Agente de tránsito fue arrastrado por un conductor con su vehículo tras negarse a mostrar los documentos; todo quedó en video

En la mañana del martes, 17 de septiembre, un agente de tránsito del municipio de Rionegro, Antioquia, vivió momentos de pánico y peligro al ser arrastrado por un conductor con su vehículo, en las inmediaciones del aeropuerto José María Córdova. Este lamentable incidente pone de relieve los riesgos que enfrentan los funcionarios encargados de regular el tráfico y garantizar la seguridad en las vías.

Los hechos ocurrieron alrededor de las 8:00 de la mañana, cuando el agente, cuya identidad no ha sido revelada, solicitó los documentos del automóvil a un conductor, identificado como Anderson David Suárez Salazar, de 33 años.

Sin embargo, en un giro inesperado, el conductor encendió el motor y, en lugar de cumplir con la solicitud, arrastró al agente, quien, en un intento por protegerse, se sujetó del capó del automóvil.

Un video publicado por un aficionado captó la escalofriante escena, donde se puede ver a otros conductores instando y pitándole al conductor involucrado para que se detuviera.

Lo cierto es que esta falta de consideración por parte del conductor hacia un servidor público que solo cumplía con su deber es alarmante y refleja una creciente preocupación por la seguridad de los agentes de tránsito.

Por su parte, las autoridades locales informaron que Anderson Suárez se encuentra bajo custodia de la Policía, enfrentando cargos por violencia contra un servidor público. Mientras tanto, el agente de tránsito no resultó herido de gravedad, por lo que recibió atención médica posteriormente.

Este tipo de incidentes no son aislados y resaltan la necesidad de tomar medidas para proteger a los agentes de tránsito y garantizar que puedan realizar su trabajo sin temor a represalias o agresiones. Por lo tanto, estas son algunas recomendaciones que podrían ayudar a prevenir situaciones similares en el futuro:

• Capacitación continua: Implementar programas de capacitación que enseñen a los agentes a manejar situaciones de alto riesgo, incluidas técnicas de desescalada y control de conflictos.
• Protocolos de actuación: Establecer protocolos claros sobre cómo proceder en caso de resistencia por parte de los conductores, asegurando que los agentes tengan una guía sobre cuándo y cómo actuar.
• Uso de tecnología: Equipar a los agentes con dispositivos de grabación y comunicación que puedan ser activados en situaciones de riesgo, garantizando que tengan un registro de los incidentes y puedan pedir ayuda rápidamente.
• Aumentar la visibilidad: Colocar señales y barreras que adviertan a los conductores sobre la presencia de agentes de tránsito, lo que puede ayudar a reducir la velocidad y aumentar la precaución.
• Campañas de concientización: Realizar campañas informativas dirigidas a la comunidad para sensibilizar sobre la importancia del respeto a los servidores públicos y las consecuencias legales de agredir a un agente de tránsito.
• Refuerzo de la seguridad: Aumentar la presencia de unidades policiales en áreas de alto tráfico, especialmente donde se sabe que los agentes de tránsito llevan a cabo controles.
• Asistencia psicológica: Proporcionar apoyo psicológico a los agentes que han enfrentado situaciones de riesgo, ayudándoles a manejar el estrés y la ansiedad que puede generar el trabajo en condiciones peligrosas.
• Denunciar y proceder legalmente: Fomentar la denuncia de agresiones y asegurar que se tomen acciones legales contra quienes agreden a los agentes, fortaleciendo así la cultura de respeto hacia los servidores públicos.