A juicio guardianes del Inpec por “noche de terror” en La Modelo

Un motín, en marzo de 2020, provocado por los detenidos de la cárcel La Modelo de Bogotá, dejó un saldo de 23 personas muertas. La Fiscalía investigó y estableció de qué forma los guardianes del Inpec atendieron la emergencia, que en un principio estuvo fuera de control, pero mientras se normalizó la situación, horas después, incurrieron en actos de tortura contra los internos del penal. El fiscal del caso presentó el escrito de acusación para llevar a juicio a los tres funcionarios del Inpec.

El material probatorio recaudado por la Fiscalía indica que los tres guardianes del Inpec que enfrentarán un juicio por los delitos los tortura y lesiones personales agravadas, usaron su cargo para intimidar, amenazar y maltratar a los detenidos de la cárcel La Modelo.

“El dragoneante Julián Alberto Piñeros Gómez sería responsable de dos eventos. En uno, al parecer, golpeó y esposó desnudo a un privado de la libertad señalado de participar en la manifestación carcelaria. Posteriormente, lo habría sometido en cuclillas durante varias horas y lesionó con un arma cortopunzante”, dijo la Fiscalía.

La Fiscalía presentó en las audiencias preliminares el material probatorio para demostrar la responsabilidad que tendrían los guardianes del Inpec, en las presuntas torturas infligidas en contra de los detenidos, que aparentemente habrían participado del motín. Son imágenes de cámaras de seguridad en las que se observa cómo los internos transitan por ciertos espacios, desnudos, algunos con heridas de gravedad.

“De otra parte, los dragoneantes Víctor Alfonso Cervera Piratova y Jefferson Fabián Hueso Escárraga, presuntamente, atacaron con la tonfa o bastón de mando a dos privados de la libertad que estaban en el Hospital La Misericordia, a donde fueron remitidos para ser atendidos por heridas de arma de fuego que sufrieron durante el motín”, señaló la directora.

El fiscal del caso aseguró que los guardianes torturaron y “recomendaron” a otros funcionarios del Inpec, los internos que fueron identificados como los responsables del motín.

La Fiscalía aseguró que esa “recomendación” ocurrió una vez los internos regresaban a la cárcel después de recibir atención médica y básicamente consistía en aplicar gas pimienta a los detenidos y bañarlos con agua fría, sin la posibilidad de secarse antes de pasar a las celdas a dormir.

“Varios garrotazos con una tonfa o bastón de mando mientras estos, es decir las víctimas, se hallaban esposadas a una camilla en el Hospital Universitario de la Samaritana, esta acción se repitió en contra de ellos, es decir contra las víctimas, en el parqueadero del centro hospitalario y posteriormente por extensión en horas de la tarde al ingresar a la sección de primarias del establecimiento carcelario de mediana seguridad de Bogotá La Modelo”, dijo el fiscal en la imputación de cargos.

Los hechos investigados por el ente acusador ocurren en circunstancias de modo tiempo y lugar, en tres escenarios distintos: antes del motín, después y posterior a la retoma del control de la cárcel Modelo en Bogotá. En cada uno de estos espacios, según la Fiscalía, es que ocurren los actos de tortura en contra de los internos.

“De esta investigación se han detectado tres momentos principales de los cuales se generaron esas agresiones y abusos. El primero es durante el proceso de retoma por parte del cuerpo de custodia y vigilancia del Inpec mediante el empleo de golpes y desnudez forzada a los algunos de los privados de la libertad”, señaló el fiscal del caso.

Con el llamado a juicio la Fiscalía espera, ante un juez de conocimiento, obtener una condena en contra de los tres funcionarios del Inpec procesados. La defensa aseguró que no hubo hechos de tortura, la situación recae sobre el momento y un contexto de los hechos que la Fiscalía desconoce. Era necesario retomar el control de la cárcel y para ello fue necesario tomar las medidas de seguridad pertinentes, dice la defensa.