Asesinan a otro indígena en el Cauca

Un nuevo hecho de sangre contra los indígenas fue perpetrado por desconocidos en la noche de este lunes 26 de agosto, en zona rural del municipio de Caloto, al norte del Cauca.

La víctima fatal de ese atentado sicarial fue identificada como Iván Mejía, un joven comunero de 24 años perteneciente al resguardo indígena López Adentro. El ataque criminal fue ejecutado en el sector conocido como La Bocatoma, muy cerca al corregimiento El Palo, jurisdicción de Caloto.

Con ese asesinato ya son 37 los indígenas del norte del Cauca que han sido víctimas fatales en lo corrido del año, a lo que se suman las amenazas contra 55 de ellos y atentados contra otros ocho.

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Ese homicidio sucede un día después de otro ataque criminal contra las comunidades indígenas. Ocurrió en zona rural del municipio de Suárez y las víctimas, que salieron ilesas, eran 40 indígenas entre niños, mujeres, ancianos y guardia indígena, además de docentes integrantes de la unidad administrativa, quienes hicieron parte de una comisión humanitaria en el territorio. Todos viajaban en un bus tipo escalera.

“Siendo las 3:30 p.m. del día domingo 25 de agosto del 2019, se presenta un hecho violento en contra de comuneros del resguardo indígena nasa de Cerro Tijeras en el municipio de Suárez Cauca”, denunciaron.

Los indígenas nasa explicaron que los hechos ocurren en el sector conocido como La Estrella, “(…) el ataque se realiza desde la zona montañosa de la vía, lado izquierdo logrando introducir 5 impactos de bala en la parte delantera del bus escalera; afortunadamente el ataque violento no deja heridos y hechos que lamentar”, narraron en un comunicado que hicieron público.

Justamente la semana que acaba de pasar fue una de los más inseguras para la comunidad nasa que vive en esa zona del país. El 14 de agosto las autoridades indígenas denunciaron la circulación de un panfleto intimidante en el que se declara a varios de los coordinadores indígenas como “objetivo militar” de un grupo disidente de las Farc, que se hace llamar Dagoberto Ramos.

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“Este panfleto menciona represalias en contra de los Kiwe Thegnas por el ejercicio legítimo de control territorial, defensa de la vida y el territorio de Çxhaba Wala Kiwe – ACIN. En concreto, se refiere a una “respuesta militar” contra el coordinador regional de guardia indígena Albeiro Camayo, el coordinador de la zona norte Oveimar Tenorio y el coordinador del resguardo de Huellas, Caloto, Héctor Casamachín”, denunciaron a través de un comunicado los gobernadores de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca, Acin.

Los coordinadores indígenas agregan en el documento que, “con un discurso supuestamente revolucionario y “socialista”, este grupo armado pretende disfrazar sus intereses económicos sobre el narcotráfico y el control de los cultivos de uso ilícito que han ayudado a propagar en los territorios indígenas, campesinos y afrodescendientes del norte del Cauca”.

E insisten en que esas amenazas de muerte que vienen recibiendo por su labor autónoma de control territorial “(…) no responden a ningún proyecto político revolucionario, sino a la mezquina ambición del narcotráfico”.

Lo paradójico es que todos esos hechos violentos ocurrieron justamente la misma semana en la que se desarrolló la reunión de seguimiento de la Comisión de Paz del Senado de la República y que tuvo lugar en Caloto.