Así fue la protesta que pidió la renuncia del fiscal

La protesta de este 11 de enero contra el fiscal Néstor Humberto Martínez y con la petición de que deje su cargo, catalogada en redes sociales con el hashtag #RenuncieFiscal, se tomó algunas ciudades del país. 

Sobre las 6:30 de la tarde, la plaza al frente del búnker de la Fiscalía en Bogotá se levantó a gritos. Cientos de personas que salieron a pedir la renuncia del fiscal general, Néstor Humberto Martínez, celebraron que se bajara del asta la bandera del ente investigador. Quienes alcanzaron a llegar hasta las cuerdas que la sostenían la arrancaron con violencia; una vez abajo la quemaron.

Horas después voceros de la Fiscalía manifestarían su rechazo por los "actos de vandalismo" que terminaron con la quema de la bandera de la entidad.

En este ambiente se desarrolló a esa hora una manifestancion inédita para pedir la salida del fiscal general. Los asistentes le reclamaron por todos los escándalos que ha afrontado durante las últimas semanas.

Un hombre sobresalía de la multitud. Con un altavoz y un celular en la mano adviertía que le entraba una llamada. Era de alguien identificado como Yamhure. El manifestante repetía una y otra vez la escena reviviendo el momento en que a Martínez le entró una llamada del reconocido militante uribista en plena entrevista con Caracol TV.

“Fiscal, corrupto, el pueblo ya está puto”, gritaba la gente que acudió al lugar de encuentro con pancartas, máscaras, linternas y tarros de agua en rechazo al cianuro.

—¿Un té?
—No gracias, soy alérgico al cuento, dice uno de los carteles.

A la marcha asistieron familias, profesores, exfuncionarios de la Fiscalía; pero fueron miembros de organizaciones de oposición los que se tomaron la marcha, que finalizó sobre las 10 de la noche. “Esos son los que roban la Nación”, gritaban mientras un helicóptero vigilante daba vueltas sobre la plazoleta.

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Todos llegaron a pedir la renuncia de Martínez, pero aprovecharon para lanzar pullas al gobierno, a Uribe y hasta gritaron por la libertad de Santrich. Incluso hubo de tiempo de protestar por la aplicación de más impuestos.

"¡A las calles a tumbar al corrupto del fiscal!", gritaba la gente y reclamaba por las grabaciones de Jorge Enrique Pizano, en donde le informan de sus sospechas de corrupción en millonarios contratos "chimbos".

En corrillos se cuestionaba el procedimiento de Medicina Legal para esclarecer la muerte de Pizano y de su hijo, incluyendo la responsabilidad de la entidad en la valoración de las muestras médicas.

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En medio de la efervescencia, los asistentes hicieron un minuto de silencio por los líderes sociales y los testigos muertos del caso Odebrecht. Con los puños levantados las personas silenciaron sus arengas. “Fiscal general, vergüenza nacional”, fue la primera frase que entonaron después del homenaje.