MUNDO
Segundo sospechoso del asesinato del presidente de Haití fue extraditado a EE. UU.
Más de 40 personas, entre ellas 15 colombianos y varios estadounidenses de origen haitiano han sido detenidas en relación con la investigación.
Un ciudadano haitiano, sospechoso de participar en el asesinato del presidente Jovenel Moïse en julio, fue detenido este miércoles en Miami tras su extradición desde República Dominicana, indicó una fuente del Departamento de Justicia a la AFP.
Rodolphe Jaar será la segunda persona juzgada en Estados Unidos por la muerte de Moïse, después del militar retirado colombiano Mario Palacios, imputado el 4 de enero en Miami por su presunta participación en el magnicidio.
Tras la huida de Jaar desde Haití, la Policía dominicana lo detuvo el 7 de enero, seis meses justos después de que un comando irrumpiera en la residencia privada del presidente haitiano y lo matara a tiros.
Jaar comparecerá por primera vez ante un juez el jueves a las 1:30 p. m. (18H30 GMT) en un tribunal de Miami, donde se presentarán cargos criminales contra él, informó la fuente del Departamento de Justicia.
El pasado viernes, las autoridades jamaicanas detuvieron al exsenador haitiano, John Joel Joseph, buscado por la Policía de su país en el marco de la investigación del asesinato de Moïse.
Joseph fue detenido en la noche del viernes al sábado y actualmente se encuentra en una dependencia policial, dijo la Fuerza de Policía jamaicana (JCF, en inglés) en un comunicado.
La JCF “puede confirmar que un nacional haitiano: Jean Joel Joseph y tres miembros de su familia fueron arrestados en Jamaica por cargos relacionados con inmigración”, según el texto.
Los investigadores jamaicanos contactaron a las autoridades haitianas, que dijeron que Joseph “era requerido en Haití como sospechoso en el homicidio del presidente haitiano en 2021″, agregó.
El excongresista se encontraba en una casa en Saint Elizabeth, distrito en el suroeste de la isla.
Moïse fue asesinado el 7 de julio, pero a pesar de la detención de varios sospechosos las incertidumbres en torno al crimen continúan.
El asesinato de Moïse profundizó la ya dramática crisis en Haití, que vive un clima de inseguridad por la creciente violencia de pandillas y una oleada de secuestros.
El primer ministro Ariel Henry, que ha estado a cargo del ejecutivo tras la muerte de Moïse, dijo a la AFP que este mes él también había sido blanco de un intento de homicidio durante la celebración de las fiestas nacionales.
Ya en enero, las autoridades haitianas habían publicado un cartel de búsqueda de John Joel Joseph, descrito como un individuo “peligroso y armado”.
Fiscales de Estados Unidos dijeron que el complot contra el fallecido gobernante “se concentró inicialmente en realizar un secuestro del presidente como parte de una supuesta operación de arresto”, pero esta “en última instancia terminó siendo un complot para matarlo”.
El Congreso de Estados Unidos ordenó el jueves una investigación para esclarecer el magnicidio.
El Senado votó en forma unánime para ordenar al Departamento de Estado realizar un reporte en un plazo de 180 días que pueda dar una “descripción detallada” de las circunstancias que rodearon los hechos.
Con información de la AFP.