🔴 Temblor en México hoy, 17 de octubre: este es el último sismo reportado en el país

Por su ubicación en el Anillo de Fuego del Pacífico, México es una nación donde se reportan frecuentes sacudidas. Las autoridades suelen recordar mantener la calma en caso de emergencia, pero no bajar la guardia, pues hay antecedentes de potentes movimientos telúricos.

Casi a diario, los organismos respectivos dan cuenta de este tipo de fenómenos y, aunque en su mayoría, son de fuerza ‘leve’, representan una muestra de cuán activo es ese territorio azteca. Hace algunas semanas se adelantó el Segundo Simulacro Nacional, justamente para concientizar a la población sobre estar prevenida. Este tuvo una amplia acogida.

El martes, 17 de octubre, el Servicio Sismológico Nacional (SSN) reportó una sacudida de magnitud 4,0 a 199 kilómetros al suroeste de Pijijiapan. Este se sintió hacia las 6:01 a. m. (hora local) con una latitud de 14.30 y longitud igual a -94.39. Por su lado, la profundidad se ubicó en 10 kilómetros, según lo indicado por esa entidad.

Previamente, las autoridades evidenciaron una sacudida de 4,3 a 107 kilómetros de Salina Cruz, en el estado de Oaxaca. La profundidad quedó establecida en 24 kilómetros, mientras que su latitud en 15.24 y longitud fue igual a -94.95.

Respecto a la jornada de este lunes, 16 de octubre, el Sismológico Nacional compiló, en total, 39 movimientos telúricos, siendo los últimos en Jalisco, Guerrero, Oaxaca, Veracruz, Michoacán y Chiapas. Su magnitud estuvo entre 3,0 y 4,4 (este al suroeste de Ometepec con una profundidad de 16,2 kilómetros).

Diferencia entre magnitud e intensidad

Magnitud e intensidad son dos términos que a veces podrían usarse de manera ‘indistinta’, siendo algo erróneo, pues pese a parecer lo mismo no lo son. La primera parte de registros sismógrafos sobre el tamaño y también la energía que se ha liberado durante un movimiento telúrico (mismo que no se puede predecir).

“La magnitud de un temblor está relacionada con la energía liberada en forma de ondas sísmicas que se propagan a través del interior de la Tierra”, explica en su sitio oficial el Servicio Sismológico Nacional. Además, esta no surge de una forma ‘estandarizada’, pues hay varias rutas matemáticas para calcularla.

En cuanto a la intensidad, se relaciona con las consecuencias ya perceptibles que ocasiona un temblor tanto en infraestructura como sobre el ser humano. Por ejemplo, la cantidad de edificaciones dañadas, cuán grandes o no fueron las afectaciones y también en alusión con heridos o víctimas mortales.

Diferencia entre temblor, sismo y terremoto

Además, hay una diferencia entre la denominación de las sacudidas. Cómo se califique un fenómeno natural, estará dependiente a sus efectos y relación con la magnitud. De acuerdo con El Financiero, inicialmente se habla (preferiblemente) de temblor cuando el evento prácticamente no es perceptible, aunque sí para el sismógrafo.

En segunda instancia, se denomina sismo a una sacudida que tiene una fuerza mayor cuando hay ruptura de las rocas en el interior del planeta. Finalmente, lo ‘correcto’ al hablar de terremoto es si la sacudida no solo fue percibida mayoritariamente, sino que dejó a su paso consecuencias notorias como las ya mencionadas.

Por poner un ejemplo, a comienzos de septiembre Marruecos sintió el impacto de un terremoto con magnitud 6,8 cuyo saldo fueron al menos 3.000 muertos, además de afectaciones ‘severas’ a la infraestructura. La población sigue intentando recuperarse de sus efectos, así como sucedió meses atrás en Turquía y Siria.

Por otro lado, National Geographic refiere a Japón como uno de los territorios con mayor número de terremotos a escala mundial.