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Sigue la puja: presidente Biden afirma que la detención del periodista Evan Gershkovich en Rusia es ilegal y cruza los límites
El periodista de ‘The Wall Street Journal’ se enfrenta a una posible pena de hasta 20 años de cárcel.
Continúa la tensión diplomática entre Rusia y Estados Unidos por la detención del periodista Evan Gershkovich en la ciudad de Ekaterimburgo, después de haber estado recabando información sobre el Grupo Wagner, propiedad del oligarca Yevgeni Prigozhin, quien está considerado como colaborador cercano del presidente ruso, Vladimir Putin.
Desde su detención el pasado mes de marzo, el gobierno norteamericano ha insistido en que la liberación del periodista es una prioridad para el presidente Joe Biden, “Seguiremos pidiendo la liberación de Evan Gershkovic. Como dije, estos cargos son ridículos. Evan no es un espía y nunca lo ha sido. Nunca ha trabajado para el Gobierno estadounidense” dijo la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre.
La funcionaria explicó que el Departamento de Estado está negociando la situación, de manera que trabajarán conjuntamente equipos del Consejo de Seguridad Nacional, varias oficinas del Departamento de Estado, incluyendo el enviado especial para Asuntos de Rehenes, y otra agencia del gobierno de EE. UU.
Por su parte, el presidente Joe Biden volvió a referirse al caso y dijo que el encarcelamiento en Rusia del periodista estadounidense Evan Gershkovich por acusaciones de espionaje “pasa los límites”.
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Biden también dijo a periodistas que la detención del corresponsal del diario The Wall Street Journal es “totalmente ilegal”.
Horas antes, el Kremlin había asegurado que Estados Unidos “puede y debe proteger los derechos” del periodista si bien ha reiterado que “será un tribunal el que tome una decisión” sobre el caso.
“Estados Unidos puede y debe proteger los derechos de su ciudadano, que fue pillado in fraganti y violó las leyes rusas. Es sospechoso de esto y será el tribunal el que tome una decisión”, ha afirmado el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, según ha informado la agencia rusa de noticias Interfax.
El último artículo del periodista, quien se enfrenta a una posible pena de hasta 20 años de cárcel, fue publicado por The Wall Street Journal y data del 28 de marzo bajo el titular ‘La economía de Rusia está comenzando a desmoronarse’.
Hace una semana, el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, mantuvo una conversación telefónica con su homólogo ruso, el ministro de Asuntos Exteriores Sergei Lavrov, para tratar la situación de Gershkovich.
Lavrov destacó que “Gershkovich fue sorprendido con las manos en la masa cuando intentaba conseguir información secreta clasificada como secreto de Estado, aprovechando su condición de periodista”, según el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso.
Lo mismo hicieron el embajador de Rusia ante Naciones Unidas, Vasili Nebenzia, y su homóloga estadounidense, Linda Thomas-Greenfield, quienes se reunieron para abordar la situación del periodista estadounidense Evan Gershkovich.
Fue la propia Thomas-Greenfield, quien ha detallado que en su conversación con Nebenzia, la que expresó la “firme demanda” de Estados Unidos para la “inmediata liberación” del reportero, recoge la cadena de noticias CNN.
“Es realmente inaceptable utilizar a un periodista que había sido acreditado en Rusia y acusarlo del tipo de acciones de las que le han acusado”, ha lamentado la representante diplomática estadounidense ante la ONU.
Por su parte, la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, Maria Zajarova, ha confirmado también que las autoridades están “resolviendo” la posibilidad de que Gershkovich reciba asistencia consular de Estados Unidos. “Se ha tomado en consideración el tema del acceso consular. Se está resolviendo teniendo en cuenta la práctica consular ya existente y la legislación rusa”, ha manifestado Zajarova en rueda de prensa, según recoge la agencia rusa TASS.
El pasado 7 de abril, el Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) acusó formalmente de espionaje al periodista estadounidense Evan Gershkovich, “la investigación del FSB concluyó con la acusación contra Gershkovich de espionaje en interés de su país. Él negó categóricamente todas las acusaciones y afirmó que estaba involucrado en actividades periodísticas en Rusia”, ha precisado un portavoz del FSB, según ha informado la agencia de noticias TASS.
Gershkovich, acusado de espionaje en virtud del artículo 276 del Código Penal ruso, “siguiendo las instrucciones de la parte estadounidense, recopiló información que constituye un secreto de Estado sobre las actividades de una de las empresas del complejo militar-industrial ruso”.
Con información de Europa Press*