NACIÓN

Algunos de los más recordados descaches que dejó 2017

Una frase mal dicha, una idea no pensada lo suficiente o simplemente un criterio políticamente incorrecto, nunca pasan desapercibidos en tiempos de redes sociales. Ni Santos ni sus ministros ni los uribistas ni los opositores se salvaron de los descaches en este año que termina.

28 de diciembre de 2017
| Foto: Fotomontaje SEMANA

No es gratuito que exista un libro de Freud que se llame El chiste y su relación con el inconsciente. Detrás de lo que la opinión pública puede juzgar como un descache se esconden temas serios. Una frase mal dicha o sacada de contexto o un criterio absurdo, lleva consigo casi siempre un tema importante de país. 

En tiempos en los que los ciudadanos de a pie tienen la oportunidad de decir lo que piensan en redes sociales –sin restricción, a veces con desmesura, también hay que decirlo-, es difícil que una metida de pata de algún personaje público pase desapercibida. Estas fueron algunas de las que más ruido hicieron en este año que termina.

¡Saúl, hermano!

El subsecretario del Senado, Saúl Cruz, denunció el 1 de junio pasado una agresión de parte de un camarógrafo de Noticias Uno. De hecho, el funcionario se subió al atril destinado para las intervenciones de los congresistas y, señalando un supuesto golpe en su rostro, se declaró víctima de los periodistas. Una decena de congresistas se solidarizaron con Cruz. “¡Esto es muy grave, presidente, esto es muy grave! Aquí tenemos que tomar posiciones y decisiones”, dijo Thania Vega, senadora del Centro Democrático.

Sin embargo, todo lo dicho por el hombre resultó siendo mentira. El noticiero obtuvo los videos del capitolio y estos dejan ver que el subsecretario es quien embiste la cámara del noticiero en dos ocasiones, es decir, se auto agredió. El chiste le salió caro a Cruz porque meses después fue sancionado por la Procuraduría con inhabilidad de ocho meses para el ejercicio del cargo.

María Fernanda Cabal “avergüenza” a los politólogos de los Andes

La representante a la Cámara María Fernanda Cabal sorprendió en noviembre pasado con una declaración que dejó boquiabierto a más de un historiador y estudioso de los orígenes de la violencia en Colombia. En el programa Partida W, que dirige Juan Pablo Barrientos, la congresista uribista dijo que la masacre de las bananeras, ocurrida en los años veinte en Colombia, era un mito histórico de la "narrativa comunista". Aunque luego Cabal matizó parte de sus afirmaciones  –otras las ratificó- no fueron pocas las reacciones que aparecieron. De hecho, 76 egresados del departamento de Ciencia Política de la Universidad de los Andes –donde también estudió la congresista- escribieron una carta en la que dijeron que lo dicho por Cabal era un “descrédito” para la profesión.

El periodista que culpó a la esposa de Ovelar por sus fotos de Instagram

La novela de Teo Gutiérrez con la esposa de Roberto Ovelar, Gladys Ortega, resultó siendo uno de los episodios más bochornosos de 2017. El pasado 15 de diciembre, el jugador paraguayo emitió un comunicado en el que aseguró que Teo le envió mensajes inapropiados a su esposa a través de Twitter. Esto precipitó, paradójicamente, la salida de Ovelar del equipo. Y no la de Teo.

Pero si aquello no era suficiente, el periodista barranquillero Abel González se refirió al tema en su programa de radio Caribe Sano. González dijo que la mujer de Ovelar era la culpable porque salía casi en ‘cuera‘ en las redes sociales. "Cualquier anciano le habría podido caer". El periodista añadió, en un tono que generó múltiples reacciones, que la forma en que Gladys Ortega manejaba sus redes sociales sería la causa de que Teo le coqueteara. A su juicio, Teo era la víctima: "Los jugadores de fútbol que viven encerrados, viven concentrados y empiezan a ver en las redes sociales unas nalgas como las de esta señora. Lógicamente que los manes pueden alborotarse. Cualquiera se alborota", dijo.

Santos y su “me acabo de enterar”

Una de las frases que marcaron este 2017 sin duda fue la que pronunció el presidente Juan Manuel Santos en marzo, cuando el escándalo de Odebrecth llegaba a su punto más agudo por cuenta de la financiación irregular de su campaña presidencial en 2010. Al primer mandatario  aún le siguen cobrando que haya dicho –así estuviera diciendo la verdad- que se acababa de enterar de que hubo recursos que no fueron registrados debidamente. Roberto Prieto, quien fuera gerente de la campaña, había confesado en Blu Radio que la multinacional brasileña había pagado unos afiches que no se reportaron en la contabilidad. "Fue una campaña irregular donde el presidente (Santos) no tuvo nada que ver”, dijo Prieto. “Me acabo de enterar” se convirtió en adelante en insumo de cualquier cantidad de memes en redes sociales e incluso se volvió una frase recurrente para hablar con ironía de algo que se sabe previamente.

Peñalosa: “en 8 años se podrá nadar en el río Bogotá”

En agosto pasado, durante el evento en el que se anunció el cierre financiero para pagar la planta de tratamiento de aguas en Canoas, el alcalde de Bogotá Enrique Peñalosa salió con una frase que aún sigue generando comentarios. "En 8 años se podrá nadar en el río Bogotá", trinó el mandatario. Ocho millones de habitantes desearían que tuviera razón, pero lo cierto es que se trató de una promesa alejada de la realidad. La planta será clave para descontaminar las aguas del río antes de salir de Soacha y seguir su curso hacia el Magdalena, pero están tan viciadas que las ranquearon en el peor nivel de contaminación posible, lo que indica que no son aptas para ninguna actividad humana. "Vamos a poder ir desde Chía hasta Soacha en canoa", dijo también el alcalde. Su exceso de confianza no es nuevo. Ya con anterioridad había sido noticia por frases como “No sería raro que pronto tuviéramos venados en los cerros y calles de Bogotá”.

