Ucrania
Zelenski pide en Londres las “armas necesarias” contra Rusia; tendrá reunión con el rey Carlos III
El diálogo entre el Reino Unido, “uno de los primeros” países “en acudir en ayuda de Ucrania”, es “muy importante para la seguridad en nuestro país y por supuesto la seguridad en el mundo”, afirmó Zelenski durante su reunión con Sunak en Downing Street.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, instó el miércoles 8 de febrero a sus aliados occidentales a proporcionarle las “armas necesarias” para detener la invasión rusa, durante una reunión en Londres con el primer ministro británico, Rishi Sunak.
Zelenski “subrayó la importancia de que Ucrania reciba las armas necesarias de los aliados para detener la ofensiva rusa y liberar todos los territorios ucranianos temporalmente ocupados”, declaró la presidencia ucraniana en un comunicado tras la reunión de ambos dirigentes.
Se trata de su segundo viaje al exterior desde que comenzó la invasión rusa. “Seguiremos apoyando a Ucrania para garantizar una victoria militar decisiva en el campo de batalla este año”, afirmó el primer ministro Rishi Sunak ante el Parlamento, después de haber recibido a Zelenski y antes de que este se dirigiese a los diputados británicos.
El diálogo entre el Reino Unido, “uno de los primeros” países “en acudir en ayuda de Ucrania”, es “muy importante para la seguridad en nuestro país y por supuesto la seguridad en el mundo”, afirmó Zelenski durante su reunión con Sunak en Downing Street. Por la tarde, el presidente ucraniano será recibido por el rey Carlos III en el Palacio de Buckingham.
Tendencias
El líder ucraniano les pide a los occidentales que refuercen su ayuda militar en un momento en que su país teme un nuevo ataque ruso a gran escala. Su primera visita al exterior tras la invasión rusa en febrero de 2022 fue un viaje relámpago a Washington en diciembre: allí fue recibido por el presidente Joe Biden, dio un discurso en el Congreso y logró que Estados Unidos accediera a suministrarle misiles Patriot para contrarrestar ataques aéreos y de misiles rusos.
“Rusia cometería un grave error si pensara que alguien se cansaría de luchar contra el mal que trae”, tuiteó el ministro ucraniano de Relaciones Exteriores, Dmitro Kuleba, tras una llamada con su homólogo estadounidense Antony Bliken, “sobre la nueva ayuda militar”.
Tras su viaje sorpresa a Londres, parece “probable”, aunque aun sin confirmar, que Zelenski visite después Bruselas, donde fuentes concordantes señalaron la posibilidad de una sesión extraordinaria del Parlamento Europeo con su presencia el jueves. Ese mismo día comienza una cumbre de líderes de la Unión Europea a la que Zelenski podría sumarse.
Alemania accedió recientemente al envío de carros de combate y el martes 7 de febrero anunció junto a Holanda y Dinamarca que entregarán “al menos 100 tanques Leopard 1 A5″ en “los próximos meses”. Sin embargo, otros países que se habían comprometido previamente a contribuir parecen estar demorándose. Los expertos coinciden en que Rusia prepara una ofensiva de gran envergadura para finales del invierno o inicios de primavera, con el objetivo de conquistar la totalidad del Donbás, actualmente ocupada parcialmente por las fuerzas rusas.
En las librerías de Moscú salieron a la venta el martes mapas actualizados de Rusia que incluyen regiones de Ucrania que el primer país afirma haberse anexionado: Zaporiyia, Jersón, Lugansk y Donetsk.
Zelenski habló con Sunak “sobre el apoyo británico a Ucrania, empezando por un aumento inmediato del suministro de equipos militares para ayudar a hacerle frente a la ofensiva de primavera de Rusia y reforzándolo con un apoyo a largo lazo”, según Downing Street.
“Esta formación permitirá que los pilotos puedan pilotar aviones de combate sofisticados de acuerdo con las normas de la Otan”, del tipo que Zelenski reclama, precisó.
El Reino Unido entregó 2.800 millones de dólares americanos en ayudas militares a Ucrania el año pasado y se comprometió a mantener este año el mismo nivel, segundo en el mundo tras Estados Unidos. Hasta ahora, ha aceptado suministrar 14 tanques Challenger 2, pero se ha mostrado reacio a suministrarle a Ucrania aviones de combate Typhoon y F-35.
La semana pasada, Sunak consideró que los pilotos ucranianos necesitarían “meses” o incluso “años” de formación para aprender a manejarlos y que buscaba la manera más eficaz de ayudar a Kiev a ganar la guerra. Unos 10.000 voluntarios ucranianos ya ha sido entrenados “para el combate” en los últimos seis meses gracias a un programa británico que debe llegar a otros 20.000 este año.
