Donald Trump calificó como una “interferencia en elecciones” el veredicto por agresión sexual en su contra; afirmó que apelará

Tras conocerse el veredicto de un jurado federal de Manhattan, que le declaró culpable al expresidente Donald Trump de abusar sexualmente de la escritora Elizabeth Jean Carroll en 1996 y años después, difamar en contra ella cuando denunció públicamente el asalto, el magnate denunció que iba a apelar el veredicto, puesto que se trataba de una nueva forma de “cacería de brujas” en su contra.

En una serie de videos publicados a través de su red social Truth Social, Trump insistió que su juicio “es una continuación de la mayor caza de brujas de la historia”, y lo calificó de “un juicio muy injusto”. El veredicto, afirmó, es “una desgracia para nuestro país”.

“Ni siquiera sé quién es esta mujer, no la conozco de absolutamente nada, es otro fraude, una caza de brujas política”, insistió reiteradamente, alegando a sus seguidores que “debemos luchar, no podemos dejar que nuestro país caiga en este abismo”.

Y continuó: “no tengo idea de quién es esta mujer que hizo una acusación falsa y totalmente fabricada ¡Esperemos que se haga justicia en la apelación!”, escribió el expresidente estadounidense en su cuenta, indicando que al no aceptar el fallo en su contra, seguiría luchando para que este sea apelado.

Y agregó: “¡esta caza de brujas se trata de la interferencia en las elecciones, pero hasta ahora parece ser contrafuego para los inadaptados de la izquierda radical que no pueden ganar una elección sin hacer trampa!”, indicando además, que el juicio en su contra era una treta más para apartarlo de la presidencia de Estados Unidos.

Al tratarse de un caso civil, Trump no se enfrenta a penas de cárcel, sino que tendrá que pagar cinco millones de dólares (más de $22.748 millones de pesos colombianos aproximadamente) a Carroll.

Por su parte, la demandante ha mostrado su satisfacción con el resultado del proceso penal, y a través de un comunicado ha mostrado su agradecimiento por la sentencia, que es “una victoria no solo para mí, sino para todas las mujeres que han sufrido por no ser creídas”.

“Presenté esta demanda contra Donald Trump para limpiar mi nombre y recuperar mi vida, hoy el mundo al fin conoce la verdad”, aseveró la experiodista, indicando que

Carroll declaró a finales de abril ante la Justicia estadounidense haber sido violada a mediados de la década de los 90 por el expresidente Trump, quien por aquel entonces no había iniciado su carrera política y era conocido como uno de los grandes magnates del país.

El tribunal no ha considerado que hubiese pruebas suficientes para determinar si Trump violó a Carroll, pero sí lo ha considerado culpable de abuso sexual.

“Nadie está por encima de la ley, ni siquiera el expresidente de Estados Unidos”, dijo por su parte Roberta Klapan, su abogada, quien recordó que “por demasiado tiempo los supervivientes de agresiones sexuales han hecho frente a un muro de duda e intimidación”.

Es de recalcar que Trump no declaró durante el juicio ni su defensa convocó a ningún testigo, pero en un video de la declaración bajo juramento que hizo a la abogada de Carroll, en octubre pasado y que fue mostrado al jurado, tacha a la experiodista de “mentirosa” y “enferma”.

Los abogados de Trump sostenían que se había inventado la agresión movida por el “dinero, razones políticas y estatus”. Sin embargo, Carroll se amparó en una ley promulgada en noviembre en el estado de Nueva York que dio a las víctimas de agresiones sexuales que habían prescrito un plazo de un año para demandar a sus presuntos agresores.

El expresidente tiene otros frentes abiertos en la justicia. El mes anterior, se declaró inocente en un caso penal relacionado con un pago de dinero en negro para comprar el silencio de una estrella porno justo antes de la elección de 2016.

También está siendo investigado por sus esfuerzos para revertir su derrota en las elecciones de 2020 en el estado de Georgia, su presunto mal manejo de documentos clasificados sacados de la Casa Blanca y su implicación en el asalto al Capitolio estadounidense por parte de sus partidarios el 6 de enero de 2021.

*Con información de Europa Press y AFP.