En nueve días se selló la fórmula De la Calle y Clara López

Nueve días exactos se necesitaron para que la alianza entre Humberto de la Calle y Clara López Obregón quedara finiquitada. Si bien los puentes se habían tendido desde hacía varias semanas, el paso definitivo estaba pendiente por darse. Dependía de la que resultó siendo la malograda consulta de la izquierda.  

Los lazos los comenzó a tender el exministro Juan Fernando Cristo luego de ser derrotado en la consulta liberal por De la Calle. Cristo y López fueron compañeros del gabinete de Juan Manuel Santos e incluso tienen una relación cercana desde hace varios años.

Los tres -pero desde distintos frentes- tienen coincidencias ideológicas en torno a la defensa de los acuerdos de paz con las Farc como bandera política y, bajo esa bandera, se sentaron a dialogar un par de veces para explorar la posibilidad de unirse en torno a una candidatura en defensa del fin de la guerra.

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El obstáculo, si se quiere, es que Clara López ya estaba en acercamientos con los candidatos por firmas Gustavo Petro y Carlos Caicedo, con quienes llegó a aceptar una consulta en las elecciones del Congreso, el 11 de marzo, para definir a un candidato único de izquierda. Hubo foto del acuerdo inicial. 

Tanto avanzaron los diálogos en este sentido, que los tres acordaron promover candidatos conjuntos al Congreso y los inscribieron con el nombre de la ‘Lista de la decencia‘. La intención es que los tres aspirantes presidenciales recorrieron el país, algunas veces juntos, promoviendo a los integrantes de su plancha, pero eso ahora quedó en veremos.

El domingo 21 de enero, tras una larga reunión en Bogotá, Clara López decidió dar un paso al costado en esta alianza de izquierda y se marginó de la consulta. Petro y Caicedo, por su parte, sí continuaron con la interpartidista y el 11 de marzo se medirán en urnas. Es más, al día seguinte, públicamente la todavía candidata dijo que toda la consulta se había caído, pero lo cierto era que los otros dos integrantes habían decidido seguir y -al parecer- ella no fue notificada previamente.

Ante esa situación, y aprovechando los puentes que se habían tendido con Cristo, De la Calle y López recuperaron su comunicación y acordaron un nuevo encuentro para determinar qué papel podría jugar ella en la campaña del candidato del Partido Liberal. Ya se habían dado un par de citas previas y un intercambio epistolar que, incluso, incluyó al expresidente César Gaviria, jefe de la colectividad roja.

En ese nuevo primer encuentro -justo la semana pasada- Clara reconoció que la consulta con Petro y Caicedo se había frustrado, entre otras cosas, por la negativa de otros sectores de centro y de izquierda de sumarse a ella. No son pocas las voces que aseguran que los exalcaldes de Bogotá y Santa Marta, respectivamente, generan resistencia por sus tesis más dogmáticas sobre el manejo del Estado.

Ante esa situación, y ya con la posibilidad sobre la mesa de que De la Calle y López hicieran fórmula para la primera vuelta del 27 de mayo, se comenzó a construir un consenso sobre los asuntos programáticos que podían impulsar conjuntamente. Hubo varios cafés de por medio y un constante contacto telefónico.

Gaviria, a mediados de la semana, dio su visto bueno, aunque no se involucró de lleno en la construcción de la fórmula por dos razones en específico. Por un lado, aún mantiene diferencias con Cristo, quien ha cuestionado su legitimidad en la dirección liberal; por el otro, quiere impulsar sus listas al Congreso para evitar perder curules en el Capitolio.  

Entre estos ires y venires, de muchos mensajes y análisis de acuerdos, se dio una cita definitiva este lunes. En la oficina particular de De la Calle, él y Clara López acordaron enfrentar juntos la primera vuelta presidencial y esperar a después del 27 de mayo para explorar la posibilidad de aliarse con quienes ahora van solos: Petro, Sergio Fajardo y, eventualmente, Piedad Córdoba.

"Es una alianza de centro comprometido con la consolidación de la paz sobre la base de buscar una sociedad igualitaria y ecológica", le dijo Clara López a SEMANA sobre su decisión de aceptar ser la fórmula vicepresidencial del liberalismo.

Las reacciones, por su puesto, no se hicieron esperar. Germán Vargas Lleras, candidato por firmas y líder de Cambio Radical, calificó este paso como un "grave error" del liberalismo y dijo que, por cosas como esta, fue que decidió salirse hace varios años del partido.

"Veo eso de manera muy escéptica y ahora sí el liberalismo se fue para la extrema izquierda", aseguró Vargas, quien agregó que "por errores como esos, errores del pasado como el proceso 8.000, fue que muchos liberales nos fuimos marginando de esa colectividad".

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Y Gustavo Petro, con un aire de sentimiento contrario por la decisión de Clara, dijo en declaraciones a RCN Radio que “en la lucha política y social (...) hay muchos desengaños, como en los amores, entonces uno se acostumbra”.

Lo cierto de todo esto es que cada vez se decantan más las tendencias ideológicas de los aspirantes presidenciales, ya que la centro izquierda buscará juntarse para segunda vuelta y en la derecha ya se comenzaron a tender puentes para la misma jornada. La política es dinámica y eso quedará aún más en evidencia con las llaves electorales que se avecinan.