Así es la historia de Javier Acosta y su pasión por Millonarios, quien se someterá a la eutanasia

La lucha de Javier Acosta, un ferviente seguidor de Millonarios, ha conmovido profundamente a Colombia, donde su historia ha tocado el corazón de muchos. Desde su niñez, Javier sintió una conexión especial con el fútbol, pasión que heredó de su abuelo. Recordaba con claridad cómo de joven se dejaba llevar por la energía de la multitud en las tribunas y cómo deseaba ser parte de esa comunidad unida por el deporte.

Sin embargo, el amor por el fútbol nunca interfirió en sus responsabilidades. Javier se dedicó a estudiar artes gráficas e inglés, y más tarde se desempeñó en el sector de autopartes. Su mayor fuente de orgullo, no obstante, fue siempre su papel como padre. En sus palabras, “todo lo que hago es por el bienestar de mi hija”.

A lo largo de su vida, Millonarios fue una constante fuente de alegría para Javier, aunque muchos intentaron disuadirlo de involucrarse demasiado por miedo a los peligros asociados. Pero Javier siempre respondió que su única intención era disfrutar del fútbol, no meterse en problemas.

Hace cinco años, a pesar de las advertencias de su madre, Javier se dirigió en moto desde Bogotá al estadio Doce de Octubre para ver a Millonarios enfrentarse a Cortuluá. A su regreso, un trágico accidente en la carretera marcó un antes y un después en su vida. Su hermana Ingrid recordó la angustia que sintió al enterarse del accidente y de la gravedad de la lesión que dejó a Javier sin movilidad en las piernas.

Despertando en el hospital, Javier se enfrentó a la dura realidad de que quedaría parapléjico de por vida. Este diagnóstico lo obligó a depender completamente de su familia para todas sus necesidades básicas. A pesar de este devastador golpe, su hermana lo alentó a seguir adelante, especialmente por el bien de su hija.

Con el apoyo incondicional de su familia, Javier comenzó un arduo proceso de rehabilitación en Teletón. Aunque los primeros meses fueron extremadamente difíciles, su determinación lo llevó a superar los obstáculos, logrando avances significativos, desde gatear hasta ponerse de pie y caminar nuevamente. Su primer paso tras nueve meses de rehabilitación fue un momento de inmensa satisfacción y orgullo personal.

Pero la batalla de Javier estaba lejos de terminar. Cinco años después, como él aseguró en un video en su perfil de Facebook, una bacteria contraída en una piscina en Melgar complicó su recuperación, y la infección resultante se extendió rápidamente, afectando gravemente su salud. Para empeorar la situación, los médicos descubrieron que Javier también padecía cáncer en la sangre. La gravedad de su condición lo llevó a tomar una decisión desgarradora: someterse a la eutanasia.

En un video lleno de emoción, Javier expresó su agradecimiento a su familia y amigos por el apoyo y les pidió que lo acompañaran en su despedida. Con su característico humor, comentó que desde el cielo alentaría a su equipo de toda la vida, Millonarios.

Javier Acosta se despedirá el 30 de agosto de 2024, dejando tras de sí una historia de lucha, amor y pasión que seguirá viva en quienes lo conocieron. Aun en sus últimos días, el fútbol, y especialmente Millonarios, permanecerán en su corazón.