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‘The Economist’ se lanza contra Biden y afirma que debe renunciar a su candidatura
El prestigioso diario británico pone como argumento la debilitada imagen del mandatario tras su desastroso debate contra Donald Trump.
Una semana después del debate entre el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, y su predecesor, Donald Trump, la crisis en el Partido Demócrata continúa por cuenta de las voces que piden que el mandatario abandone su candidatura a la reelección para los comicios del 5 de noviembre. Con esto se plantea un reemplazo mucho más joven que el deteriorado mandatario de 81 años, al que constantemente se le ven episodios trastabillando o perdiéndose en eventos públicos.
A las muchas voces dentro del partido y los simpatizantes de este, hay que sumar que muchos medios de comunicación también han elevado la voz para que Biden dé su brazo a torcer. El más reciente fue el medio británico, The Economist, que en un artículo dio sus razones por las cuales cree que el octogenario presidente debería renunciar a su candidatura.
“El debate presidencial fue terrible para Joe Biden, pero el encubrimiento ha sido peor. Fue una agonía ver a un anciano confundido luchando por recordar palabras y hechos. Su incapacidad para argumentar contra un oponente débil fue desalentadora. Pero la operación de su campaña para negar lo que decenas de millones de estadounidenses vieron con sus propios ojos es más tóxica que cualquiera de las dos, porque su deshonestidad provoca desprecio”, dice el medio.
De igual manera, el medio afirma que si bien hay que reconocer los logros del mandatario, es urgente que más de ellos afronten el hecho de que, si no se pronuncian ahora, Trump ganará la elección con facilidad. Y que, por lo tanto, para lograr la renovación política que Estados Unidos necesita ahora tan claramente, deben pedir un cambio. Este debería ser con Biden cediendo su lugar como candidato.
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“Los demócratas sostienen, con razón, que Trump no es apto para ser presidente, pero el debate y sus consecuencias han demostrado que Biden tampoco es apto. En primer lugar, por su deterioro mental. Biden todavía puede parecer dinámico durante apariciones breves y preestablecidas, pero no se puede dirigir una superpotencia a golpe de manual, ni se puede suspender una crisis internacional porque el presidente esté pasando una mala noche”, cita el medio.
También aseguran que el Partido Demócrata debería tener autocrítica, empezando por Biden, quien firma que fracasó en el debate porque estaba cansado de viajar por todo el mundo en avión. Mientras que sus partidarios sostienen que esos horribles 90 minutos no deberían eclipsar los últimos tres años y medio, pero la pregunta es más si esta situación es si son un presagio de los próximos cuatro años del mandatario.
“Como jefe de Estado, el presidente encarna las virtudes de la República. Cuanto más se lo vea como un anciano testarudo que deja el trabajo real a sus cortesanos, más socavará la fe de los estadounidenses en su sistema de gobierno”, dice el medio británico sobre si finalmente consiguiera la reelección. “Biden proyectará decrepitud, para el deleite de China y Rusia y la consternación de los aliados de Estados Unidos”.
La solución que ven al respecto es que Biden debería retirarse de la campaña, ya que, de esa manera, las elecciones podrían renovar la política estadounidense. “La virtud de la democracia es que los votantes pueden elegir a sus gobernantes, pero Biden y Trump ofrecen la posibilidad de elegir entre lo incapaz y lo inefable. Los estadounidenses merecen algo mejor”, dice el medio.
The Economist afirma que un nuevo candidato tendría poco más de diez semanas después de la convención demócrata para ganarse el apoyo popular de los estadounidenses. Pero también afirman que ese candidato podría perder, y el autosacrificio del presidente ayudaría a restablecer la política estadounidense en una nueva generación, lejos de los muy mayores Biden y Trump.
Finalmente, en cuanto a candidatos el medio afirma: “Creemos que tendrían buenas posibilidades de ganar, incluso mejores que Biden, incluso si la candidata fuera Kamala Harris, su relativamente impopular vicepresidenta. Serían aptos para gobernar y, con la excepción de Harris, privarían a Trump de sus argumentos más fuertes contra Biden”, manifiestan en su artículo pidiendo que el mandatario dé un paso al costado.