NACIÓN
A bala, así recibió un hombre a seis fleteros que intentaron robarlo en Bogotá
Las autoridades tratan de dar con el paradero de los responsables de este nuevo caso de inseguridad en la capital del país.
Los casos de inseguridad en Bogotá no dan tregua. En un hecho ocurrido este lunes, seis delincuentes a bordo de tres motos vieron frustrada su intención de hurtar una alta suma de dinero a dos personas que se movilizaban en un carro particular en el sector de Morato, noroccidente de Bogotá.
Según se estableció, las dos personas habían retirado al menos 6 millones de pesos en un cajero ubicado en el centro comercial Bulevar Niza.
Inmediatamente los delincuentes armaron el plan y empezaron a seguir a estas dos personas pero, cuando los interceptaron en sus motos, fueron atacados a bala por uno de los ocupantes del vehículo, por lo que a los fleteros no les quedó otra alternativa que huir sin el botín.
En medio de este intento de hurto, uno de los presuntos delincuentes resultó herido y gracias a las pesquisas de la Policía Nacional lo ubicaron en el hospital de Suba donde finalmente fue capturado. Entre tanto, sus cómplices son buscados por las autoridades.
Tendencias
En días pasados, SEMANA obtuvo acceso a los informes de la Policía de Bogotá sobre el número de personas que quedan en libertad luego de ser capturadas bajo orden judicial, revelando una realidad que hace que juegue en contra de los investigadores que han trabajado en estos casos.
En los documentos a los que tuvo acceso SEMANA se pudo observar que de 26.703 capturados el año pasado por orden judiciales, 21.664 quedaron en libertad, es decir, un 81 % de los detenidos salieron rápidamente a las calles.
De las 26.703 capturas, 8.078 fueron por hurto a personas y los jueces de la república consideraron que no representaban un peligro para la sociedad, por lo cual ordenaron que fueran dejadas en libertad.
Esta radiografía se dio en el marco de los esfuerzos de la Policía de Bogotá por golpear a las estructuras de crimen urbano organizado, permitiendo crear un grupo élite de investigadores, que están a cargo de esclarecer estos casos de alto impacto que han golpeado a la ciudad.
Los investigadores son los mismos que en su momento en Medellín le dieron golpes a la nueva generación de narcotraficantes como alias Tom, alias Pichi, Soto, entre otros, quienes venían aplicando estrategias del pasado para mover todo el negocio del tráfico de drogas en la capital de Antioquia.
Dentro del análisis de crimen en Bogotá, las autoridades evidenciaron una situación que se puede convertir en una bomba de tiempo: la alianza entre bandas criminales de colombianos y venezolanos.
Por el momento no se conoce de vendettas entre ellos, pero sí de colaboración para cometer delitos. Sin embargo, según expertos en seguridad urbana, esta clase de sociedades tarde o temprano se rompen y comienza una guerra de muerte por ajustes de cuentas.
Por esta situación, la Policía de Bogotá busca este año sacar de circulación 193 estructuras dedicadas a toda clase de delitos, homicidios, hurtos, extorsiones, microtráfico, entre otras. Para este primer semestre la meta es desarticular 117 estructuras que ya se encuentran completamente identificadas.
El análisis del crimen en la ciudad por parte de la Policía Metropolitana se expandió tras los recientes crímenes por encargo que ocurrieron en Bogotá, que prendieron las alarmas de ciudadanos y autoridades, sobre qué era lo que estaba sucediendo o si se estaba repitiendo la historia de los años 80 y 90, cuando la guerra entre criminales hizo famosas las oficinas de sicariato en ciudades como Cali y Medellín.