JUDICIAL

¿Por qué se retractó el principal testigo del caso Surtifruver?

Mauricio Parra pasó de incriminarse como coautor del asesinato del dueño de Surtifruver, en asocio con la viuda, a retractarse de todo lo que le contó a la Fiscalía.

23 de enero de 2018

“De forma voluntaria, libre de todo apremio y sin presión alguna, me retracto de todas las declaraciones efectuadas en el proceso de negociación con la Fiscalía General de la Nación”, eso reza la breve comunicación que hizo llegar Mauricio Parra Rodríguez al expediente por el crimen de Alonso Orjuela, el joven empresario creador de Surtifruver y asesinado el 20 de octubre de 2016. Expediente que Rodríguez encabeza como autor determinador del crimen en una turbia alianza con la viuda Cecilia Rueda, según la confesión que este mismo entregó y de la que ahora se retracta.

La Fiscalía detuvo a Parra, de 51 años, el pasado 3 de septiembre cuando se aprestaba a tomar un vuelo rumbo a México en compañía de una de sus hijas. La joven también fue capturada. En ese momento se señaló que Parra era un importante testaferro de las Farc, pero más adelante trascendió que estaría implicado en el crimen de Orjuela, con quien el sospechoso había tenido una sociedad fracasada en un cultivo de arándanos. 

Del frustrado negocio lo que sí surgió, según la Fiscalía, fue una relación íntima entre Parra y Cecilia Rueda, esposa de Orjuela. El creador de las tiendas Surtifruver y Rueda conformaban un matrimonio malavenido y estaban en trámites de separación. La tesis del ente acusador es que el crimen fue maquinado por Rueda y Parra con el propósito de quedarse con el patrimonio de Orjuela. Y que el plan habría contado con el auspicio de la guerrilla.

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El planteamiento de la Fiscalía pareció consolidarse el 28 de noviembre pasado cuando sorpresivamente se dio la aprehensión de la viuda. El fiscal del caso logró que un juez legalizara la su captura de Rueda exponiendo un testimonio que parecía inapelable. Se trató de la confesión de Parra quien aseguró que al menos en tres oportunidades la mujer le planteó la idea de asesinar a Orjuela para así lograr quedarse con todos sus bienes. 

La Fiscalía, además de la confesión de Parra expuso el relato de otro testigo llamado Francisco Bahamón, quien aseguró que este le ofreció 20 millones de pesos por asesinar a Orjuela. Así mismo, los investigadores aportaron un análisis de los teléfonos celulares del que se deduciría que la confesión de Parra era consistente con las evidencias técnicas del día del crimen. Parecía que el caso estaba resuelto. Pero ahora Parra acaba de retractarse. 

Desde la cárcel el sospechoso firmó el oficio en el que afirma que lo que dijo fue en el marco de un intento de negociación con la Fiscalía y que ahora que esa opción naufragó todo su relato debe ser anulado “no autorizo el uso de mi dicho en ninguna actuación judicial”, se lee en el documento. 

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La Fiscalía formalizó la imputación contra Parra hoy en los juzgados de Paloquemao, al occidente de Bogotá. La diligencia se cumplió sin la presencia del acusado, que permanece detenido en la cárcel La Picota. El fiscal del caso señaló que Parra debe responder por el delito de “homicidio agravado en calidad de determinador”. Lina Orjuela, Luisa Fernando Orjuela y Yesid Camilo Orjuela, hijos del empresario asesinado se hicieron presentes en la audiencia. Otros familiares de Alonso Orjuela también acudieron a la diligencia judicial. 

El abogado defensor de Parra, Andrés Guzmán, atendió la diligencia y aseguró: “Todo esto es un montaje. Esta defensa demostrará no solo que esto es un montaje sino que realmente la muerte del señor Orjuela obedeció a un crimen pasional y no un crimen económico con la implicación de las Farc como lo plantea la Fiscalía”. 

El abogado insistió en que las afirmaciones iniciales de Parra –de las que ahora se retracta– son inválidas: “Todo lo que dijo fue fruto de presiones y se retractó de todo”, puntualizó. 

La Fiscalía, despojada de la “confesión” de Parra, deberá hacer un esfuerzo mayúsculo para probar su teoría del caso. Por su parte, la defensa de Parra se dedicará a sustentar y convecer al juez que el asesinato se explica por razones pasionales ajenas al acusado y no por motivos económicos como lo afirma la Fiscalía.  

Contrario a lo que se advertía, el caso por el crimen del dueño de Surtifruver, Alonso Orjuela, está lejos de concluir.