AMBIENTE
Anla encontró incumplimientos de licencia ambiental en vía de Santander donde se han talado 5.000 árboles
Los ciudadanos temen por los riesgos ambientales que pueda producir la carretera 4G que se está construyendo en Floridablanca, por la tala de miles de árboles. La Anla le ordenó a la concesionaria tomar medidas.
Una avalancha de lodo dejó damnificadas a 140 familias del municipio de Floridablanca en Santander el pasado 28 de enero. No hubo víctimas mortales, solo daños materiales. Sin embargo, una hipótesis empezó a tomar fuerza: se podría estar dando un represamiento de troncos en las cuencas hídricas por los 5.600 árboles que se han talado en la construcción de la Conectante C1 C2, una carretera 4G que pretende empalmar con la actual vía Bucaramanga-Pamplona en el kilómetro 8,5, con la promesa de sacar el tráfico pesado de la ciudad. Sin embargo, tanto la Alcaldía como Gestión del Riesgo encontraron causas diferentes para la avalancha, dando un parte de tranquilidad. Sin embargo, tras la avalancha, la comunidad se empezó a preocupar aún más por las consecuencias ambientales que puede tener la carretera, que contempla la tala de 14.000 árboles en una de las zonas de mayor sensibilidad ambiental del Área Metropolitana de Bucaramanga.
La concesión vial Autovía Bucaramanga Pamplona, encargada de la construcción de la conectante, cuenta con los documentos en regla. La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) otorgó la licencia ambiental en marzo de 2019.
Sin embargo, se han denunciado inconsistencias. El representante a la Cámara por Santander, Fabián Díaz (Verde), solicitó a la Anla iniciar una acción preventiva y realizar visitas técnicas al proyecto. SEMANA conoció el resultado del seguimiento. Allí la Anla encontró varios incumplimientos y le ordenó a la concesionaria arreglarlas en un tiempo máximo de tres meses, so pena de iniciar un proceso sancionatorio. La consesionaria aseguró que el proyecto está "trabajando para atender" los 13 requerimientos que hizo la Anla, "según compromisos establecidos".
Así las cosas, Autovía debe retirar la totalidad de residuos vegetales localizados en las zonas intervenidas e informar sobre la administración que le dan, así como dar un reporte detallado, con registro fotográfico, de los sitios de disposición final. Tienen que presentar la información documental de los procesos de ahuyentamiento y rescate de la fauna silvestre, los cerros son un protector de la vida silvestre, hay especies como osos perezosos de dos y tres dedos, armadillos y tinajos. Y uno de los puntos más importantes, deben dar evidencia documental de la identificación de dos puntos de afloramiento de agua ubicados en la Hacienda Casablanca.
Tal como los habitantes de la zona reclamaban, la Anla le ordenó a Autovía atender todas las quejas de la comunidad aledaña por la presunta afectación de sus viviendas y posibles efectos del material particulado. Una de las cosas más importantes, tienen que “implementar las medidas que garanticen la mitigación de efectos adicionales de socavación aguas abajo, por efecto de las obras de ocupación del cauce”.
El alcalde de Floridablanca, Miguel Ángel Moreno, antes de conocer los resultados de la visita técnica, le pidió a la Anla un informe frente a las solicitudes de las comunidades aledañas. “¿Dónde se va a hacer el proceso de reposición forestal?, aún no conocemos toda la estructura del plan de manejo ambiental, lo solicitamos ese día que vinieron a hacer la revisión”, aseguró el alcalde. Aunque el mayor impacto lo reciben los florideños pocos conocen en qué consiste la obra, por eso, lo que están solicitando es una nueva socialización dentro del municipio. Autovía ha registrado al menos seis jornadas informativas en abril de 2017 y una audiencia pública ambiental ordenada por la Anla en 2018. Sin embargo, ahora deberán hacerla en Floridablanca con la comunidad, debido a que la Anla, en el seguimiento ambiental, se los ordenó.