Coincidiendo con la visita de Zelenski, el gobierno británico, que ya ha sancionado a más de 1.300 personas y entidades rusas desde la invasión de Ucrania, reforzó dichas sanciones para incluir “seis entidades proveedoras de material militar, como drones” y “ocho personas y una entidad vinculadas a redes financieras” cercanas al Kremlin.
Se espera que se reúna también con el rey Carlos III.
Zelenski, el presidente de Ucrania, de cómico a mandatario en crisis
Durante mucho tiempo, Volodímir Zelenski arrastró la imagen de un excómico de la televisión elegido presidente de Ucrania casi por casualidad, pero a raíz de la crisis con Rusia se ha convertido, a ojos de sus compatriotas, en un líder que supo mantenerse firme y sereno, ajeno al pánico.
Este hombre de 44 años llegó a la Presidencia a tiempo para ser testigo del peor pulso entre el Kremlin y las potencias occidentales desde el fin de la Guerra Fría hace más de tres décadas. Vio cómo Rusia rodeaba su país con más de 100.000 soldados y cómo Washington multiplicaba sus alertas de una guerra “inminente” que podía empezar “cualquier día”.
Zelenski asumió todo esto e hizo lo que sabe hacer mejor: pidió calma a los más de 40 millones de ucranianos y planificó una fiesta. “¿Qué deberíamos hacer? Solo una cosa: estar tranquilos”, dijo entonces.
“Celebraremos Semana Santa en abril. Y luego, en mayo, lo mismo de siempre: sol, vacaciones, barbacoas. Y poco después, es verano”, añadió.
Luego, para el 16 de febrero del año pasado, la fecha que algunos dirigentes estadounidenses señalaban como la del lanzamiento del ataque ruso, declaró el Día Nacional de la Unidad, invitando a sus ciudadanos a salir con banderas y globos amarillos y azules.
“No tan mal”
En 2019, Zelenski dirigió su carrera presidencial como una broma. Saltó a la fama interpretando a un profesor grosero que llegó a presidente después de que un alumno suyo grabara y colgara en internet su profana diatriba contra la corrupción.
La comedia vespertina se convirtió en un gran éxito en un país atrapado en un cambio cataclísmico. La revolución prooccidental de 2014 echó al líder respaldado por el Kremlin y trajo unos nuevos dirigentes que tuvieron que lidiar con un creciente conflicto en el este y una economía al borde del colapso.
Los ucranianos vieron al presidente de la comedia lanzarle bromas ordinarias a su mujer o pedalear hacia su trabajo con una asustada cara de pánico. El personaje captó la emoción del momento y le ofreció a Zelenski una pequeña fortuna. Después derrotaría al presidente saliente Petro Poroshenko, hundido por distintas crisis, con más del 70 % de los votos.
Algunos ciudadanos se preparaban para lo peor entonces. Los críticos lo comparaban a otras celebridades entradas en política como el italiano Silvio Berlusconi o el estadounidense Donald Trump. Su temprana decisión de incluir a su equipo a miembros de su productora televisiva tampoco ayudó a construir confianza.
Momento definitorio
El pulso con Rusia por el deseo ucraniano de ingresar a la Otan —una aspiración escrita en su Constitución, pero que parecía muy improbable en las próximas décadas— puede definir la presidencia de Zelenski para los años venideros.
Llegó al poder tratando de abrir líneas de comunicación con Vladímir Putin para resolver el sangriento conflicto separatista en el Donbás, que había costado para ese momento 14.000 vidas.
Los dos celebraron una cumbre en París meses después de la elección de Zelenski que el dirigente ruso describió como un “paso importante”. Pero Zelenski llevaba un guion distinto en su comparecencia posterior. “Mis interlocutores han dicho que es un muy buen resultado para un primer encuentro. Pero seré honesto, ha sido muy poco”, dijo.
Las relaciones entre ambos se han ido deteriorando desde entonces. Putin acusó al Gobierno de Zelenski de “discriminar” a los rusohablantes y de renegar de sus promesas pasadas de solucionar el conflicto en el este del país.
“Si Rusia no escala y reduce su posición cerca de Ucrania, será probablemente un poco vergonzante para la comunidad de inteligencia estadounidense, pero también reforzará la posición de Zelenski”, indicó el analista Rob Lee, del Foreign Policy Research Institute.
“No retrocedió y el respaldo militar de la Otan aumentó”, agregó.
La guerra entre ambos países es hoy una de las mayores preocupaciones del mundo.
Con información de la AFP.