Foros Semana
En 2030 toda la población colombiana tendrá acceso a agua potable
El acceso al agua potable es un derecho universal y hace parte de la agenda de sostenibilidad planteada en los ODS. ¿Cómo avanza Colombia para garantizar este líquido en todo el territorio? Expertos lo analizaron en el foro ‘Agua y saneamiento’.
El cierre de la brecha social para el acceso al agua potable en Colombia se sigue reduciendo con los años. Según cifras del Dane, el país cuenta con una cobertura de 92,3 por ciento en acueducto y alcantarillado, y de 89 por ciento en saneamiento básico. Sin embargo, hay que seguir uniendo esfuerzos para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) fijados para 2030 en este aspecto, especialmente en las áreas rurales.
Juan Pablo Serrano, director de Programas del Ministerio de Vivienda, aseguró durante el encuentro –organizado por Foros Semana, el Acueducto Metropolitano de Bucaramanga e Idrica– que en el reporte de ODS 2020 para acueducto y alcantarillado, el país fue calificado con 98,1 por ciento en el indicador de zona urbana con acceso agua potable, y con 76,2 por ciento en la zona rural. “Aumentamos unos cuantos puntos respecto a 2019 y seguimos trabajando en esa última milla”. Programas como Agua al Campo, con el cual se busca brindar nuevos accesos a las zonas más apartadas del país, serán claves para alcanzar este objetivo.
El presidente Iván Duque anunció que la meta del Gobierno es garantizar el acceso al agua potable a más de 3 millones de personas al 7 de agosto de 2022, y así plantear una hoja de ruta que permita, para 2030, cobertura universal en todo el territorio.
Desde el Acueducto Metropolitano de Bucaramanga son enfáticos en que no se puede hablar de acceso universal a este recurso si no hay una adecuada conservación de las fuentes hídricas. Hernán Clavijo, gerente de esta entidad, detalló además las tecnologías que vienen implementado para ser más eficientes en términos financieros, en la dosificación de los insumos de la potabilización y en el consumo de la energía.
“Tenemos un sistema SCADA que nos permite controlar presiones en toda la red interconectada del Acueducto Metropolitano, hacemos uso de redes neuronales para dosificación de insumos en el proceso de potabilización. Tenemos herramientas de inteligencia de negocio para ver comportamientos atípicos en la facturación y el consumo de los hogares”, señaló Clavijo.
Además, agregó que crearon el Centro de Investigación del Agua, con el cual buscan hacer experimentos y articularse con la academia para analizar esas innovaciones que se pueden desarrollar buscando mejorar la prestación del servicio y poder contar con los recursos para alcanzar esa última milla, la más difícil.
Desde Idrica, empresa pionera en la transformación digital del sector del agua, que ofrece servicios especializados y soluciones tecnológicas en gestión unificada del ciclo integral, precisan que la tecnología es fundamental para hacer control, evitar fugas y así proteger este recurso. Chema Debot, director mundial de Desarrollo de Negocio de la compañía, señaló que esta tecnología debe ir acompañada de una conciencia ambiental. Además, advirtió la urgencia que hay en el mundo de seguir generando políticas que exijan a las industrias reutilizar el agua que usan en sus procesos.
Desde la academia, Brigitte Baptiste, rectora de la Universidad Ean, mostró su preocupación por el divorcio que existe entre la ciudadanía y los ríos. Advirtió que no se ha podido actuar consistentemente en términos de su aprovechamiento como ecosistema. “Pese a las inversiones en Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales, nuestros ríos siguen contaminados por temas como la minería ilegal y los desechos que son arrojados”. Por lo cual, hizo un llamado a la necesidad de implementar una educación transformadora en el nivel profesional. “Que todos nuestros profesionales tengan clara conciencia del reto o la vulnerabilidad para su futuro y el de las próximas generaciones”, concluyó Baptiste.