Claudia López: como alcaldesa, persiguió de manera xenófoba a venezolanos y como candidata busca votos con su dolor

La exalcaldesa de Bogotá, Claudia López, afirmó este viernes, 26 de julio, en sus redes sociales, que fue deportada de Venezuela, país al que pretendía ingresar para acompañar las elecciones presidenciales de este domingo.

“Venezuela está a pocas horas de lograr su libertad y derrotar el régimen dictatorial de Maduro. ¡No se rindan, hermanos venezolanos! Estamos con ustedes, sus familias, sus hijos. Hoy me deportaron arbitrariamente y bajo amenazas”, expresó López en una publicación en sus redes sociales, donde envió un mensaje de apoyo al candidato presidencial Edmundo González y a la líder opositora María Corina Machado.

“¡La campaña libertadora de Venezuela no la pueden deportar! ¡Adelante! A @MariaCorinaYA y @EdmundoGU y a todos los venezolanos mi cariño, apoyo y solidaridad siempre”, enfatizó.

López acompañó su publicación con un video en el que aparece en un avión junto a decenas de pasajeros y asegura que el régimen de Nicolás Maduro “se va a acabar este domingo”.

“Este país va a volver a ser libre. Así estarán de aculillados que nos sacan deportados. Este régimen se va a acabar el domingo”, declara la exalcaldesa en la grabación.

Pero este acto sirvió para que a la exalcaldesa le recordaran, cuando bajo su mandato en la capital de Colombia, fue acusada de xenofobia.

Esto ocurrió en 2021, cuando denunció que una “minoría” de venezolanos estaba perturbando gravemente la seguridad en la ciudad y criticó al gobierno por la falta de garantías para los colombianos frente al masivo fenómeno migratorio. Sus declaraciones fueron mal recibidas por políticos y funcionarios, que las interpretaron como xenófobas.

La controversia se produjo justo cuando el gobierno avanzaba en un plan para regularizar a casi un millón de indocumentados que llegaron de Venezuela huyendo de la crisis en su país.

López criticó la violencia que, según ella, algunos migrantes cometieron tras el asesinato de un policía de 24 años a manos de un venezolano en el norte de la capital, durante una requisa. El agresor murió en el intercambio de disparos y su cómplice, también venezolano, fue capturado, según las autoridades.

“Por supuesto que la mayoría de migrantes son personas humildes, huyendo de una dictadura, pero (...) los hechos demuestran que una minoría de migrantes venezolanos, profundamente violentos (...), son un factor de inseguridad enorme en nuestra ciudad”, dijo la mandataria de los capitalinos durante un homenaje al uniformado.

Acompañada por mandos policiales, López aseguró que el asesinato del patrullero Edwin Caro no es un “caso excepcional”.

“Respetamos las políticas del gobierno nacional, pero a los migrantes venezolanos se les ofrece todo y a los colombianos, ¿qué se les ofrece? ¿Qué garantías tenemos de que no haya una competencia desleal por sus empleos, especialmente para la gente humilde, de que no se aprovechen de la generosidad del gobierno de Colombia para agredir a ciudadanos colombianos?”, cuestionó.