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Joe Biden califica de ‘’dictador’' al presidente chino Xi Jinping en presencia de la prensa
La situación política y económica entre ambas súper potencias no ha sido la mejor en los últimos años.
Washington y Pekín no han tenido las mejores relaciones desde que China ha aumentado su presencia económica en Europa, África y América Latina, además de considerar al gigante asiático como una de las mejores naciones para realizar inversiones bursátiles gracias a su constante proceso emergente como potencia alternativa.
Desde el inicio de la pandemia por Covid-19 algunos personajes políticos de peso intentaron persuadir al mundo del peligro que representaba China para la salud y la estabilidad mundial, aun así, con el pasar del tiempo estas ideas se fueron quedando sin fundamento, no obstante, parte de la sociedad considera a la nación asiática como una enemiga para el libre desarrollo económico y competitivo del planeta.
No obstante, varios han sido los obstáculos que China y Estados Unidos han tenido en su haber en política exterior, como los presuntos espionajes y la crisis de Taiwán, sin contar con los incidentes que han tenido por la libertad prometida a los ciudadanos en Hong Kong y por la crisis de salubridad que el mundo enfrentó por el coronavirus.
El 2023 como un guiño para las buenas relaciones exteriores China - EE. UU.
Desde que se conoció el anuncio de la reunión que iban a tener en Pekín, el presidente chino, Xi Jinping, con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, la diplomacia mundial celebró el encuentro, dando a conocer que en el diálogo estaba el inicio de la solución a las rivalidades que manejaban ambas naciones.
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“China respeta los intereses de Estados Unidos, y que no tratará de desafiar y reemplazar a EE. UU. Del mismo modo, EE. UU. debe respetar a China y no socavar sus derechos e intereses legítimos. Ninguna de las partes debe amoldarse a sus propios deseos, y mucho menos privar a la otra de sus legítimos derechos al desarrollo” expresó el mandatario chino luego de que la reunión se hubiese realizado el 18 de junio.
Por su parte, el diplomático estadounidense expresó: “Vine a Beijing para reforzar los canales de comunicación de alto nivel, para dejar claras nuestras posiciones e intenciones en áreas de desacuerdo, y para explorar áreas en las que podríamos trabajar juntos en nuestros intereses coincidentes, en desafíos transnacionales compartidos, y todo eso lo hicimos”.
No obstante, dos días después, en medio de una recepción de donantes del partido demócrata, Joe Biden utilizaría un calificativo hacia Xi que podría reversar lo avanzado en Pekín con la visita de Blinken.
¿Qué dijo Joe Biden de Xi Jinping?
En la noche del 20 de junio, mientras Biden se encontraba departiendo una reunión con donantes para el partido demócrata en California, el mandatario estadounidense se dirigió a la prensa y aseveró: “La razón por la que Xi Jinping se molestó mucho cuando derribé ese globo con dos vagones llenos de equipo de espionaje, es que no sabía que estaba allí” y precisó: “Lo digo en serio. Esa fue la gran vergüenza de los dictadores, cuando no sabían lo que pasó”, de acuerdo a AFP.
El episodio del derribamiento de los globos vuelve a ser protagonista en la relación entre Washington y Pekín, junto con otros escándalos de supuesto espionaje como los turistas que por poco se adentran a una base militar norteamericana en el Estado de Alaska.
Pekín, por su parte, ha sido cauteloso al pronunciarse sobre estas acusaciones, no obstante, cuando se trata de Taiwán, China es la primera en demostrar su arsenal militar para prevenir a Estados Unidos de pisar en falso en “la provincia rebelde”, como denomina Pekín al gobierno de Taipéi, mientras defiende su lema de “Un país, dos sistemas”, haciendo referencia a la ciudad de Hong Kong, la cual hace parte de China desde 1997 con la retirada por parte del Reino Unido y es referente del capitalismo existente en la nación asiática.
