NACIÓN

10 historias de SEMANA para entender el éxodo venezolano

El mensaje de Navidad del papa Francisco estuvo dedicado a la crisis del vecino país, una ola migratoria que tiene en jaque a toda América Latina. Estas son algunas historias que explican la realidad de millones de venezolanos que huyen del declive económico y social.

25 de diciembre de 2018
La ola migratoria ha sido el punto de quiebre de la crisis que se vive en el país vecino.

La crisis política y económica de Venezuela ha ahogado a los ciudadanos del país gobernado por Nicolás Maduro a tal punto de hacer que al menos cuatro millones de ellos salieran de su territorio en los últimos dos años. Colombia, por tener 2.219  kilómetros de frontera con Venezuela, se ha convertido en uno de los principales receptores de los migrantes de ese país. Estas son algunas historias para entender la ola migratoria que ha puesto en jaque a América Latina.

Adiós Venezuela: La marcha de la infamia

Las carreteras de Colombia se han llenado de emigrantes venezolanos que huyen de la tragedia de su país. SEMANA acompañó a varios de ellos en este inhumano recorrido en el que con niños padecen hambre, sed, insultos y temperaturas de cero grados. Decir adiós a Venezuela significa emprender una travesía infame de 195 kilómetros a pie, un recorrido al que se lanzan diariamente cientos de venezolanos de bajos recursos que huyen del hambre que allá ya no da tregua.

Se cree que unos 500 todos los días se enfrentan a esta caminata que entre Cúcuta y Bucaramanga puede durar entre seis y siete días. Muchos tienen su destino final en Bogotá, otros en Perú o Ecuador. Algunos no saben ni para dónde van. El bus nunca es una opción porque los pasajes les resultan demasiado costosos. Algunos conductores les cobran más de lo normal por ser ilegales o se abstienen de recogerlos para no tener problemas con la Policía. Esta institución y Migración Colombia les advierten a los transportadores que llevar venezolanos indocumentados les puede generar sanciones. Entonces solo queda caminar.

La historia de los payasos que huyen de Venezuela

Corilino y Remedios no aguantaron más la dura situación en Barquisimeto y se lanzaron a una travesía a pie desde Cúcuta hasta Bogotá. Crónica de un viaje inhumano en el que hubo tanto alegría como dolor. En agosto de 2018, los payasos, arrastrados por la situación, decidieron empacar e irse. Corilino dejó a su esposa, a sus tres niños y a su mamá. Ellos lo acompañaron hasta el terminal de transporte, allá lloraron y se echaron la bendición. Remedios nunca pensó en seprarase de sus seres queridos. Pero ahí estaba también, dándose un abrazo de despedida con su mamá, una mujer de 74 años de edad discapacitada. Kelvin era quien veía por ella y por sus dos pequeños y su mujer. La incertidumbre era enorme. Nada garantizaba que les fuera bien y que en Colombia consiguieran un empleo. Esta es la historia de un acto de risa y llanto.

La soledad de dar a luz siendo migrante

Ángela y su expareja habían venido a Colombia porque la situación se había puesto tan difícil que no les alcanzaba para alimentar bien a su primer hijo, quien en ese momento tenía 6 meses de nacido. Como otras familias, cruzaron la frontera en la madrugada, dieron dinero en diferentes alcabalas (guardias venezolanos) y fueron víctimas de grupos armados que les quitaron sus pertenencias: una tablet, una plancha de cabello, entre otras cosas. Esta es la historia de una mujer de 24 años que enfrenta más allá de la frontera la soledad de ser una madre migrante.

Ocho venezolanos cuentan qué esperan de Colombia, su nuevo país

A la Terminal de Transportes de Salitre en Bogotá llegan diariamente cientos de venezolanos desde distintos puntos, sobre los que no hay datos. Aunque la crisis es la misma, cada migrante tiene motivaciones particulares. Trato digno, trabajo y solidaridad son algunas peticiones de quienes ingresan a terreno colombiano. Le presentamos ocho historias en las que la necesidad fue más fuerte que el miedo. Ocho nuevas vidas con sueños, temores e incertidumbre fuera de su patria.

