Estados Unidos y el ‘fantasma’ de la violencia: ¿cuántos tiroteos van en 2023?

El tiroteo en una escuela religiosa de Nashville es uno de los más recientes ataques violentos que han sacudido a Estados Unidos y que mantienen la zozobra entre la población. Esa agresión, perpetrada este lunes 27 de marzo, cobró la vida de tres niños (todos de nueve años) y tres adultos (entre los 60 y 61 años), mientras que la autora del hecho violento fue abatida.

En medio de la indignación y conmoción que sacudió a la nación norteamericana, el presidente Joe Biden reiteró su pedido al Legislativo para que vete las armas de asalto. Según el mandatario, hechos como ese son “repugnantes” y representan un ‘atentado’ contra el alma del país.

“Vuelvo a pedir al Congreso que apruebe mi prohibición de armas de asalto. Ya es hora de que progresemos un poco más (...). Estamos reuniendo los hechos de lo que sucedió y por qué. Quiero felicitar a la Policía que respondió increíblemente rápido en cuestión de minutos para acabar con el peligro”, dijo el lunes durante una alocución.

Los ataques siguen al alza

El de este lunes se suma a la lista de ataques que encienden las alarmas en Estados Unidos y es que el número continúa elevándose. Según informó Voz de América, con corte de este jueves 30 de marzo, se han registrado por lo menos 130 tiroteos y agudizado los temores entre los estadounidenses.

Hasta esa jornada, día del ataque en Nashville, la organización Gun Violence Archive presentó un balance de la violencia armada en lo corrido de 2023. Según sus estadísticas, hasta el 27 de marzo se habían reportado 4.194 decesos, 7.419 heridos, 13 asesinatos en masa, 188 niños con lesiones de bala, 1.155 adolescentes agredidos, 248 incidentes defensivos, 344 tiroteos no intencionales y más de 5.600 suicidios.

En cuanto al terror que se vivió en la escuela de Nashville, las autoridades encontraron que la autora, Audrey Hale (de 28 años), poseía siete armas. Voz de América informó que los papás de la mujer afirmaron no tener conocimiento de esa cantidad.

“Creemos que los estudiantes fueron atacados al azar. No había ningún estudiante, en particular, que estuviera buscando en ese momento”, fueron las palabras, por su parte, del jefe de Policía de esa ciudad John Drake. Ese medio estadounidense citó a Gun Violence Archive, al referir que del total de tiroteos de este año, 33 se han presentado en centros educativos.

El ‘martirio’ de los supervivientes

Como si el temor de estar en medio de un hecho violento no constituyera, de por sí, un calvario, la vida de algunas de las víctimas y sus familias cambió por completo. Uno de los casos es el de Ralph Norman, un joven que hoy tiene 30 años, y que más de una década atrás fue víctima de una bala perdida que lo dejó postrado en cama.

Todo comenzó en junio de 2010 cuando celebraba con algunos amigos su graduación, mientras se aprovisionaba de gasolina sin imaginarse que terminaría siendo víctima de un tiroteo. Tras despertarse del quirófano, supo que la vida que conocía hasta entonces había dado un giro de 180 grados.

Ahora depende, en su totalidad, de una persona que vele por sus necesidades básicas como cepillarse los dientes y comer. En conversación con AFP, Norman confesó que había ocultado cómo quedó parapléjico por el temor a señalamientos. “No quería que pensaran que pertenecía a una pandilla (...). Cuando mencionas violencia de armas de fuego, te estigmatizan”, dijo.

Ahora ha decidido intentar sobreponerse a las marcas de aquel día y, con ayuda de un ordenador que manipula con su boca, integra por videoconferencia un grupo de personas que también han sido víctimas. Allí no sólo hacen alusión a sus experiencias sino que discuten sobre hechos como el de Nashville.