que “secuestran a personas para pedir rescate, robando y saqueando bienes públicos y privados, y enfrentando abiertamente a las fuerzas de seguridad pública”, según indica el decreto presidencial.

La delincuencia es una de las principales opciones para la población haitiana, teniendo en cuenta la pobreza que hay en el país y las pocas oportunidades laborales que tienen los nativos.

Inseguridad latente

Semanas atrás, la selección de fútbol de Belice, que llegó a Haití para un duelo del clasificatorio de Concacaf para Catar-2022, fue interceptada por hombres armados cuando se dirigía del aeropuerto al hotel, en un incidente que no llegó a mayores.

A pesar de ser escoltados por la Policía, “el autobús del equipo fue detenido por un grupo de insurgentes con rifles de asalto en motocicletas, y la Policía se vio obligada a negociar con ellos para continuar el trayecto hasta el hotel”, dijo la Federación de Belice en un comunicado.

“Es una situación que el equipo nunca había enfrentado, pero estamos complacidos de informar que nuestros ‘Jaguares’, a pesar de estar sacudidos por esta terrible experiencia, están seguros en el hotel”, agregó el comunicado.

Haití, un país en crisis económica y política, se encuentra en estado de emergencia desde el 18 de marzo y busca “restaurar la autoridad del Estado” en áreas controladas por pandillas dedicadas al secuestro y extorsión, y que se enfrentan con la Policía.

Tras expresar su “decepción” y “disgusto” por el incidente, Belice aseguró que tomó contacto con la FIFA y la Concacaf, confederación a la que pertenece, y que están haciendo los esfuerzos para colocar al equipo en una zona segura.

“Es lamentable que nuestros ‘Jaguares’ enfrenten tan traumática experiencia”, consideró la Federación.

“Fue un momento de bastante temor. Mantengámonos unidos y tomemos las mejores decisiones en lo que respecta al equipo”, dijo el atacante y goleador Deon McCaulay, quien es además uno de los capitanes de Belice.

Con información de AFP.