OPERATIVO

A Ultranza Py, el último operativo liderado por Marcelo Pecci, fiscal paraguayo asesinado en Barú

En este operativo cayeron los hermanos Insfrán, pesos pesados del narcotráfico en Paraguay y se logró la incautación de vehículos, viviendas y otro tipo de artículos.

11 de mayo de 2022
Marcelo Pecci
El fiscal paraguayo Marcelo Pecci fue asesinado mientras estaba en su luna de miel en Colombia | Foto: AFP

El fiscal paraguayo Marcelo Pecci fue brutalmente asesinado mientras disfrutaba de su luna de miel en una la isla de Barú, ubicada en Cartagena, y las investigaciones siguen su curso para dar con el paradero de los responsables.

Pecci era uno de los fiscales más importantes de la justicia paraguaya y justo antes de casarse llevó a cabo uno de los operativos más grandes en contra del narcotráfico de su país, el cual le mereció el reconocimiento y una felicitación en su hoja de vida.

La operación Al Ultranza Py fue orquestada y ejecutada entre febrero y marzo de este año, logrando la captura de Miguel Ángel Insfrán, alias Tío Rico, y su hermano, José Insfrán, que hacía las veces de un pastor y que lideraba uno de los clanes más fuertes del narcotráfico en Paraguay.

La operación fue llevada a cabo por el Ministerio Público, la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) en coordinación con la DEA (Drug Enforcement Administration, por sus siglas en inglés), la Policía de la Unión Europea (Europol) y la Dirección General de Represión del Tráfico Ilícito de Drogas (DGRTID) de la policía uruguaya.

Durante el operativo se logró además la captura de al menos 25 personas, así como la realización de 12 allanamientos, en los que se decomisaron inmuebles, 20 vehículos, nueve avionetas, embarcaciones y otros bienes pertenecientes a las bandas del crimen organizado, explicó el diario La Nación de Paraguay.

En total, el operativo le significó pérdidas hasta por 250.000 millones de dólares a los narcotraficantes paraguayos.

Los bienes incautados eran utilizados por los narcotraficantes paraguayos para enviar la droga desde Colombia hacia Europa y que, además, tenía un paso clave en Paraguay.

Tras este operativo se presentaron una serie de asesinatos que fueron claves para desenmascarar a otros criminales. Uno de ellos fue la muerte de Fátima Rejala, quien trabajaba como cocinera de uno de los hermanos Insfrán, y que los mismos miembros del clan mandaron a matar por una supuesta colaboración con la policía.

Esto llevó al fiscal a desenmascarar a varios aliados de los hermanos Insfrán, entre ellos algunos supuestos religiosos colombianos, que visitaban la iglesia de José Insfrán y llegaban en aeronaves lujosas, así lo afirmó la prensa paraguaya.

Pecci participó también en varias investigaciones de peso en su país, como la que llevó a la detención con fines de extradición de un ciudadano brasileño, pero de origen libanés, Kassen Mohamad Hijazi, que era buscado por lavado de activos y que movía ingresos ilícitos por todo el mundo con una empresa fachada.

Además de estos casos, el fiscal participó en múltiples allanamientos y golpes contra el crimen organizado en Paraguay que derivaron en capturas, incautaciones y aplausos de parte de las autoridades.

Por el momento, avanzan las investigaciones para dar con el paradero de los asesinos del fiscal, mientras que el director de la policía colombiana, el general Jorge Luis Vargas, ofreció una recompensa de hasta 2.000 millones de pesos para quien brinde información que permita ubicar a los responsables del crimen del funcionario judicial.

Así mismo, indicó que “se trabajará en labores de verificación del espectro en un amplio radio de acción, cámaras y otros elementos que permitan recolectar la evidencia para llegar a los autores materiales e intelectuales del crimen”.

“Es muy importante identificar a esta persona. Le pedimos a la comunidad, eso hace parte de esta recompensa, esperamos en los próximos minutos darle a la comunidad nacional e internacional respuesta. También para que otras personas nos ayuden a ubicar a otras personas para esclarecer estos hechos”, dijo el general Jorge Vargas, al referirse a la primera imagen que fue publicada sobre uno de los presuntos implicados en el crimen del fiscal.