Violencia imparable en México: muere guardia nacional tras explosión de carro bomba en estado de Guanajuato

Un guardia nacional murió tras la explosión de un coche bomba el pasado miércoles en México, informó este viernes 30 de junio el gobierno en lo que constituye un ataque inusual en medio de la violencia criminal que golpea al país.

Inicialmente, el jueves, autoridades habían reportado que cuatro uniformados habían resultado con lesiones graves.

“Hicieron estallar esta bomba al momento que elementos de la Guardia Nacional fueron a revisar un carro y estallaron este artefacto y le quitaron la vida a un elemento de la Guardia Nacional”, dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador en una conferencia de prensa.

Según la fiscalía de Guanajuato, este ataque se registró la noche del miércoles en el municipio de Celaya, cuando elementos de esta policía militarizada atendían el reporte de un automóvil abandonado con impactos de bala.

Tras unos cinco minutos de estar inspeccionando el vehículo, el cual no contaba con placas de identificación, este explotó arrojando a los agentes al suelo e hiriendo visiblemente a uno de ellos que perdió el brazo derecho, según testimonios recabados por el ministerio público.

Rodríguez anunció que se investigaría la versión de que los agentes fueron atraídos al vehículo mediante un reporte telefónico falso, así como la posibilidad de que el objetivo del ataque fueran agentes de la policía municipal y no de la Guardia Nacional.

Este viernes, López Obrador aseguró que “se tienen identificados” a los presuntos responsables de la detonación de este coche bomba.

“Es un reducto de estos grupos que se crearon desde hace muchos años y ya están en actitud de mucha violencia, estamos decomisando muchas granadas, bombas”, dijo el presidente sin identificar a la banda criminal.

Los ataques con coche bomba son algo poco frecuente en México, sacudido desde 2006 por una ola de violencia ligada al narcotráfico.

Según recuentos de medios, en México se habían registrado previamente al menos cinco acciones de este tipo desde 2010.

En dos de estos se buscó atraer la atención de uniformados antes de la explosión, dejando un muerto y varios heridos.

Guanajuato, un próspero centro industrial, se ha convertido en uno de los estados más violentos de México debido a la disputa entre los grupos Santa Rosa de Lima y el cártel Jalisco Nueva Generación, dedicados al narcotráfico y el robo de combustibles, entre otros delitos.

En lo que va de este año, 14 policías de Celaya han sido asesinados, mientras que el total de agentes ultimados en el estado asciende a 32, según datos de las autoridades.

El mismo miércoles fue noticia otro espeluznante hecho relacionado con la violencia del narcotráfico: Un enfrentamiento entre presuntos delincuentes dejó al menos ocho muertos y un herido en una zona serrana del estado de Chihuahua (norte), como informaron autoridades locales.

La fiscalía estatal detalló en un comunicado que la balacera se registró durante la tarde en Guachochi, una de las mayores localidades de una zona montañosa de difícil acceso donde habitan los indígenas de la etnia tarahumara.

En el lugar, un cruce de caminos, fueron halladas “ocho personas sin vida, tres de ellas calcinadas, así como de un hombre lesionado, que fue trasladado para su atención médica”, detalló el boletín.

Las autoridades también localizaron dos camionetas calcinadas.

Según medios locales, este enfrentamiento involucró a células rivales del Cártel de Sinaloa, uno de los más poderosos de México, y entre las víctimas estaría un jefe local de la banda criminal.

La sierra tarahumara, localizada en una de las rutas de la droga hacia Estados Unidos, ha sido sacudida durante años por el narcotráfico.

Con información de AFP.