Honduras lamenta asesinato de 5 ciudadanos en Texas, exige justicia y ofrece repatriar los cuerpos

En medio de la conmoción generada tras el tiroteo ocurrido la noche del pasado viernes en la ciudad de San Jacinto, Texas, y que dejó 5 personas muertas -una de ellas un menor de edad-, y luego de que se conociera que las víctimas son de origen hondureño, ha trascendido, a través de las redes sociales, un pronunciamiento por parte del Gobierno de ese país, extendiendo un mensaje de solidaridad con la familia de las víctimas, y elevando un vehemente llamado para que la justicia de Estados Unidos aplique todo el peso de la ley sobre el responsable del hecho.

El pronunciamiento del Gobierno hondureños fue expresado a través del secretario de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional, Enrique Reina, quien afirmó que el pueblo hondureño extiende un saludo de condolencia a los familiares de las víctimas, advirtiendo que desde la institución se ha dado indicaciones a los representantes del país in situ, pertenecientes al consulado, para que establezcan contacto con las autoridades locales y puedan hacer un seguimiento cercano al caso.

En ese mismo sentido, el funcionario elevó un mensaje en el que afirmó: “exigimos se aplique todo el peso de la ley contra el o los responsables de este crimen”.

Horas más tarde, y conforme avanzaron las investigaciones para dar con el paradero del autor de la matanza, el mismo Reina confirmó que se habían establecido lazos con los familiares de las víctimas, advirtiendo que, por orden de la presidenta de su país, Xiomara Castro, se encuentran en la total disposición de eventualmente extender su ayuda “por si es necesario repatriar los restos”.

En medio de la conmoción derivada de la matanza, el funcionario también compartió información con la que se confirmaron los nombres y la identidad de las cinco víctimas, contado el menor de 8 años que también cayó efecto de las balas en un hecho que es materia de investigación en Estados Unidos.

Así, las personas asesinadas, tras su levantamiento y recolección de pistas por parte de los forenses, fueron identificadas como Sonia Argentina Guzmán, Daniel Enrique Lazo, Diana Velásquez Alvarado, Obdulia Molina Rivera y Jonathan Cáceres.

A su vez, a través de las redes sociales también se conoció, por parte del director general del protección al hondureño migrante, Wilson Paz, que el viceconsul en Houston, se reunió en Pasadena, Texas, con los familiares de las víctimas.

Los hechos

La nueva matanza que enluta a Estados Unidos ocurrió la noche del pasado viernes 28 de abril, en la localidad de Cleveland, a donde acudieron los efectivos policiales tras recibir un reporte telefónico sobre la existencia de un hombre armado que había abierto fuego contra los asistentes a una reunión en casa.

Según el reporte de las autoridades de Cleveland, el aviso del tiroteo fue recibido cerca de las 11:31 p. m. hora local, y al atender al llamado, los agentes se encontraron con un desolador panorama marcado por la muerte de varias de las personas allí reunidas, además de tres heridos que fueron trasladados a un hospital cercano.

De acuerdo con declaraciones recogidas por el medio local CNN, y entregadas por el alguacil del condado, la edad de las personas, víctimas mortales de este nuevo acto violento, va desde los 8 a los 40 años.

Dentro del grupo de víctimas mortales, además del menor de 8 años, también figuran dos mujeres, quienes fueron encontradas en una de las habitaciones cubriendo a dos menores que afortunadamente sobrevivieron a la matanza.

Del total de cinco personas muertas, cuatro de ellas fueron halladas sin vida al momento de la llegada de la Policía al lugar, mientras que la quinta víctima falleció mientras era transportada a través de medios aéreos a un hospital cercano.

Sobre la persona responsable del hecho delictivo, las autoridades informaron que se trataría de un vecino, también origen latino, más precisamente mexicano, quien al parecer habría empleado un fusil de asalto AR-15 para perpetrar el crimen.

Sobre el sospechoso también se apuntó que este estaba ebrio al momento de haber emprendido el ataque, y que sería un hombre de cabello negro y corto, de aproximadamente 1,7 metros de estatura, y estaría vistiendo jeans, una camisa negra, y botas de trabajo.

Con el objetivo de ayudar con su captura, las autoridades de Texas elevaron un anuncio que precisa que se ofrece una recompensa de cinco millones de dólares a quien entregue información que permita dar con el paradero del sospechoso de ser el responsable del tiroteo.

El sospechoso fue identificado como Francisco Oropeza, de 38 años, quien es conocido en el sector por asumir conductas violentas y realizar frecuentemente disparos.

Según versiones presentadas por medios locales, el hombre se habría molestado porque desde la casa atacada le pidieron moderación en sus comportamientos debido a la presencia de menores de edad.