Víctima abatió a ladrón que fingía ser un domiciliario. Todo quedó registrado en video

Los delincuentes siguen al acecho de quién será su próxima víctima y el momento preciso para intentar salirse con la suya, independientemente de si es de día o noche o cuántas personas se encuentren alrededor. Sin embargo, en las últimas semanas han trascendido casos de algunos que optan por tomar la justicia por mano propia.

Algunos expertos han atribuido ese fenómeno a la baja percepción de seguridad en varias partes de la región y la ausencia de credibilidad en los organismos tradicionales. Más allá de la frustración y hastío ante el número de “dueños de lo ajeno”, las autoridades instan a evitar un enfrentamiento por los riesgos que se pueden enfrentar.

Un hombre en Brasil decidió tomar acciones por su cuenta, segundos después de haber sido víctima de robo por un sujeto que vestía como si fuera repartidor de comidas rápidas. El atraco ocurrió a plena luz del día en la calle, cuando la víctima de robo conversaba con una mujer en lo que parecía, según las cámaras de seguridad, una cafetería.

En medio de la plática, un sujeto se bajó de su moto y se dirigió al brasileño, que estaba conversando. No fue sino hasta que estuvo a centímetros de este cuando sacó un arma y lo amedrentó para que le entregara sus pertenencias, logrando quedarse con un reloj sin advertir lo que su proceder estaba a punto de desatar en el ‘blanco‘ que había escogido.

Aquel que supuestamente era un repartidor domiciliario, por el casco y la mochila que portaba, fue abatido en el lugar, después de que al retroceder fuera sorprendido por un disparo que terminó dejándolo tendido en el pavimento, mientras que la mujer que presenció minuto a minuto lo ocurrido señaló a un segundo individuo a pocos metros de la escena.

Hace unos días, un hecho similar se registró en la calle San Ignacio de Loyola, en Santiago de Chile, cuando otro sujeto, que en apariencia era repartidor, se subió a la acera e intentó arrebatarle el celular a un joven. El actuar delictivo fue presenciado por un conductor, quien pese a no tener relación directa con el atraco pasó su vehículo varias veces por la moto del asaltante hasta dejarla prácticamente inservible.

En ese momento el sospechoso salió a correr, pero el actuar del conductor fue percibido por otro testigo como “imprudente”, ya que su maniobra pudo derivar en un accidente de tránsito. “Me percato a lo lejos de que un sujeto en moto, vestido con la apariencia de un delivery (repartidor) de aplicación, le arrebata el teléfono a un joven y él arranca, huye por la acera”, señaló un testigo, quien se identifica como Rodrigo a CHV Noticias.

“Es arriesgada la maniobra del conductor porque (...) efectivamente con la adrenalina (...) también pudo provocar un accidente grave, ya que lo hizo casi contra el tránsito. Entonces (las consecuencias) podrían haber sido mayores y quizás los resultados hubieran sido nefastos para él”, añadió Rodrigo sobre la escena.

En México, en otro hecho aislado, un grupo de indígenas fue señalado de linchar públicamente a un joven de 26 años, acusado de supuestamente integrar una red que roba vehículos. Medios locales indicaron que, tras propinarle una golpiza, procedieron a prenderle fuego en una plaza pública del estado de Chiapas.

Lugareños que se encontraron con la escena dieron aviso a las autoridades, mismas que al llegar al sitio encontraron al individuo sin vida. Posteriormente, estas determinaron que el cuerpo tenía quemaduras de tercer grado.