El trino de Macías sobre la suspensión de las elecciones

A finales de diciembre, el senador del Centro Democrático, Ernesto Macías Tovar, levantó  polvareda con un trino que decía: “Cercanos a Santos afirman que él estaría pensando en suspender elecciones del 2018, para permitir el gobierno de transición de Timochenko”. El comentario generó reparos porque se trató de información sin ningún sustento. La teoría de suspender las elecciones presidenciales para un gobierno de transición resultó descabellado, por decirlo menos. Uno de quienes respondió al senador uribista fue el hijo del presidente Santos, Esteban, quien ironizó diciendo que, además de lo dicho por Macías, planeaban "utilizar el rayo homosexualizador contra todos los colombianos, entregarle el país al castrochavismo y de paso conquistar el mundo".

La desafortunada frase del ministro de Defensa sobre los líderes asesinados

En entrevista a Noticias Uno, el ministro de defensa, Luis Carlos Villegas, aseguró a mediados de diciembre que la mayoría de asesinatos de líderes sociales en las regiones eran producto de “un tema de linderos, de un tema de faldas, de peleas por rentas ilícitas”. Aunque Villegas después le dijo a El Tiempo que su frase había sido sacada de contexto, resultó reprochable para cientos de familiares de las víctimas que un funcionario de esa dignidad usara esas palabras para referirse a uno de los temas más preocupantes del posconflicto. El informe anual de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos alertó poco después  sobre el aumento de los ataques a activistas sociales. En 2016 la cifra llegó a 127 líderes asesinados y la mayoría de ellos murieron en zonas previamente ocupadas por las Farc. "Nos preocupa muy profundamente la violencia contra líderes, lideresas y defensores y defensoras de derechos humanos. La persistencia de esta violencia pone en riesgo el propósito común de la paz en el país", dijo Martín Santiago, coordinador residente de Naciones Unidas en Colombia.

El acto discriminatorio de Edwin Cardona

El 10 de noviembre, Colombia se enfrentaba a Corea de Sur, en un partido amistoso de trámite. Hacia el minuto 60 comenzó una bronca. Las cámaras captaron el momento en el que Cardona entró en escena. Con sus dedos, la estrella del Boca Juniors se estiró sus propios ojos hacia las esquinas, a modo de mueca. Lo hizo delante de millones de personas que veían a esa hora la televisión. El colombiano le hizo “ojitos chinos” a un rival -como dijo un comentarista argentino en la transmisión del partido-. Con el acto, Cardona les recordó a los de Corea que eran de otra raza. Esa acción, abiertamente discriminatoria y racista, le costó al jugador una sanción de cinco fechas sin poder jugar partidos amistosos, más una multa de 60 millones de pesos. Antes de que la FIFA se pronunciara, el delantero había ofrecido excusas a los jugadores de Corea.

El trino de @Caidadelatorre que indignó a los seguidores de Martín Elías

En abril de este año, el alcalde de Valledupar y miles de seguidores del cantante vallenato Martín Elías, quien falleció en un accidente de tránsito, rechazaron un tuit de @caidadelatorre en el que dijo que Colombia estaba en el séptimo círculo del infierno por llorar al hijo de Diomedes. Su nombre es María Antonia García y ya era bien conocida en Twitter por sus posturas críticas hacia el expresidente Álvaro Uribe Vélez. En su biografía se identifica como columnista de El Tiempo, periodista y PHD en Spanish Literature. Pero esa vez no fue una diatriba al uribismo lo que puso a la columnista en el foco de las críticas. Pocas horas después de la muerte del cantante vallenato, ella lanzó aquel trino que sacudió las redes. “Qué falta de todo, llorando la muerte del hijo de un asesino. Colombia está en el séptimo círculo del infierno de los valores morales”. Tiempo después, y con la cabeza más fría, García dijo en entrevista con La W que efectivamente Martín Elías no era responsable de los hechos que habría cometido Diomedes.

Puede leer: El trino de una columnista que indignó a los seguidores del recién fallecido Martín Elías

El disparatado discurso de un concejal uribista en Medellín

Santiago Jaramillo casi le hace perder la paciencia a sus compañeros en el recinto del Concejo, con una intervención de 40 minutos que poco tenía que ver con el debate agendado. Todo comenzó en medio de una sesión en el cabildo de Medellín en el que se le daba la bienvenida a la nueva secretaria de Cultura, Lina Botero. En un debate en el que supuestamente se analizaban los avances y pendientes de esa cartera, Jaramillo, del Centro Democrático, sorprendió con una intervención que parecía más un performance que una ponencia. Salido de casillas, y pasando de la furia a la risa en un estado de hilaridad no conocido, habló de amenazas, escoltas, de un bloque de búsqueda y hasta de la finca que tuvo que vender para hacer su campaña política.

Pero vendrían más intervenciones polémicas dentro de su propio partido, el Centro Democrático. Tiempo después, Jaramillo dijo en Twitter que el mayor obstáculo para la paz era un expresidente llamado Álvaro, refiriéndose a Uribe, su mentor y líder político. En entrevista con SEMANA, le pidió al mismo expresidente que fueran juntos al loquero y que se revisaran los dos. Todo esto generó que Jaramillo –el cabildante de los medellinenses, como se autodenomina- fuera expulsado de la colectividad.