"El Concesionario desde noviembre del 2019 (3 meses después de la firma del acta de inicio de construcción) inició los acercamientos con Parques Nacionales Naturales – PNN con el fin de conocer la zonificación ecosistémica de la religión de Santander y del país, con el fin de una aproximación donde es posible establecer las equivalencias ecosistémicas obligadas por la licencia y desde enero del 2020 con la nueva administración de la CDMB con el fin de establecer con mayor precisión los pasos a seguir para lograr convenios y concertar los tipos de compensaciones exigidas", aseguró Autovía, respecto a la compensación.
La consesionaria está reubicando algunas orquídeas en los cerros.
Temor por la avalancha
El personero de Floridablanca, Luis Escamilla, puso en conocimiento de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, Anla, que la “comunidad reportó fotografías de la gran cantidad de troncos y cortes de árboles que reposan en el cause del río Frío y sus afluentes menores”. Esto como una forma de advertir que es urgente tomar medidas preventivas para la época invernal que se aproxima.
Sin embargo, SEMANA conoció la presentación que hizo la Alcaldía de Floridablanca y la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres sobre la avalancha. En el informe no se nombra al proyecto de infraestructura como la causa de la emergencia. Aseguran que el punto de origen de la avalancha fue la “quebrada Aurora afluente de la quebrada La Judía que desemboca al río Frío, fuente principal que sufrió saturación de material, que formaron en su encuentro una avalancha”.
Además, explican que el crecimiento del río -con registro de ocho metros de altura- no es un fenómeno nuevo, hace 15 años ocurrió, por lo tanto “es el periodo de repetición de la fuente hídrica río Frío y Judía”.
Autovía también aseguró que la obra no tiene nada que ver con la avalancha. "La concesión vial interceptará el Río Frío a la altura del PR7+100 en el futuro puente No. 12 de la conectante C1-C2, estas obras no han comenzado y no se ha hecho ninguna intervención, por lo tanto, no hay ninguna relación con el desbordamiento ocurrido el 28 de enero de 2020 en el municipio de Floridablanca", explicaron.
Gráfico de Autovía.
La carretera sí, pero no así
La construcción de la vía siempre ha tenido oposición ciudadana, no porque no quieran que se haga la carretera, si no porque consideran que no debería pasar por los cerros orientales que circundan la ciudad y que quedan tan cerca del Cerro de la Judía -conocido como la estrella hídrica de la región-. Además, advierten que se incrementará la congestión vehicular sobre la Autopista y Anillo Vial, por donde tendrán que pasar los vehículos de carga pesada que provienen de la Costa y Medellín para llegar a la Conectante.
Proponen que se evalúe a fondo la posibilidad de hacer la vía por otro trazado que estuvo entre las opciones, para que la carretera pase por el corregimiento de Sevilla, en Piedecuesta, y salga al kilómetro 40 de la vía Bucaramanga-Pamplona. Al ser consultada al respecto, la Agencia Nacional de Infraestructura, ANI, explicó que en el momento en que se estaba estructurando el proyecto presentaron a la Anla tres alternativas, pero la autoridad ambiental concluyó cuál era la mejor -la que están construyendo- y no pidió que se hiciera un diagnóstico ambiental de las otras alternativas.
Justamente, tras la avalancha y previendo que la situación pueda agravarse en un futuro, un grupo de vecinos de Floridablanca están alistando una nueva demanda ante el Tribunal Administrativo de Santander. Su argumento será que el estudio de impacto ambiental del proyecto dice que en la zona del trazado existen 57 nacederos de agua identificados, de los cuales 20 estarían a menos de 100 metros del eje de la vía, lo cual no está permitido.
Este argumento es nuevo, sin embargo, no es el primer recurso jurídico que utilizan, en este momento hay una acción popular en segunda instancia ante el Consejo de Estado. En primera instancia el Tribunal Administrativo de Santander le dio vía libre al proyecto, asegurando que contaba con la licencia ambiental de la Anla. Sin duda, esta vía 4G, que vale 1,4 billones de pesos, seguirá en el foco de los santandereanos.
*Fotografías Astrid Suárez / SEMANA