Andrés Santamaría Garrido | Foto: Julio César Durán

ENTREVISTA

“Hay que desbogotanizar la plata para la paz”

Andrés Santamaría, presidente de la Federación Nacional de Personeros, no se explica cómo las regiones más afectadas por el conflicto son las que menos recursos tienen.

4 de diciembre de 2015

No es la primera vez que los personeros del país se lamentan por la falta de recursos. Desde el 2011, insisten en que no tienen las condiciones suficientes para trabajar, con un agravante: la ley de víctimas, quizás la primera en ambientar un proceso de paz y reconciliación, les delegó muchas responsabilidades, las cuales, desbordaron sus capacidades.

Así lo dice Andrés Santamaría, presidente de la Federación de Personeros. Desde Cartagena, donde se adelanta la VII Asamblea Nacional, dice que en las regiones más afectadas por el conflicto los recursos no llegan y pide al Gobierno descentralizar los recursos para “poder trabajar” en una etapa de postconflicto. Semana.com habló con él.

Semana.com.: Personero, ¿cómo es eso de que la aplicación de la Ley de víctimas desbordó el trabajo de las personerías?

Andrés Santamaría.:
Así es. La expedición de la ley de víctimas fue un gran logro del gobierno, pero su aplicación la han mantenido los personeros. Ellos son los que la están sacando adelante. El  80 % de las víctimas son atendidas y orientadas a través de las personerías municipales. Y desde que entró en vigencia la ley seguimos trabajando con los mismos recursos, que antes de la ley eran precarios. Trabajamos con las uñas, y sin capacitación

Semana.com.: además de recursos, ¿qué otras debilidades tienen las personerías?

A. S.:
La ley dice que debe haber un psicólogo acompañando el proceso con las víctimas, y en las personerías no lo hay. El personero es un abogado, y nunca fue entrenado para atenderlas. La ley dijeron  que tenían que recibir las declaraciones pero nadie se dio a la tarea de prepararlos, de darles herramientas sobre cómo atenderlos. Y así estamos trabajando.

Semana.com.: ¿el Estado los abandonó?

A. S.:
Pues es triste que, si contrastamos el trabajo de los personeros con el de otras instituciones que también tienen responsabilidad en atención y acompañamiento a las víctimas, las personerías fueron las únicas que no recibieron recursos.

Semana.com.: ¿Cómo explicar la falta de apoyo estatal?

A. S.:
Las personerías son el fiel reflejo de la mentalidad capitalina como se maneja Colombia. Somos un país muy centralista.  Queremos crecer de lo nacional a lo local y nunca de lo local a lo nacional. Pasa que primero mejoramos  la institucionalidad nacional y luego, si de pronto queda algo, se mira a las regiones.

Semana.com.: ¿Qué está pasando en las regiones?

A. S.:
Hoy vemos los territorios sin justicia, sin atención  adecuada por parte del Estado, sin salud. Es un país que se ha desarrollado de forma contraria. Nosotros le hemos apostado al proceso de paz porque creemos en las consecuencias de las reformas y los cambios que va a haber. Aplicando lo que ha dicho el Presidente de la República sobre la paz territorial, es cambiar esa línea de lo nacional a lo local.

Semana.com.: ¿Han gestionado financiación?

A. S.:
Nosotros presentamos un proyecto de ley hace un año o dos años. Se buscaba hacer unos cambios para conseguir que los recursos que se asignan a través de los municipios a las personerías se aumentaran. Pero nos dijeron – “No hay plata”. Mientras tanto salieron dos leyes, por ejemplo una reforma a la Fiscalía, para la cual sí hubo recursos y mejoras salariales.

Semana.com.: ¿En cuáles departamentos las personerías requieren mayor inversión?

A. S.:
Este es un país curioso. Entre más pobre se, mayor abandono institucional.  Igual pasa con las personerías. Entre más pobre es el departamento y donde mayor presencia del conflicto armado existe, hay menos recursos.

Semana.com.: Entonces, ¿cómo se financian los personeros?

A. S.:
Cooperación internacional, Estados Unidos inicialmente, y ahora el gobierno de Suecia. Ellos han dado los recursos para asistencia técnica. Con ese apoyo se han comprado computadores y sillas. Es que ni hasta eso tenían algunas personerías.

Semana.com.: De tener en frente al presidente Santos, y desde su experiencia en las regiones, ¿qué le recomienda para un escenario de posconflicto?

A. S.:
Yo veo una preocupación excesiva de crear más instituciones. Me parece equivocado, utilicen las que ya están. Que se hagan mejoras, pero no más burocracia. Pero sobre todo, la gente quiere más estado en lo local: más puestos de salud, fiscalías, más ICBF. En Bogotá piensan que en las regiones se roban la plata y que entonces todo debe manejarse desde Bogotá. Todo un mal pensamiento. Hay que desbogotanizar los recursos para la paz.