NACIÓN

Una niña fue expulsada del colegio por confesarle su amor a una compañera

El colegio cristiano optó por expulsar a la niña y a su hermano de 5 años porque sus creencias religiosas van en contravía a las de la institución.

31 de enero de 2021
Las niñas son las más perjudicadas con la nueva modalidad de estudio, pues ellas tienen acceso a herramientas tecnológicas en menor proporción que los niños.

Una historia sobre una niña de 8 años que fue expulsada de un colegio en Estados Unidos se ha vuelto viral. La historia ocurrió en la institución Rejoice Christian School, un plantel educativo religioso ubicado en Owasso, Oklahoma, donde Chloe Shelton estudiaba desde hace un par de años y actualmente cursaba segundo grado.

Sin embargo, fue expulsada porque según su madre, Delanie Shelton, le confesó a una niña que estaba enamorada de ella. La declaración de amor se convirtió en un tsunami para la pequeña, que fue retirada de inmediato del salón de clase hacia el patio de recreo y, durante las horas siguientes, fue castigada en la oficina del rector.

Antes de la expulsión, el director reprendió verbalmente a la pequeña. Y le insistió que en la Biblia se rechaza la relación entre parejas del mismo sexo y que las mujeres podían tener hijos exclusivamente con hombres.

La niña no tuvo otro remedio que suspender ese día las clases y marcharse a casa, pero las directivas del colegio cristiano le pidieron que no regresara al día siguiente. No obstante, una llamada telefónica confirmó la noticia: le cancelaban la matrícula. No podría regresar al plantel. La decisión también cobijó a su hermano de 5 años porque, según la escuela, las creencias de los niños no se alineaban con las de la institución académica.

La madre de la menor se declaró sorprendida porque pese a que en el colegio cristiano las relaciones entre el mismo género son consideradas un pecado y generan expulsiones y discriminaciones, para ella no es ningún problema.

Aunque la madre enojada y desconcertada, quien nunca había leído el manual del colegio desde que matriculó a su hija desde hace tres años, pidió una reunión para hablar lo ocurrido, el rector y los maestros se opusieron.

CNN intentó dialogar con el superintendente Joel Pepín, pero se negó a hablar del caso alegando privacidad y la política de la escuela de abstenerse a realizar comentarios públicos sobre cualquier estudiante o su familia.

Es más, el directivo alegó que el manual estudiantil habla de la inmoralidad sexual, incluido el hecho de profesar ser homosexual y bisexual.

En otras palabras, en el Rejoice Christian School está prohibido agarrarse de la mano, abrazarse, besarse públicamente porque genera expulsión. Lo mismo el embarazo.

La institución, que según su página web tiene matrículas abiertas para el nuevo año, se considera uno de los planteles cristianos más grandes del área de Tulsa.

“Nuestra visión es ser una escuela cristiana que brinde a los estudiantes excelencia en educación y fortaleza de carácter para que los alumnos estén equipados espiritual, intelectual, física y socialmente para impactar su comunidad y el mundo para Cristo”, dice su misión.

Sin embargo, el caso abre una discusión sobre discriminación que se vuelve aún más aguda debido a la edad de la pequeña.