Antes del regreso a clases, niños y niñas deben recibir vacunas contra el sarampión y la rubéola

Los niños y las niñas del país, más con el regreso a clases programado durante la reapertura que comenzó el 8 de junio, deben recibir las vacunas del plan ampliado de inmunización, para que regresen a las aulas con su carné al día. Uno de los requisitos establecidos por el Ministerio de Educación para el regreso a las aulas en medio de la pandemia, es tener el documento actualizado.

Por su parte, el Ministerio de Salud tiene el objetivo de inmunizar a 7.588.401 de niños y niñas nacidos entre 2010 y 2019, para lo cual hizo un llamado a los padres, madres y cuidadores de niños(as) entre 1 y 10 años, para que los lleven a la vacunación contra a el sarampión, la rubéola y el síndrome de rubéola congénita, enfermedades que pueden causar malformaciones, discapacidades y muerte.

Desde el 24 de abril, la cartera está adelantando una campaña nacional de 12 semanas y después de cinco, 1.454.236 han recibido una inyección, lo que solo es el 23 % de la meta general.

“Entendemos que estamos concentrados en la vacunación contra la covid-19, pero no podemos descuidar la inmunización contra otras enfermedades igual o más letales”, afirmó Claudia Cuéllar, subdirectora de Enfermedades Transmisibles del Ministerio de Salud. “Por eso, insistimos para que lleven a los niños a vacunar y reciban este refuerzo”.

De acuerdo con Cuéllar, la dosis que están aplicándoles a los niños y niñas actualmente es adicional a las otras dos que deben tener para completar su esquema normal de inmunización. La idea final es garantizar la erradicación completa de estas enfermedades en el territorio nacional.

Cabe recordar que desde 2014 Colombia recibió la certificación como país libre de sarampión, rubéola y el síndrome de rubéola congénita, y a la fecha hay registros de ningún caso de sarampión.

En 2019, el país fue recertificado por el esquema, el refuerzo y el fortalecimiento del programa ampliado de inmunización. A la fecha no hay casos de sarampión, salvo por uno que fue importado en 2020. Además, entre 2018 y 2019 el país vivió un brote de la enfermedad por casos importados que requirió un trabajo intenso de dos años para erradicarlo.

“Eso no puede volver a pasar. Así no tengamos ningún brote hay que seguir vacunando, pues por cada posible caso de sarampión positivo en una comunidad hay 15 o 18 más. Es altamente contagioso, mucho más que lacovid-19”, explicó la epidemióloga Jacqueline Palacios González, quien también integra el equipo de planeación de vacunación contra el sarampión y la rubéola en Colombia.

En el país la inmunización es totalmente gratuita. De acuerdo con el Ministerio de Salud, en el país hay 2.500 puntos habilitados y dispuestos para recibir a la población objeto de vacunación.

“Los padres deben recordar que cuando vacunan a un niño, lo están protegiendo contra otras enfermedades, pero también protegen a las generaciones futuras”, concluyó la epidemióloga.

Cuando niños y niñas no reciben las dosis de las vacunas o los padres aprovechan la posibilidad de prevenir patologías a través de la inmunización de sus hijos. Sin esto, pueden presentarse graves secuelas como que los menores de 6 años fallezcan por el sarampión y la rubéola, que otros presenten problemas cerebrales, entre otros.