POLÍTICA
Aló, Duque: la apuesta del presidente en televisión
El presidente le apuesta a la televisión para comunicar en vivo sus decisiones contra la pandemia. ¿Qué impacto tiene y hasta cuándo irá esta exposición diaria en horario estelar?
La televisión es el medio de mayor audiencia en Colombia. En medio del confinamiento por el coronavirus, además, su consumo aumentó en una hora en promedio y el rating total creció 21 por ciento. Los noticieros y las telenovelas, según los estudios de Kantar Ibope Media, mandan la parada de lo que miran las personas en sus hogares.
Bajo ese contexto, el presidente Iván Duque acondicionó un set en el salón Bolívar, de la Casa de Nariño, para transmitir su programa Prevención y acción, al que se enlazan los canales públicos y privados. De lunes a viernes, de 6:00 a 7:00 p. m., el presidente lidera ese segmento, que va a cumplir dos meses al aire el 12 de mayo.
Prevención y acción se convirtió en la punta de lanza de la estrategia de Duque para comunicar sus decisiones contra la pandemia. El volumen de decretos diarios que expide el Gobierno y la información de todos los ministerios es tan grande que la tarea de hacer pedagogía se convirtió en un reto monumental.
El formato está construido a imagen y semejanza de un programa periodístico de opinión, en el cual un moderador, en este caso Duque, da la bienvenida, realiza el balance del día y anuncia las medidas más urgentes. En esa labor puede tardar 15 minutos. Luego presenta a sus invitados, les formula preguntas y les da la palabra para alimentar la conversación. Además, como un presentador, da paso a notas que reflejan principalmente el trabajo en las regiones.
Con este esquema reemplazó prácticamente las alocuciones presidenciales, el método más usado en el pasado, que perdió fuerza desde que el Estatuto de la Oposición, aprobado en 2019, estableció la réplica en igualdad de condiciones para que los opositores en el Congreso le respondieran al presidente. Para evitar que esa respuesta tuviera un efecto mayor al del mensaje del Gobierno, las alocuciones pasaron a un segundo plano.
Los ministros, la vicepresidenta, los principales funcionarios, expertos epidemiólogos y delegados de la Organización Mundial de la Salud han pasado por Prevención y acción en varias oportunidades. En los últimos días, para darle mayor dinamismo e impedir el desgaste del programa, Duque les viene dando juego a alcaldes y gobernadores que, atraídos por dialogar en vivo con el presidente, hacen lobby para que los invite. Esta semana, entre otros, tuvo a los gobernadores de Santander, Córdoba, Antioquia y Valle.
¿Hasta cuándo permanecerá Duque en el prime time de la televisión colombiana? ¿Habrá un límite para evitar el desgaste y la sobreexposición? Apenas llegó al Gobierno, a Duque lo criticaron por su falta de carisma y por plantear un discurso más racional, lleno de cifras y argumentos, alejado de las emociones. Los uribistas más radicales decían que sus talleres Construyendo País no tenían el impacto de los consejos comunitarios de Álvaro Uribe.
Ómar Rincón, reconocido analista de televisión, destaca que desde el punto de vista técnico el programa está bien montado y tiene orden gracias a un libreto. Sin embargo, afirma que al durar una hora puede resultar denso para el ciudadano de a pie y cuestiona que tantos invitados terminen por impedir la eficacia de los mensajes verdaderamente importantes.
“Hay unos fragmentos concretos que son noticiosos y los recogen en los noticieros y así se logra el impacto esperado. Por eso mi pregunta es si se requiere de una toda una hora para comunicar de forma eficaz, podría ser más concreto”, asegura Rincón.
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Pero todo indica que, en medio de la atención de la pandemia, Duque empieza a sacudirse. La aprobación a su gestión apenas rondaba el 23 por ciento y ahora es de 52, un crecimiento de 29 puntos porcentuales. Entre otras razones, allí aparece el resultado de las medidas que ha tomado para enfrentar el coronavirus y también un viraje e innovación en su estilo comunicativo. A imagen y semejanza de lo que hicieron antagonistas como Uribe con sus consejos comunitarios o Chávez en su Aló, presidente, la televisión produce resultados. Esta nueva forma de comunicación, permanente, pedagógica y directa, le ha servido al presidente en momentos en que la gente tiene miedo y necesita información. Habrá que ver si ese formato se agota con el tiempo.