Estados Unidos
Entra en vigencia prohibición de la venta de armas de asalto en el estado de Washington, en EE. UU.
La norma contempla la prohibición de la fabricación, importación, distribución y venta de armas de asalto en el estado.
El gobernador demócrata de Washington, Jay Inslee, sancionó este martes la ley para prohibir la venta de armas de asalto a los ciudadanos estadounidenses de este estado tras ser aprobado por la Cámara de Representantes la pasada semana.
La norma, que fue aprobada la pasada semana por la Cámara y también por el Senado, contempla la prohibición de la fabricación, importación, distribución y venta de armas de asalto en el estado, con la única excepción de aquellas que se vendan al Ejército y las fuerzas del orden, de acuerdo con una información de la cadena CNN.
“La violencia armada es una amenaza para la salud pública y la seguridad de los habitantes de Washington”, de acuerdo con la ley, que establece además que “los rifles de asalto son versiones civiles de armas creadas para el Ejército y diseñadas para matar de la manera más rápida y eficiente” posible.
Luego de la firma, la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, afirmó en un comunicado que, con esta decisión, “Washington se ha convertido en el décimo estado en prohibir las armas de asalto y sacar las armas de guerra de las calles”.
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“El presidente Biden elogia el liderazgo del gobernador de Washington, Jay Inslee, y los líderes legislativos, así como los defensores, los sobrevivientes y los funcionarios electos que lucharon durante años para hacerlo realidad”, añadió.
Pese a que fue un compromiso, el mandatario no ha logrado que se prohíban los rifles de asalto, con los cuales se han cometido varios tiroteos masivos.
Dos adolescentes arrestados y acusados de asesinato tras tiroteo en Alabama
Esta noticia se produce en momentos en que dos adolescentes fueron arrestados y acusados de asesinato en Alabama, sur de Estados Unidos, después de que un tiroteo en una fiesta de cumpleaños que dejó cuatro muertos y una treintena de heridos, dijeron autoridades locales.
Ty Reik McCullough, de 17 años, y Travis McCullough, de 16, fueron arrestados y acusados de asesinato, dijo el sargento Jeremy Burkett, portavoz de la policía de Alabama, en una conferencia de prensa.
Los dos adolescentes, de la localidad de Tuskegee, a unos 60 kilómetros al este de la capital del estado, fueron detenidos por las autoridades.
A pesar de ser menores de edad, ambos serán llevados ante la justicia como adultos, agregó el fiscal general Mike Segrest, y agregó que cuatro víctimas hospitalizadas aún estaban en estado grave.
A mediados de abril, una fiesta de “Sweet 16″, la celebración de cumpleaños número 16 de una chica, equivalente al de las quinceañeras hispanoamericanas, terminó en tragedia en el pequeño pueblo de Dadeville, Alabama, cuando estalló un tiroteo que mató a cuatro jóvenes de entre 17 y 23 años e hirió a 32 personas.
Entre los muertos está Philstavious Dowdell, el hermano mayor de la adolescente que celebraba su cumpleaños. El joven de 18 años era un atleta destacado que había recibido una beca para jugar fútbol americano en la Universidad Estatal de Jacksonville.
La fiesta parece haber degenerado en violencia cuando la madre de la cumpleañera dijo que se había enterado de que había gente armada y les pidió que se fueran, según informes de los medios locales.
Las autoridades aún no han dado ninguna información sobre el motivo del ataque.
A pesar de la corta edad de las víctimas y las trágicas circunstancias, este tiroteo provocó una reacción política relativamente pequeña, incluso aunque el presidente Biden dijo que Estados Unidos estaba “nuevamente en duelo”.
La epidemia de violencia armada en Estados Unidos no muestra señales de disminuir.
El tiroteo en Alabama se produjo pocos días después de que un empleado bancario matara a cinco personas en su lugar de trabajo en Kentucky.
También ha habido una serie de tiroteos en los que personas recibieron disparos después de tocar el timbre equivocado, acercarse a la casa equivocada o ingresar al automóvil estacionado equivocado.
La altísima tasa de mortalidad por armas de fuego en Estados Unidos no tiene comparación con la de otros países desarrollados.
Los tiroteos mortales ocurren regularmente en Estados Unidos, un país de unos 330 millones de personas en el que se calcula que hay unos 400 millones de armas.
*Con información de Europa Press y AFP.