Declaraciones de impuestos y registros fiscales de Trump están en la Fiscalía de Nueva York

Los registros fiscales del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, así como sus declaraciones de impuestos están ahora en poder del fiscal del distrito de Manhattan (Nueva York).

Los registros llegaron a la Fiscalía de Nueva York esta semana, horas después de que la Corte Suprema de Estados Unidos negara el último esfuerzo de Trump por mantener la privacidad de los documentos.

Las millones de páginas de documentos contienen las declaraciones de impuestos de Trump que abarcan desde enero de 2011 hasta agosto de 2019, así como estados financieros, acuerdos de compromiso, documentos relacionados con la preparación y revisión de declaraciones de impuestos, entre otros.

Aunque los documentos entregados por la antigua firma de contabilidad de Trump, Mazars, no se darán a conocer al público porque están sujetos a ciertas reservas, su entrega a la Fiscalía culmina una búsqueda de 17 meses por parte del expresidente y sus abogados para impedir que los investigadores obtengan los registros.

El fiscal de distrito de Nueva York, Cyrus Vance, está investigando si Trump y la Organización Trump participaron en fraude fiscal, fraude de seguros y otros esquemas para defraudar, incluido el posible suministro de información falsa a instituciones financieras o bancos sobre el valor de ciertos edificios y activos.

Con los registros ahora en la mano, Vance y sus colegas fiscales podrán profundizar en las teorías de investigación, buscar entrevistas con testigos clave y determinar si creen que se ha violado alguna ley estatal.

“Nuestra oficina obtuvo los registros el lunes”, dijo el portavoz de Vance, Danny Frost.

Los registros pueden ser fundamentales para la investigación porque es probable que contengan documentos que reflejen la toma de decisiones detrás de las valoraciones y las cancelaciones de impuestos, lo que puede ser importante para determinar si hubo intención de cometer un delito.

Los investigadores han querido revisar los documentos antes de llamar a testigos clave ante el gran jurado, dijeron a medios internacionales personas familiarizadas con la investigación.

Además de los registros de Mazars, la oficina de Vance ha estado buscando una gran cantidad de otros documentos.

Los investigadores han citado registros y entrevistado a empleados del Deutsche Bank, uno de los acreedores de Trump, sobre los préstamos que se le otorgaron a él y al corredor de seguros Aon. El Deutsche Bank le ha prestado a Trump más de US$300 millones.

Los fiscales también han citado a Ladder Capital, que ha prestado a la Organización Trump más de US$$100 millones, y a la Organización Trump por registros relacionados con los honorarios pagados a consultores, incluida Ivanka Trump.

También entrevistaron al exabogado personal de Trump, Michael Cohen, que cumple prisión domiciliaria. Cohen le dijo al Congreso que Trump y su empresa inflaban o reducían artificialmente el valor de sus activos para obtener préstamos bancarios o reducir impuestos.

Si las sospechas se confirman y Trump es inculpado, el caso podría culminar con el encarcelamiento del expresidente neoyorquino, que reside en su club de golf de Mar-a-Lago, en la Florida, desde que dejó la Casa Blanca el 20 de enero pasado.

“Hace 200 años, un gran jurista de nuestra Corte estableció que ningún ciudadano, ni siquiera el presidente, está categóricamente por encima del deber común de presentar pruebas cuando se le solicita en un proceso penal”, aseguró el presidente de la Corte Suprema, John Roberts, en el primer fallo de julio pasado.

Una investigación del diario New York Times que obtuvo información sobre dos décadas de impuestos de Trump y sus firmas reveló en septiembre pasado que el expresidente ha sufrido fuertes pérdidas, tiene grandes deudas y ha evitado pagar impuestos federales sobre la renta en 11 de los 18 años examinados.

En 2016 y 2017 pagó apenas 750 dólares en impuestos, según el Times.