Alias Nene, cerca de la extradición desde España tras más de 100 asesinatos

Las problemáticas criminales que enfrentan las autoridades como tráfico de drogas, oficinas de cobro y el uso de sicarios para ajuste de cuentas no resultan exclusivas de Colombia, ahora estos delincuentes son de tipo “exportación”. Huyen de la justicia hacia otros países, como España, en donde tratan de replicar sus métodos. Ese es el caso de Jonathan Andrés Zuluaga, alias Nene, un delincuente de alto perfil al que se le atribuyen más de 100 homicidios y que fue capturado en ese país, en donde tenía su propio aparato criminal.

Un trabajo articulado entre las autoridades investigativas y policiales de Colombia y España permitió su más reciente captura este año y, de este modo, se abrió una caja de pandora con la que se estableció la relación entre organizaciones ilegales de alta peligrosidad en Colombia como La Cordillera en Pereira y La Oficina de Armenia y grupos criminales que pretendían replicar el modelo criminal en cabeza del Nene.

A Jonathan Andrés Zuluaga Celemín, de nacionalidad colombiana, le seguían la pista desde hace dos años cuando fue capturado caminando en las calles de Leganés, muy cerca de Madrid. Agentes de la Policía se acercaron y le pidieron identificarse. Los documentos que entregó resultaron ser falsos y en su poder le encontraron más de 5.270 euros, cerca de 23 millones de pesos en efectivo.

No se trataba de una requisa de rutina ni de un colombiano de vacaciones en España, era el jefe de una peligrosa banda vinculada a varios capos del narcotráfico.

Estaba en ejecución un operativo transnacional en coordinación con la policía de España y Colombia llamado Sin Fronteras. El objetivo era Zuluaga, conocido con los alias de El Nene, Snoopy o el satanás colombiano, un hombre con una tenebrosa trayectoria delincuencial de más de 15 años, al que se le atribuyen más de un centenar de homicidios cometidos de la manera más escabrosa, varios están bajo investigación y otros ya le han generado condenas por las cuales se busca su regreso al país. Es señalado incluso de presuntamente haber asesinado a su suegra después de jurarle a su expareja una dolorosa venganza.

No es un delincuente de poca monta, es señalado como el encargado de posicionar a su grupo criminal La Cordillera como una organización bélica y jerarquizada, pero además de lograr su expansión y consolidación en Europa. Su poder llegó al punto de articular actividades de narcotráfico a gran escala en Suramérica, Panamá, Estados Unidos, México e incluso Cabo Verde.

El Nene era la cabeza de La Cordillera de Pereira y la Oficina en Armenia, y escogió Madrid como centro de operaciones. Desde allí, funcionaba la base logística de los cobros. Era la capital española el centro neurálgico con sucursales en ciudades como Zaragoza, Andalucía y Aragón. La oficina no solo asesinaba por encargo sino que también cobraba desde allí una cuota de tráfico de drogas entre varios países. Incluso, se le atribuye, según los documentos en poder de SEMANA, operar como un brazo de la ‘Oficina de Los Rastrojos’.

Sus pasos por Europa son de vieja data y había logrado burlar a la justicia en varias ocasiones. Fue detenido por primera vez en Arganda del Rey, en 2012, desde donde tenía relación con los ‘narcos puros’ como se le denomina en el Eje Cafetero a la nueva generación de narcotraficantes, quienes sacan droga hacia España. Ese año, fue extraditado a Colombia, detenido en casa por cárcel y se esfumó. No se volvió a saber de él. El escurridizo Nene volvió a ser capturado hace cuatro meses en una calle de Madrid. Su lugar de operación estaba entre el barrio Carabanchel y Leganés, a las afueras de la capital española, y contaba con el apoyo de al menos una decena de miembros de su organización criminal.

SEMANA tuvo acceso a la sentencia con la que se ampara la solicitud de extradición, de hace un mes, y que fue emitida por el Juzgado Segundo de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad de Calarcá, en Quindío, así como un explosivo documento de solicitud de circular roja de Interpol, las sentencias en su contra y todo el expediente con pruebas contra uno de los criminales que hizo parte de la lista de los más buscados del crimen transnacional.

El poder que había adquirido el Nene en España está precedido por una estela de sangre y violencia que dejó en Colombia durante sus años de criminalidad y que lo tienen al borde de la extradición. La actividad criminal de estos grupos recorrió Pereira, Cartago y otros sitios del norte del Valle y del Eje Cafetero, por lo que su extradición sería clave para esclarecer múltiples hechos de violencia en esta zona del país.

El Nene es el hermano de Óscar Eduardo Zuluaga, alias Tillo, un hombre que fue asesinado justamente en medio de enfrentamientos entre bandas de narcotráfico y al morir heredó su imperio criminal. La mayoría de delitos en la mira de la justicia ocurrieron desde el año 2002 en medio de la tensión entre los miembros del Cartel del Valle del Cauca, concretamente entre Wílber Varela (alias Jabón) y Diego Montoya (alias Don Diego) cuando se produjeron varios episodios de ajustes de cuentas.

La información que tienen las autoridades sobre el Nene da cuenta de cómo la actividad delincuencial desatada a consecuencia de las rivalidades por el narcotráfico y la adquisición de tierras, fue motivo determinante de homicidios de renombre en Pereira, entre los que se pueden destacar los de Marco Evelio González, ocurrido el 28 de junio de 2003, así como los de Jorge Enrique González y Daniel Daza, ocurridos en el bar Viejos Tiempos de la ciudad el mismo año.

También se menciona la masacre del bar Ilusiones en la que, según la sentencia de solicitud de extradición, se cobró la vida de más de cinco víctimas. Un homicidio cometido el 20 de noviembre de 2003, frente al establecimiento comercial llamado Casa de la Guadaña, hecho en el que murió Alberto González Vanegas. Aparecen otros casos como el asesinato de una ingeniera de una reconocida empresa del sector lácteo, de nombre Clara Inés Baena, y el de Orlando Peña Melchor, de quien se decía era informante de la DEA.Son más de 15 años de criminalidad del Nene entre Colombia y España, su caída ha permitido que las autoridades de los dos países identifiquen las huellas de una organización que sembró el miedo en el país y que ya tenía centro de operaciones en Madrid.

Las autoridades de los dos países están en alerta pues se trata de delincuentes y sicarios de exportación. Esta semana, se llevó a cabo una de las primeras discusiones en la Audiencia Nacional de España en la que se analiza el trámite de extradición. Si Zuluaga pide asilo, cualquier decisión se puede demorar por lo menos seis meses como pasó con la primera solicitud de alias El Zarco, quien tras una dura batalla judicial y diplomática, se logró traer a Colombia.