Mafias, estafas y cierre fronterizo, ¿qué pasa en Venezuela?

No es un secreto que Venezuela pasa por uno de los momentos más complejos desde que Nicolás Maduro asumió la presidencia. La inflación es elevada; la caída del petróleo, el gran bastión de su economía, le ha quitado oxígeno a la revolución; la tensión entre el gobierno y la oposición sigue siendo latente y amenaza la estabilidad del régimen. Para completar el pueblo sufre por la escasez de alimentos.

Pero sin duda, la crisis económica que vive el país es lo que tiene a su mandatario más nervioso, al punto de anunciar medidas “necesarias” y “urgentes” para salvarla. 72 horas, este fue el plazo que el presidente dio para que el billete de 100 bolívares, el más valioso del país, saliera de circulación según se informó por medio de un decreto.

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Pero, además, el presidente venezolano ordenó cerrar cualquier tipo de vía de regreso de esos billetes de 100 bolívares al país sea "por tierra, mar o aire". Entre este cambio radical de estrategia se encuentra el cierre de la frontera con Colombia por 72 horas debido a que allí las casas de cambio estarían vinculadas a las presuntas “mafias” que tratan de pasar ilegalmente millones de bolívares.

Almacenes de dinero en el exterior

"Que se queden con su estafa en el exterior", dijo el presidente en su programa de radio "En contacto con Maduro", dirigiéndose a una supuesta "mafia". Las razones de tan drástica medida fueron matizadas este lunes por el ministro del Interior Néstor Reverol. Según explicó, el objetivo de estas supuestas "mafias" habría sido sacar el dinero de Venezuela para ahogar el sistema financiero del país. Una operación que, según Reverol, estaría controlada por Estados Unidos para intentar derrocar el sistema socialista de Venezuela.

Sin mencionar nombres concretos, Reverol se refirió a algunas ONG que habrían estado sacando billetes de 100 bolívares hacia Colombia, para enviarlos posteriormente a países como Suiza, Polonia, Ucrania, España, Republica Checa y Alemania. Ahora, el dinero estaría custodiado en su destino en grandes almacenes. El ministro del Interior llegó incluso a enseñar fotos de estos depósitos repletos de billetes donde podría haber hasta 300.000 millones de bolívares.

Para hacer que el negocio fuese atractivo para las ONG, las mafias, según la tesis del Gobierno, habrían prometido que pagarían entre 0,80 y 1,00 dólar por cada billete de 100 bolívares. Además, continuó Reverol, por cada billete de 100 bolívares que se sacase hacia Colombia habría una compensación automática de 120 bolívares.

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El sistema financiero del revés

Sin embargo, los motivos reales de una medida tan drástica podrían ser otros muy distintos. En realidad, el bolívar perdió un 75 por ciento de su valor frente al dólar en los últimos tres meses. El Fondo Monetario Internacional (FMI) calcula una tasa de inflación del 475 por ciento para Venezuela en 2016. Y el tipo de cambio actual de un billete de 100 bolívares en el mercado negro es de 2,4 céntimos de euro.

Para el Gobierno venezolano, no podría haber nada mejor que eliminar los billetes sobrantes del sistema financiero, ya que Nicolás Maduro financia los presupuestos imprimiendo moneda. Así, la retirada de los billetes contribuiría a estabilizar la moneda en lugar de ahogarla.

Además, siguen siendo un enigma las razones por las que se deberían pagar 120 bolívares a los que sacasen billetes de 100 del país. Y el ministro del Interior tampoco llegó a explicar cómo llegaban los billetes a manos de las ONG o las mafias. ¿A través de la venta? ¿De quién y a cambio de qué moneda? Si la mafia cambiase divisas estadounidenses por bolívares, podría incluso tener efectos positivos para la economía, consiguiendo los preciados dólares a cambio de billetes sin valor.

Este jueves, el Banco Central de Venezuela pondrá en circulación los nuevos billetes de 500, 1.000, 2.000, 10.000 y 20.000 bolívares. Para esa "mafia" también sería fácil sacar los nuevos billetes del país. Pero… ¿para qué le serviría?

Las críticas de la oposición

La decisión no ha caído bien entre los opositores del gobierno. Henrique Capriles asegura que Maduro quiere hacerle más difícil la vida a los venezolanos, “como si le diera placer poner a la gente a sufrir”.

Para Capriles el derecho de las cosas es que progresivamente se retiren los billetes y se introduzcan los de nueva denominación, para él 72 horas es un plazo insensato. Además, asegura que el argumento que tuvo Nicolás Maduro para tomar las medidas, entre ellas cerrar la frontera con Colombia, no tiene asidero. “Eso es mentira que se están llevando los billetes a Colombia, eso no se lo cree nadie”, explicó el líder político.

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Jesús Torrealba, el secretario de la Mesa de Unidad Democrática (MUD), también se pronunció: "Y como de costumbre la soga revienta por lo más delgado, quien sufre más es el más pobre, porque es la población que está menos bancarizada. Quienes dependen más del efectivo son los pobres, tanto en la pobreza urbana, pero sobre todo en la Venezuela profunda, en la Venezuela rural".

Por su parte el diputado de la Asamblea Nacional Henry Ramos Allup cuestionó la asesoría que está recibiendo el gobierno para tomar las decisiones. "Genio financiero q está asesorando al gobierno en materia económica es el fulano Serrano enviado por (Juan Carlos) Monedero. ¿Y eso no es injerencismo?", publicó en su cuenta de Twitter.

El cierre de la frontera con Colombia

La frontera colombo-venezolana estuvo casi un año cerrada por orden del gobierno de Nicolás Maduro. La decisión generó una crisis humanitaria por la expulsión de miles de colombianos desde Venezuela, además de tensión diplomática entre ambos países.

En ese momento entre las razones que tenía Maduro para bloquear el paso se encontraba la presencia de "mafias", además de la presencia de supuestos paramilitares y la amenaza del contrabando.

"Con el cierre de la frontera el año pasado se demostró de manera fehaciente cómo mafias delinquían a lo largo y ancho de ese territorio: mafias paramilitares de la derecha colombiana asociadas con mafias paramilitares de la frontera venezolana", señaló el mandatario en enero de 2015.

Ahora, y después de que los problemas en la frontera parecían mermar, se volvió a cerrar unilateralmente. Las palabras de Maduro cayeron como un balde de agua fría. "Le quemé las manos a la mafias con esta decisión, y yo pido el apoyo de toda Venezuela (...) Nada más hoy en la mañana se capturaron 64 millones de bolívares por eso a partir de hoy queda cerrada la frontera con Colombia otra vez por 72 horas, he dado la orden", aseveró.

El gobierno de Colombia se ha manifestado a través del Ministro de Defensa: "Ante decisión de cierre de frontera por parte de Venezuela, los casi 50 pasos comunes se reforzarán con patrullajes de FFAA".

Con información de Deutsche Welle