Alias Otoniel tiene 128 órdenes de captura en su contra

El prontuario criminal de Dairo Úsuga, alias Otoniel, es amplio y con su captura termina un ciclo de terror de un hombre dedicado al narcotráfico, reclutamiento de menores, asesinato de integrantes de la fuerza pública y líderes sociales.

Después de culminar con éxito la operación Osiris, el Gobierno del presidente Iván Duque reveló que alias Otoniel tiene en su contra 128 órdenes de captura por delitos que relacionados con el narcotráfico, homicidio y delitos de lesa humanidad. Por su vida criminal, el jefe del Clan del Golfo tiene vigentes siete sentencias condenatorias y ocho medidas de aseguramiento. También existen en su contra dos circulares rojas y una azul de Interpol y solicitud de extradición emitida por una corte de los Estados Unidos.

Justamente después de la legalización de captura de Otoniel, Estados Unidos tendrá cinco días para hacer la solicitud formal y el presidente Iván Duque manifestó que seguramente será extraditado, aunque se buscará que se conozca toda la verdad de los delitos que cometió en Colombia. “No hay ningún rincón de Colombia en donde un criminal, terrorista, violador de niños, asesino de líderes sociales y, además, perpetrador de los peores atentados y asesinatos a la policía se pueda esconder”, dijo el ministro de defensa, Diego Molano.

Otoniel era un objetivo de alto valor para el Gobierno del presidente Duque y las Fuerzas Militares estuvieron durante meses cerrándole el cerco para lograr su captura o darlo de baja. Inició su carrera criminal cuando tenía 16 años en la guerrilla del EPL y allí empezó a delinquir. Aunque se desmovilizó, cuando se adelantó el proceso con ese grupo armado, decidió continuar en la ilegalidad e ingresó a las Autodefensas Unidas de Colombia.

Aunque se adelantó un proceso de desmovilización con las AUC, Otoniel siguió delinquiendo y desde allí tomó el poder del Clan del Golfo. Desde ese momento, se convirtió en objetivo no solo para las autoridades colombianas, sino que pasó a estar en la mira del Gobierno de los Estados Unidos, que llegó a ofrecer 5 millones de dólares por información que condujera a su captura. En Colombia se ofrecía una recompensa de hasta 3.000 millones de pesos por su ubicación.

El Gobierno reveló que “en 2012, tras la muerte de ‘Giovanny’, en desarrollo de un operativo policial, Dairo Antonio Úsuga pasó a ser el máximo cabecilla del Grupo Armado Organizado (GAO), dando continuidad al clan mafioso que ante las capturas o neutralizaciones de sus cabecillas intentaron siempre recomponer sus líneas de control criminal y múltiples enlaces con carteles de droga”.

El ministro Molano felicitó a las Fuerzas Militares por la operación conjunta en la que se capturó a Otoniel y resaltó que se continuará persiguiendo a todos los que están en contra de la legalidad. “El Clan del Golfo en los últimos años sacaba un alto número de toneladas de cocaína hacia mercados de Estados Unidos y Europa y se había convertido en un articulador del negocio de microtráfico, que invadía ciudades de Antioquia, la costa Caribe y el Chocó, buscando su expansión también en otras regiones del país como Casanare y la Orinoquia”, dijo.

Además, manifestó que con esta captura se “libera al país y al mundo de un narcotráfico asesino que destruye a los jóvenes y al medio ambiente y asesina a los policías. Recalcó que la Fuerza Pública continuará, sin tregua, en la defensa de la soberanía de la libertad y tranquilidad de todos los colombianos”.

El presidente Iván Duque, en compañía de la cúpula militar y varios de sus ministros, confirmó que Otoniel fue capturado en el Cerro del Yoki, zona rural de Necoclí (Antioquia).