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Trump apela fallo que permite a TikTok seguir operando en EE. UU.
El presidente saliente asegura que la aplicación de videos sirve como una herramienta de espionaje de China, usando los datos de los usuarios.
El gobierno del presidente saliente de Estados Unidos, el republicano Donald Trump, apeló el lunes el fallo de un tribunal federal que permite a la plataforma TikTok seguir operando en territorio estadounidense, pese a los esfuerzos por bloquear esta popular red social alegando motivos de seguridad nacional.
El Departamento de Justicia presentó el recurso de apelación con el objetivo de hacer cumplir una prohibición de TikTok decretada por Trump, quien argumenta -sin pruebas- que la aplicación utiliza los datos de sus usuarios para espiar en favor de Pekín y propiciar la desinformación en las redes.
Esa prohibición había sido rechazada a principios de este mes por el juez de distrito Carl Nichols y en un caso paralelo presentado en el estado de Pennsylvania.
Nichols sostuvo en su dictamen que los abogados de TikTok demostraron que el Departamento de Comercio probablemente se excedió en su autoridad al tratar de prohibir la actividad de la red social en territorio local y “actuó de manera arbitraria y caprichosa al no considerar alternativas obvias”.
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Por su parte, la Casa Blanca afirma que TikTok, cuya empresa matriz es la china ByteDance, es un riesgo para la seguridad nacional debido a los posibles vínculos con el gobierno de Pekín.
TikTok, popular entre los adolescentes para compartir sus videos cortos y habitualmente de tono divertido, se ha defendido repetidamente contra las acusaciones sobre transferencias de datos al gobierno chino, argumentando que almacena la información de los usuarios en servidores de Estados Unidos y Singapur.
La plataforma también tendrá que comparecer en los tribunales de Estados Unidos por un decreto presidencial del 14 de agosto en el que Trump obliga a ByteDance a vender sus operaciones en Estados Unidos a una empresa local. El Tesoro de Estados Unidos dijo en un comunicado a comienzos de diciembre que el Comité de Inversiones Extranjeras administrado por el Tesoro, “está comprometido con ByteDance para llevar a cabo desinversiones y otras medidas necesarias para resolver los riesgos para la seguridad nacional (...) de acuerdo con el Decreto del 14 de agosto”.
Por su parte, la red social rechaza estas acusaciones y ha lanzado una contraofensiva judicial, que hasta el momento ha cosechado varios éxitos, no solo el que un juez federal bloqueara temporalmente la orden ejecutiva del presidente Trump, que habría impedido que TikTok operara en Estados Unidos, y que ahora el Gobierno está apelando, sino también la de tres usuarios de Internet que pagaron por los servicios de TikTok y acudieron a un tribunal de Pensilvania solicitando la suspensión de parte del decreto del 14 de agosto que prohíbe que las empresas estadounidenses brinden servicios esenciales a TikTok, como el alojamiento en línea.
Tras una denuncia separada, a finales de septiembre un juez de la corte de Washington también bloqueó la pretensión de la administración Trump de obligar a las plataformas de descarga de aplicaciones móviles a retirar TikTok.
En paralelo a esta batalla legal, ambas partes negociaron una solución, en una batalla en la que Donald Trump pretendía poner a TikTok bajo bandera estadounidense.
En septiembre, aceptó una oferta de ByteDance que estipulaba que Oracle y Walmart adquirieran el 20 % de las acciones de una empresa llamada TikTok Global, que se encargaría de las actividades globales de la plataforma, pero cuya sede estaría en Estados Unidos.
Pero allegados al presidente estimaron que los inversores estadounidenses deberían ejercer el control mayoritario de la nueva entidad.
La posición de ByteDance evolucionó posteriormente y el grupo propuso la creación de una empresa para albergar sus operaciones estadounidenses, lo que sugiere que estaría dispuesto a renunciar a su mayoría.
Según Dan Ives, analista de Wedbush Securities, ByteDance tiene interés en prolongar la situación hasta la toma de posesión a finales de enero del demócrata Joe Biden, cuyo gobierno podría adoptar un tono más mesurado hacia China.
“En esta partida de póquer mentiroso de alto riesgo es muy probable que ByteDance busque posponer las negociaciones sobre un acuerdo, con la esperanza de que la administración Biden elimine la orden ejecutiva, lo que sería un cambio fundamental en la política tecnológica de Estados Unidos en relación con Pekín”, apunta el experto.
TikTok tiene 100 millones de usuarios en Estados Unidos y unos 700 millones en todo el mundo.
*Con información de AFP