9 datos de la migración venezolana que revela el Conpes del gobierno Duque

El gobierno publicó el documento Conpes que establece los lineamientos para atender ese fenómeno, así como los compromisos financieros y de atención humanitaria por parte de cada una de las entidades del Estado. El presidente Iván Duque lo presentó durante su taller Construyendo País en Cúcuta. El documento, contempla recursos por 422.000 millones de pesos de aquí a 2021 y la articulación de más de 15 entidades del Estado para atender la problemática. Principalmente va orientado a la atención de venezolanos en áreas críticas como salud, educación, primera infancia, infancia, adolescencia y juventud, agua y alojamiento, inclusión laboral, convivencia y prevención de la xenofobia.

A 400 kilómetros de Venezuela, Bogotá se convirtió en frontera 

En cuestión de un año, Bogotá, a 400 kilómetros de Venezuela, se convirtió en el mayor receptor de migrantes de ese país en Colombia. Tiene casi 90.000 más que Norte de Santander, el departamento fronterizo con más flujo migratorio del vecino país. La presencia en un parque del sector de El Salitre de 300 venezolanos, que después de cuatro meses serán trasladados a un campamento humanitario, plantea la pregunta de si Colombia está preparada para responder a la crisis migratoria.

Los hijos del éxodo

El miedo a perder el bebé o dar a luz en condiciones inapropiadas se ha convertido en uno de los temores de muchas madres venezolanas. Por eso no son pocas las que prefieren cruzar la frontera para llegar a destinos más seguros. Pero el camino no es fácil. Se tienen que enfrentar a retos como ser asaltadas, dormir en la calle, pedir limosna y pasar hambre. Sin embargo, muchas se atreven a embarcarse a esa aventura pues quedarse o no en Venezuela se les ha convertido en una cuestión de vida o muerte. El mismo Ministerio del Poder Popular para la Salud de Venezuela reconoce que la mortalidad infantil aumentó 30,12 por ciento desde 2016 con 11.466 fallecimientos de niños de 0 a 1 año, y la mortalidad materna se disparó en 65 por ciento.

Detrás de esta migración está la crisis sanitaria del país vecino, el reto de cruzar la frontera, los posibles casos de apatridia, la ayuda humanitaria y la sobrevivencia. SEMANA presenta historias de mujeres que encarnan el drama de ser madres en medio del éxodo venezolano.

Los niños: la cara más difícil de la crisis venezolana

Dentro de la crisis humanitaria desatada por la llegada de venezolanos, los niños son los más vulnerables y el rostro más triste de esta tragedia. Los más jóvenes se enfrentan a problemas de nutrición y salud, mientras que los adolescentes están en peligro de caer en abusos, en manos de grupos ilegales o en la prostitución. La situación en el vecino país es preocupante. En 2017, Cáritas Venezuela llegó a atender el doble de niños con desnutrición que en el 2016, según la organización social de la iglesia católica, en ese año, 8 de cada 100 menores que llegaban a sus jornadas de actividades tenían desnutrición grave, pero la cifra fue en aumento y en el cierre del año pasado alcanzó el 15,6%, dos veces más que en el año anterior.

Los rostros de la tragedia de la diáspora venezolana

Detrás de las monumentales dimensiones de esta crisis migratoria, miles de seres humanos viven historias desgarradoras que los hicieron abandonar su patria. Semana le cuenta en este especial algunas de ellas.

El hambre, el peor azote de las cárceles venezolanas

Si bien se ha vuelto común que presos venezolanos coman gatos y perros, este año el mundo descubrió una nueva realidad: reclusos alimentándose con ratas. Como en las calles del país sudamericano, detrás de los barrotes también se está pasando hambre. Reclusos de varios calabozos e internados han realizado huelgas de hambre en lo que va del 2018, para exigir derechos como el de la alimentación, que aseguran, les están siendo vulnerados.