Bogotá
Presuntos asesinos de la periodista Natalia Castillo fueron capturados
La periodista que trabajaba con la ONU fue asesinada el pasado 24 de diciembre en un atraco en Galerías, cuando salía de un bar de la zona.
Después de un mes y medio de investigaciones, las autoridades capturaron en las últimas horas a los presuntos responsables del asesinato de la periodista de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Natalia Castillo.
SEMANA conoció que son dos las personas capturadas, Ángel Rolando Colino Lugo y Anderson de Jesús, quienes fueron presentadas ante un juez de control de garantías y deberán responder por los delitos de homicidio agravado y hurto calificado. Este sábado 12 de febrero a las 6:00 p. m. comenzaron las audiencias de legalización de captura.
La captura se hizo efectiva en un operativo que adelantó la Sijín este viernes 11 de febrero en la capital del país.
La joven periodista, de 31 años, perdió la vida el pasado 24 de diciembre cuando hombres la interceptaron para robarla en el sector de Galerías, muy cerca del estadio El Campín de Bogotá.
Castillo se encontraba departiendo con unos amigos en un bar, cuando decidió salir un momento del establecimiento comercial a hablar por su celular.
En ese momento, Castillo, quien al parecer se encontraba con más personas, fue abordada por varios delincuentes que a sangre fría no solo decidieron hurtar sus pertenencias, sino que también le dispararon con arma de fuego en su tórax causándole una grave herida que la tuvo entre la vida y la muerte por algunas horas.
Sus amigos y vecinos la trasladaron a urgencias en la Clínica Palermo, ubicada en la misma localidad, donde lamentablemente falleció.
Castillo se desempeñaba como asesora de comunicaciones de la oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc).
Desde el momento de los hechos, un fiscal de la Unidad de Vida asumió la investigación y ordenó la recolección de pruebas documentales y testimoniales para identificar y ubicar a los delincuentes. Esta investigación habría dado frutos después de un mes y medio de sucedido el crimen.
Entre las pruebas recolectadas se encuentran los videos de las cámaras de seguridad del establecimiento donde se encontraban Castillo y sus amigos, así como los videos de las cámaras de seguridad que se encontraban en este sector de la localidad de Teusaquillo.
Por la captura de estas personas las autoridades estaban ofreciendo 50 millones de pesos para quien ofreciera información que pudiera dar con el paradero de los mismos.
En su momento, los amigos de Natalia Castillo la recordaron como una persona apasionada por su trabajo, amante de su país y con grandes ambiciones, y por eso estaba buscando oportunidades en el exterior. “Ella quería irse y seguir estudiando, ella iba en bici para llegar a su trabajo en Unodc; estaba cargada de sueños”, manifestó Carlos Arias, compañero de Castillo.
En diciembre, el comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, general Eliécer Camacho, reveló que la Policía tenía un testigo clave, el cual iba a permitir esclarecer los hechos en los que perdió la vida la periodista. Según las declaraciones de ese momento, el testigo tenía conocimiento de quiénes serían los directos responsables que robaron y posteriormente asesinaron a Natalia Castillo.
Además de este testigo, el general Camacho aseguró que tenía en su poder las cámaras de seguridad que mostrarían el destino final del vehículo del cual descendieron los presuntos delincuentes.
Le cortaron las alas
En entrevista con SEMANA, Nelson Castillo habló de su hija, de su legado, del periodismo y de la solidaridad que ha recibido la familia tras el crimen de Natalia.
“Realmente es demasiado doloroso para muchas familias que sufren situaciones como la que, desgraciadamente, nos tocó a nosotros. Es algo tan fuerte, tan doloroso lo que estamos viviendo. Este es el día a día que tenemos en nuestra ciudad, en nuestro país”, señaló visiblemente conmocionado.
Nelson Castillo expresó cuál era el mayor recuerdo que tenía de su hija. “Era una persona de mucha alegría, de mucho amor. Todos los momentos con ella fueron únicos no solo conmigo, con todos, con toda mi familia, con sus amigos. Era una persona que irradiaba muchas cosas bonitas. No porque fuera mi hija, pero era una persona incomparable”, dijo.
Y puntualizó lo siguiente: “Desbarataron muchas cosas en nosotros. Me le cortaron las alas. Ella quería hacer muchas por este país. Hablaba de paz, de que las cosas en ese país tenían que mejorar. Es doloroso realmente porque luchó por muchas causas, muy bonita”.