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Un hombre es acusado de usar Grindr para encontrar hombres para matar y comer

La aplicación habría sido utilizada por el hombre para “cazar” a otros y guardar parte de sus miembros como “trofeos”.

20 de marzo de 2021
(AP Photo/Caleb Jones)
(AP Photo/Caleb Jones) | Foto: AP.

Chance Seneca, un hombre de 19 años, fue acusado este viernes en la ciudad de Lafayette, en el estado de Louisiana en Estados Unidos, de haber cometido un crimen de odio y dos intentos de secuestro, a través de la aplicación de citas homosexuales y bisexuales Grindr.

Según lo describió el agente encargado del caso en los documentos judiciales, cuando los hechos ocurrieron, el 19 de junio del año anterior, Seneca se encontraba en una casa con un hombre al que había citado para tener encuentros sexuales, pero al que después estranguló y pretendía matar.

Seneca recogió a otro hombre de 18 años para llevarlo a la casa solitaria de sus padres en Maryview Farm Road, al que después de un tiempo puso unas esposas y apuntó con un arma, pidiéndole que eligiera hacer las cosas “de manera fácil o manera difícil”, según los documentos de las autoridades que contienen las declaraciones.

Tras esto, lo condujo al baño, lo desnudó y lo sumergió a la bañera para tener un “encuentro sexual”. Sin embargo, fue Seneca quien describió que una vez allí, con el joven inconsciente, comenzó a cortar sus muñecas con un cuchillo.

“Seneca explicó que había esperado quitar y preservar las manos (del hombre), pero que no pudo terminar su plan después de ver los huesos de las muñecas (del hombre) expuestos bajo la carne”, fue la descripción que hizo el agente del FBI al documentar el caso.

A esto añadió que el hombre reconoció haber llorado durante los hechos que cometió. Además, tenía la “intención de desmembrar y conservar partes del cuerpo de la víctima como trofeos, recuerdos y comida”.

Seneca aceptó que Grindr fue su "terreno de caza" para atraer al hombre e intentar asesinarlo.

Mientras realizaba esto, Seneca se detuvo y prometió al hombre dejarlo ir y llamar al 911, pues era consciente de que necesitaba ayuda de una institución mental y ser internado.

Una vez llamó al 911, el joven de 19 años dijo que había una persona estrangulada y con heridas que necesitaba ser atendida de urgencia. Mientras tanto, se arropó y salió a la puerta de la casa a fumar un cigarrillo mientras llegaban las autoridades.

“Realmente jodí mi vida esta noche. Es mi culpa. No quería que todo esto sucediera. Traté de controlar todo tan bien, iba tan bien. No quiero que me maten y solo quiero ayuda”, fueron las declaraciones recogidas por los agentes la misma noche de los sucesos.

Mientras tanto, el otro joven fue auxiliado, encontrado sin muñecas y en un grave estado de salud, razón por la que pasó varias semanas en una unidad de cuidados intensivos. En el lugar encontraron un cuchillo, un picahielos, una sierra y un martillo cerca de la bañera.

Si es declarado culpable por todos los delitos, el joven de Louisiana pagaría una condena perpetua, pues sus cargos involucran crimen de odio con intento de matar, un cargo de posesión de un arma de fuego en apoyo de un crimen de violencia, dos cargos de secuestro, un cargo de intento de secuestro y un cargo de obstrucción por destrucción de registros.

El gran jurado que ha tomado las decisiones por estos crímenes federales también sugirió que el joven enfrentara un cargo de intento de asesinato y otro cargo de crimen de odio a nivel estatal.