Los campistas fueron rodeados por el Esmad hacia las 2:00 a.m. | Foto: @Bogota__DC / Twitter

BOGOTÁ

Controversia por desalojo del ‘Campamento por la paz’

En la madrugada de este sábado, cerca de 30 personas fueron desalojadas de la Plaza de Bolívar por el Esmad de la Policía. Denuncian agresiones. La Alcaldía de Bogotá responde.

19 de noviembre de 2016

Luego de 49 días de presión, algunos líderes del Campamento por la paz se fueron de la Plaza de Bolívar al considerar que se había cumplido el objetivo de su presencia al haber un nuevo acuerdo de paz. Aunque la decisión fue tomada en una asamblea con los campistas, la mayoría no estuvo de acuerdo en retirarse.

Justo en la madrugada del sábado, luego del primer día de ‘Salsa al parque’ y hacia las 3:00 a.m. cerca de las 30 personas que decidieron quedarse en el campamento fueron desalojadas. En redes sociales hay denuncias sobre presuntas agresiones por parte del Esmad de la Policía Nacional.

Vea: Las horas críticas del campamento por la paz

Álex Sierra, uno de los voceros del campamento, se declaró “sorprendido y conmovido” por el trato que recibieron los campistas.

“A las 2:00 a.m. llegó el Esmad y encerraron el campamento. Hubo cerca de 300 hombres, una cosa abrumadora. Violentaron a muchos compañeros, a una chica, poeta, le fracturaron un dedo y la desnudaron”, le contó a Semana.com Sierra.

Las críticas hacia la Policía y Alcaldía de Bogotá arreciaron en la mañana del sábado. Ante esto, el Distrito publicó un comunicado en el que sostiene que el levantamiento fue tras un acuerdo con los líderes y con “visto bueno de la Presidencia teniendo en cuenta que ya se había cumplido el propósito”.

Juliana Bohórquez, una de las líderes que inició el campamento, dijo que fue testigo de cómo “metieron personas a la fuerza en camionetas”. Además añadió que “con la Alcaldía nunca hubo un acuerdo de desalojo”, a la vez que rechazó las acciones de la Alcaldía por ir “en contra de la paz”.

Una de las razones para que algunos campistas decidieran quedarse fue la propuesta de una firma simbólica con el nuevo acuerdo al cual, según ellos, el jefe negociador Humberto de la Calle haría presencia el viernes.

“Decidimos que si no había claridad frente al tema de la firma, dijimos que era suficiente nuestra presencia allí, por eso nos retiramos. En cuanto al desalojo fue algo arbitrario por parte de la administración de Peñalosa”, le dijo a este medio Katherine Miranda, una de las líderes que decidió retirarse del campamento voluntariamente el pasado viernes.

“Nunca hubo una orden desalojo, nunca hubo un funcionario que explicara qué estaba pasando. Pero nosotros decidimos ser pacifistas y no reaccionar a provocaciones”, explicó Sierra.

Mientras los campistas desalojados deciden qué hacer, en Twitter ‘Esmad’ y ‘campamento’ han ocupado los principales espacios de conversación.

“Si en la Plaza de Bolívar hacen operativo Esmad a las 3 a.m. ¿qué harán en las veredas del Putumayo o Guaviare?”, se preguntó la representante Angélica Lozano.

Por su parte, el ministro para el Posconflicto, Rafael Pardo, trinó:

Aunque la mayoría de comentarios han sido críticas hacia la Alcaldía y la Policía, hay quienes también sostienen que ya era hora de levantar el campamento ante el nuevo acuerdo de paz. Los campistas agredidos insisten en que iniciarán acciones contra las “irregularidades” en el desalojo.