¿Xi Jinping le saca el cuerpo a Biden? El líder chino evalúa no asistir a la cumbre del G20, siguiendo ejemplo de Putin

La pugna entre las potencias ya ni siquiera respeta aquellos espacios creados para crear escenarios de diálogo y entendimiento.

Si, por un lado, se dice que Estados Unidos y China quieren enmendar sus relaciones, últimamente deterioradas por una serie de rifirrafes económicos y políticos, por el otro, los líderes dan muestras de orgullo y desechan oportunidades para normalizar las relaciones.

Al menos eso se puede decir de Xi Jinping, el presidente de China, quien no estaría muy convencido aún de asistir a la cumbre del G20 en Nueva Delhi, la capital de India.

De ser así, ello marcaría un nuevo revés para las relaciones entre ambas naciones, ya que la cumbre era vista como la oportunidad perfecta para que el líder del gigante asiático se encontrara con su homólogo de Estados Unidos, Joe Biden, quien ya confirmó su asistencia, e hicieran un nuevo intento por limar asperezas en el marco de su amplia agenda bilateral.

Biden y Xi Jinping no se encuentran desde noviembre pasado, cuando, precisamente, aprovecharon la reunión del G20 para sostener una reunión al margen.

La agencia Reuters informó que dos funcionarios de India, un diplomático que representa a su país en China y un funcionario de uno de los países del G20, le contaron que Xi Jinping no irá a India, pero mandará en su representación al primer ministro, Li Quiang.

Este alto dignatario, así mismo, será enviado por su gobierno a la cumbre de líderes de Asia Oriental y Suroriental en Yakarta, Indonesia.

Para los observadores, con esta actitud, el presidente chino estaría siguiéndole los pasos a su homólogo de Rusia, Vladímir Putin, quien no participará en la cumbre y enviará a Sergei Lavrov, ministro de Relaciones Exteriores.

La posibilidad de que el mandatario de China no acuda a India, surge justo después de la reunión de los BRICS o de las principales economías emergentes, en Johannesburgo (Sudáfrica), en la cual China y Rusia tuvieron un papel preponderante, en su intento por quitarle terreno a Estados Unidos en la esfera geopolítica.

Los ánimos también están un poco caldeados debido a encuentros entre representantes chinos y rusos en las que se pusieron de acuerdo para oponerse a que, en la cumbre del G20, se incluyan declaraciones de condena a Rusia por su invasión a Ucrania, el año pasado, lo que ha desatado la que ya es considerada como el peor conflicto bélico de Europa desde la Segunda Guerra Mundial.

China también ha estado haciendo movimientos para reconquistar a otro jugador importante de su vecindario, India (otro de los BRICS).

Ello con el fin de recomponer las relaciones alrededor del complicado tema fronterizo del Himalaya, donde enfrentamientos entre los dos países, dejaron 24 soldados muertos hace tres años.

A pesar de todo ello, los expertos recuerdan que Xi Jinping parece seguir una línea no muy dada a desplazarse al extranjero, luego de hacerse con un tercer mandato, en un hecho sin precedentes en la política china, en octubre de 2022.

El G20 reúne a las 20 economías más grandes del planeta y se enfoca en temas como mitigación del cambio climático, desarrollo sostenible, economía y estabilidad financiera.

Si Biden y Xi Jinping no se ven las caras en Nueva Delhi, queda la posibilidad de que lo hagan en otra importante cumbre: la Reunión de Líderes del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico, que tendrá lugar en San Francisco, California, entre el 12 al 18 de noviembre próximo.