ENTREVISTA
“La sociedad sí necesita que las FARC pidan perdón”
Ángela Giraldo, familiar de uno de los diputados del Valle asesinados y quien fue a La Habana, dice que las FARC están comprometidas con el proceso.
Ángela Giraldo, una de las 12 personas que viajaron en el primer grupo a La Habana en calidad de víctima, está convencida de que el proceso con las FARC debe continuar. Tras el encuentro con los negociadores de esa guerrilla, ella les hizo varias exigencias: que digan en dónde están los desaparecidos, que liberen los secuestrados y que señalen dónde están las minas antipersona.
La hermana del diputado del Valle Francisco Javier Giraldo, secuestrado y posteriormente asesinado por las FARC en el 2007 junto con 10 compañeros más, aseguró que es hora de pasar la página. Semana.com habló con ella.
Semana.com: ¿Qué le dijeron a las FARC en La Habana?
Ángela Giraldo: Cada una de las víctimas hizo la presentación de sus historias, de su drama. El énfasis fue sensibilizar frente al dolor que ha ocasionado la guerra en Colombia. La solicitud fue que los actores armados reconozcan sus víctimas y se comprometan con la no repetición de estos hechos atroces.
Semana.com: Y en su caso particular, ¿usted qué les dijo a las FARC?
A. G.: Mi llamado fue que no se fueran a levantar de la mesa de diálogo hasta que llegaran a un acuerdo y de que ellos asumieran con Colombia un compromiso de no repetición y le pidieran perdón a la sociedad colombiana en su conjunto. La sociedad está agredida por esta ola de violencia que ha desencadenado el conflicto colombiano. Yo tomé la decisión de perdonarlos como algo muy mío porque no quiero vivir con odios ni rencores. Esta es una decisión personal, pero la sociedad colombiana sí necesita que las FARC pidan perdón por todos los hechos atroces que han cometido.
Semana.com: ¿Y a usted le pidieron perdón por la muerte de su hermano?
A. G.: Yo les dije a ellos que yo ya los había perdonado. El objetivo de la misión no era que hubiera un proceso de verdad y de perdón. Esa comisión será posterior a todos los acuerdos que hagan para la paz. Yo no iba con ese fin aunque Pablo Catatumbo se me acercó y me reconoció como víctima, agradeció que les hubiera hablado con sinceridad y dijo que esos hechos no se debieron haber cometido en contra de los diputados. Yo le dije que esperaba que lo que él decía fuera honesto.
Semana.com: Como víctima, ¿qué espera de los diálogos con las FARC?
A. G.: Todas las víctimas, a pesar de que no nos pusimos de acuerdo y de que somos distintas, coincidimos en que todos tenemos un espíritu de reconciliación y perdón. Esto a pesar de los hechos tan violentos que ha habido. Deben entregar las armas y cesar esta ola de violencia.
Semana.com: Luego de la visita, ¿cree que hay futuro en este proceso de paz?
A. G.: Sí. Yo creo que el proceso es serio. La visita de las víctimas fue importante y ellos (FARC) están comprometidos sinceramente con el proceso. Pienso que es serio y que todos estamos en el límite. Ningún colombiano quiere que este conflicto siga. Se está avanzando de manera coordinada, planeada y estratégica en los puntos de acuerdos. El proceso se está manejando de una manera seria y comprometida por la mesa de diálogo y los observadores.
Semana.com: Finalmente, ¿cree que las 60 víctimas que van a La Habana representan a los 6,7 millones?
A. G.: El dolor de una persona no se puede delegar en otra. Yo no fui en representación de los familiares diputados del Valle, ni siquiera en representación de mi familia, lo hice en representación propia, era mi dolor el que estaba exponiendo. Es difícil que los seis millones de colombianos puedan viajar a Cuba. Este drama de la guerra en Colombia nos identifica a todos y nos unifica como víctimas. La función de las víctimas es que por nuestra vivencia y nuestro dolor hay que tener un acto de grandeza con el país y cerrar este capítulo y construir otros espacios para las próximas generaciones.
Semana.com ¿Qué piensa de los trinos de la representante Cabal?
A. G.: Fue una irresponsabilidad de la representante María Fernanda Cabal y espero que pida perdón que se disculpe por el hecho porque para nada es solidario con la situación de las víctimas del conflicto. (…) Yo los perdono (FARC), pero otra cosa distinta es que yo quiera ser amiga de ellos. Eso no significa que ahora yo vaya a ser la mejor amiga de las FARC.